La carga rápida es algo común en los smartphones disponibles en España. Hay diversos tipos de tecnologías, ya que muchas marcas tienen la suya propia, algunas de hasta 125W. En algunos cargadores nos encontramos con una nueva tecnología, que posiblemente hayáis visto. Se trata de la USB Power Delivery, un tipo de carga rápida.

USB Power Delivery es un nuevo tipo de carga rápida, que es compatible con determinados dispositivos Android, iOS y algunos ordenadores. Es una carga que destaca por ofrecer una gran potencia, permitiendo que los tiempos de carga en la misma sean más reducidos que en otros tipos disponibles actualmente.

Qué es USB Power Delivery

USB Power Delivery es una tecnología de carga rápida del consorcio USB. Como hemos mencionado, esta carga es compatible con modelos Android e iOS concretos. Una de las principales características de esta carga es que ofrece unos niveles de potencia más altos que la carga estándar, de modo que se obtiene una carga más rápida en todo momento. La firma cuenta con una serie de cargadores que usan esta tecnología.

Esta carga tiene la capacidad de cargar el teléfono hasta un 70% más rápido que la carga estándar de 5W. Gracias a esto, el teléfono pasará menos tiempo enchufado hasta que alcance el total de su carga. Además, esta tecnología permite cargar un buen porcentaje de batería en pocos minutos, haciendo que sea especialmente cómoda para esos momentos en los que necesitas cargar el móvil y tienes poco tiempo.

USB Power Delivery es compatible con todo tipo de dispositivos, desde portátiles a smartphones o tablets. Así que podrás usarla para cargar cualquier dispositivo en casa de forma sencilla. Si se trata de un dispositivo de mayor tamaño, aplicará más potencia, hasta un máximo de 100W.

Qué cargador hace falta

Para poder usar la carga rápida USB Power Delivery necesitas un cargador y móvil que  sea compatible con el estándar. El punto más característico para saber que un cargador es compatible con el estándar es que el puerto de salida del cargador es USB C, al igual que ambos extremos del cable.

Tener un cargador que tenga una potencia igual o superior a la que el teléfono acepta es una opción, sobre todo si tienes otros dispositivos que pueden cargar con este sistema. En caso contrario, un cargador con menos potencia, que será además más barato, es una buena compra.