Tras muchos años persiguiéndolo, parece que el 2016 sí acabará siendo el año de la realidad virtual. Y lo decimos no solamente porque es el año en el que llegarán al mercado productos como Playstation VR, Oculus Rift o las HTC Vive (que por cierto ya hemos analizado, y son geniales), sino que también es el año en el que Google se ha apuntado a la realidad virtual con una apuesta por todo lo alto: el proyecto de DayDream.

Y no, no hablamos de Cardboard, la plataforma de realidad virtual con la que Google nos impresionó hace unos años, sino de una apuesta muy ambiciosa. Hablamos de Daydream, la plataforma de realidad virtual con la que Google pretende competir con el resto de gigantes de la realidad virtual.

¿Qué hace falta para que un móvil sea compatible con Daydream?

Uno de los principales motivos por los que Google Cardboard nos enamoró como plataforma de realidad virtual fue su capacidad para permitirnos adentrar en la realidad virtual a un precio realmente asequible. Con Cardboard bastaba con una caja de cartón y cualquier teléfono para introducirse en la realidad virtual. Con este nuevo proyecto, Google pretende hacer justo lo contrario, apuntando a la más alta gama de visores de realidad virtual.

Para ello, la compañía ha preparado una certificación para aquellos dispositivos que estén preparados para Daydream, y es que la nueva realidad virtual de Google probablemente no vaya a funcionar en tu teléfono, ya que sus requisitos son bastante elevados. En la actual generación, solo el Nexus 6P es compatible, y a pesar de que nuevos dispositivos como el ZTE Axon 7 estén siendo presentados con esta novedad por bandera, no existen garantías de que los actuales smartphones vayan a ser compatibles con Daydream.

Pero, ¿a qué puede deberse esto? En cuanto veáis los requisitos de Google Daydream entenderéis por qué prácticamente ningún móvil de hoy en día será compatible con esta tecnología.

Sensores de primera categoría

Uno de los principales motivos por los que un terminal no pueda ser compatible con Daydream reside en los sensores de movimiento. Los sensores de movimiento de un terminal en la realidad virtual son los responsables de detectar nuestros movimientos con la cabeza.

Existe un problema bastante común en los dispositivos de realidad virtual en los últimos años, siendo la causa de que se haya retrasado tanto la realidad virtual. El problema consiste en que las anteriores generaciones de sensores no detectaban nuestro movimiento con la velocidad y precisión requeridas, lo que provocaba a que los movimientos de la cámara de la realidad virtual se encontrasen en desfase con nuestros propios movimientos, provocando continuos mareos.

Por tanto, los teléfonos certificados para Daydream necesitarán unos sensores con muy poca latencia, alta precisión y una garantía de que no se descalibren durante su uso, unos sensores de una calidad que pocos teléfonos actuales tienen.

Una pantalla con baja latencia y alta resolución

Otro de los principales protagonistas de la realidad virtual es la pantalla del dispositivo. Si los sensores eran uno de los principales protagonistas de la realidad virtual, la pantalla es otra de las principales implicadas en los problemas de desfase en la realidad virtual.

De nada sirve que nuestros sensores capten a la perfección nuestros movimientos si después la pantalla presenta la información con desfase, lo que hace que ambos componentes sean imprescindibles para una experiencia premium. Por ello, es necesario que los smartphones compatibles con Daydream incluyan una pantalla con baja latencia y persistencia, imprescindible para conseguir eliminar algunos efectos como el motion blur, un efecto bastante molesto cuando la pantalla se mueve a gran velocidad.

Por otro lado, otro requisito imprescindible para la realidad virtual es que la pantalla tenga una elevada densidad de píxeles. Es cierto que con pantallas como full HD no notamos la diferencia de píxeles en el uso normal, pero a la hora de acercarnos tanto y usar lentes, la cosa cambia. A día de hoy no existen unas medidas mínimas, pero lo más probable es que las pantallas requeridas para obtener la certificación deban de ser con resolución 2K o superior.

Android N

A la hora de conseguir un producto de alta calidad, no basta con tener un hardware de primer nivel, sino que también es necesario un software a la altura. Google está trabajando para que Daydream sea uno de los dispositivos de realidad punteros, y para ello está construyendo una versión de Android 100% preparada para la realidad virtual.

Y efectivamente, esa versión no podía ser otra que Android N, la última versión del sistema operativo de Google que llegará a finales de año y que ya podemos probar en los dispositivos Nexus. Android N gestionará mejor los recursos de nuestro dispositivo para disfrutar de la realidad virtual sin problemas de rendimientos, mientras que también incluirá una interfaz adaptada para que las llamadas o notificaciones no rompan la experiencia.

Este quizás sea uno de los puntos más tajantes de Daydream. Si tu dispositivo no recibe Android N, no recibirá Daydream, y si será compatible con Daydream, recibirá Android N, así de simple.

Un procesador potente y eficiente

Y por último tenemos el procesador, corazón, cerebro y músculo de nuestros dispositivos móviles. Este componente no podía faltar en los requisitos para que un smartphone sea compatible con Daydream, y existen varias razones para ello.

La realidad virtual es una actividad que requiere muchísima potencia, debido a que debe renderizar dos puntos de vista (uno para cada ojo) a una frecuencia estable de 60FPS y en un tiempo de respuesta escaso. Si recordamos que seguramente sea necesario que la pantalla tenga una resolución 2K, un procesador gráfico (llamado también GPU) requerirá una elevada potencia, al igual que la CPU, que será en todo momento el vínculo entre todos los componentes del sistema.

Y claro, tanta potencia seguramente genere un gran calor, por lo que además será necesario que el procesador sera lo suficientemente eficiente. Ante esta premisa, mantenemos dudas sobre si el Nexus 6P con su Snapdragon 810 acabe siendo compatible, aunque quizás Google nos sorprende con unas gafas que sean capaces de disipar el calor.

Desde luego, Daydream VR es un proyecto muy ambicioso, aunque de momento es difícil determinar su éxito al mantener una filosofía tan opuesta a Cardboard.

Fuente | RoadtoVR
Más información DayDream Dev Kit