Raro sería que este año alguien no se planteara utilizar su móvil para inmortalizar buena parte de sus vacaciones. La calidad de la cámara de los móviles actuales es más que suficiente para tener un recuerdo de nuestro viaje, pero… ¿quién nos garantiza que esas instantáneas llegarán con nosotros de vuelta a casa? ¿Y si se nos cae el móvil al agua y no conseguimos que vuelva a encenderse? ¿Y si nos lo roban? Y si…

Los contratiempos en vacaciones están a la orden del día, y por ello creemos que es imprescindible que tengáis a vuestra disposición una guía básica con lo que vendría a ser la preparación imprescindible para evitar que un imprevisto nos suponga, además del disgusto lógico, la pérdida de todas las fotografías de un viaje.

1. La copia en la nube, tan imprescindible como fácil de hacer

Es muy sencillo: si tienes una copia de tus fotografías continuamente sincronizada con la nube, ya puede pasar por encima de tu móvil un tanque de la 2ª Guerra Mundial que aún así podrás acceder tranquilamente a todas tus imágenes en cuanto vuelvas a casa. Pero, claro, ¿y qué servicio para mandar tus fotos a la nube debes elegir si nunca has utilizado una aplicación de este tipo?

Si no quieres complicarte la vida, Google Fotos es la aplicación que mejor se adapta a tus necesidades. Te descargas la aplicación desde Google Play (es completamente gratuita, e incluso es probable que ya venga instalada de serie en tu teléfono), dejas activada la opción de «Crea una copia de seguridad de tus fotos y vídeos» que se te mostrará en la primera pantalla y ya tienes media tarea hecha.

Pero falta la otra mitad, con el único detalle de que esta última configuración es opcional. Si lo que quieres es tener la certeza de que hasta la última foto que tomas está subida a la nube, dentro de la aplicación deberás desplegar el menú lateral (está bajo el icono de las tres líneas paralelas), entrar en «Ajustes», acceder al apartado de «Crear copia de seguridad y sincronizar» y, abajo, activar la opción de «Fotos» debajo del título de «Usar datos móviles para las copias de seguridad«.

¿Y qué se consigue con esta opción? Que cada una de las imágenes que tomes con la cámara de tu móvil se sincronicen automáticamente con la copia de seguridad, incluso aunque no tengas acceso a una red WiFi y estés utilizando la tarifa de datos. Para esta opción, tal y como te puedes imaginar, es necesario que dispongas de una generosa tarifa móvil.

2. Y si no te fías de la nube, haz copias en una memoria externa

En un móvil Android compatible con el USB OTG tan solamente se necesita un adaptador para extraer las fotografías del teléfono directamente hacia una memoria externa tipo pendrive. Por ello, una alternativa al almacenamiento de las fotografías en la nube pasa por comprar un adaptador USB-OTG (cuesta un euro) y una memoria externa USB (puedes encontrarlas por tres euros).

De esta forma, cada vez que pases por casa o por el hotel tendrás la posibilidad de dejar hecha una copia física de todas las fotografías sin necesidad de tener acceso a un ordenador. Incluso aunque esa misma jornada se te rompiera el móvil, al menos tendrías aseguradas todas las fotografías que hubieras hecho hasta ese momento.

3. Si compras una microSD, no escatimes en gastos

A la hora de comprar una tarjeta de memoria externa, una mala elección puede echar a perder todos tus recuerdos de un viaje si te decides a confiar en una microSD para almacenar tus fotografías. Las imitaciones y las marcas de dudosa calidad están a la orden del día, así que antes de salir de viaje hazte con una tarjeta de una marca conocida en una tienda reputada. Samsung, SanDisk y Kingston son marcas que, más allá de experiencias personales aisladas, rara vez te dejarán tirado.

Bonus: Un ratón USB, el salvavidas si se te rompe la pantalla

Pero imaginemos que ya es tarde y que tienes ahora mismo en las manos un móvil aparentemente inservible con la pantalla rota. ¿Enciende? ¿Ves el contenido de la pantalla, pero no puedes pulsar ninguna opción? Todavía hay esperanza, ya que si tu móvil es compatible con el USB OTG podrás conectar un ratón USB para navegar por la interfaz y así enviar por correo, subir a la nube o hacer una copia de las fotografías que haya almacenadas en su interior.