Las compras on line están a punto de sufrir una revolución gracias a los asistentes virtuales. Así lo pretende Google con su Assistant: ya permite hacer compras con la voz en Estados Unidos.

«Ok, Google. Quiero un Pixel 2». Esta sencilla frase que podrías decir en voz alta también tiene visos de convertirse en una compra materializada. En pos de romper las barreras entre la Inteligencia artificial y el usuario, Google prescinde de las pantallas para habilitar la compra de productos on line utilizando solo la voz.

Decir «Ok, Google» y expresar un deseo de compra abriría la posibilidad de recibir en casa el producto sin que tengamos que introducir ningún tipo de confirmación ni de datos bancarios. Google tiene nuestra tarjeta en la cuenta, por lo que bastaría una confirmación verbal para efectuar el pago. Y, dado que se registran todos los comandos de voz, la orden quedaría como un comprobante claro de la intención de compra.

Facilidad de uso y sin perder el impulso de compra

Uno de los objetivos de cualquier comerciante, especialmente on line, es disminuir el tiempo y los pasos que transcurren entre que miras el producto de una tienda y terminas pagándolo. Lo que se llama comúnmente «impulso de compra» es primordial para subir el número de ventas: dado que la mayor parte de productos no son de uso básico, conviene que no pongamos demasiado esfuerzo ni tiempo en valorar si son idóneos o no para nosotros.

Permitir la compra con Google Assistant no solo hace más sencilla la transacción, también se favorece el impulso dado que no veremos físicamente el artículo ni tendremos tiempo a valorar su necesidad durante el «checkout» o proceso de pago. Target, una importante cadena de distribución estadounidense, y Google lo han visto claro: mayor inmediatez y una manera novedosa de venta a través de Internet.

Target y Google Assistant permiten la compra en Estados Unidos a través de la interacción mediante voz. El asistente conocerá cuáles son los productos habituales del usuario y podrá recomendar su compra mientras ofrece sugerencias en base a ellas. Google Assistant sabrá los tamaños que el usuario suele elegir para sus productos, por lo que hará los encargos sin excederse en las cantidades.

Google Assistant sabrá aún más de nuestros hábitos de consumo

Google sabe qué artículos miramos en Internet, la publicidad nos persigue allá donde vamos con el dichoso «retargeting» (cuando ves un producto en una página y después aparece en los anuncios de todas las webs que visitas) y ahora conocerá, incluso, qué tamaño escogemos y con qué frecuencia. Todo en pos de ofrecer una mejor experiencia de compra y, sobre todo, conseguir que esta sea mucho más rápida.

Las compras con Google Assistant son aptas para los Google Home y resto de dispositivos que incluyan el asistente, también en los smartphones. Funciona con el servicio «Google Express» que la empresa ofrece en Estados Unidos. Un servicio al que ahora se une la cadena de distribución Target.