es una de las empresas más importantes en el sector móvil. Gracias a su arquitectura de procesadores, las marcas como Qualcomm, Samsung, MediaTek, Apple… han podido construir sus propios chips. Con el paso del tiempo algunos de estos fabricantes han ido variando esta arquitectura para introducir sus propias investigaciones, pero la base más importante siguen siendo los ARM Cortex.

Actualmente, desde hace ya dos años, tenemos los Cortex-A57 «Atlas» y Cortex-A53 «Apollo», los primeros SoC de 64 bits y compatibles con ARMv8. Muchos de los procesadores más conocidos como los últimos Snapdragon (a pesar de que Krait sea distinta) o los MediaTek están basados en estas arquitecturas.

ARM ahora a través de su CEO Simon Segars anuncia durante la presentación de sus resultados financieros, Maya y Artemis. Son los dos nombres en clave de la segunda generación de procesadores 64 bits y ARMv8. Tendremos un rendimiento por ciclo superior y un tamaño reducido. 

Maya, el potente de los dos aprovechará la ejecución «big» en big.LITTLE, mientras que Artemis, basados en CortexA53 hará lo mismo con la parte de menos energía. Uno centrado en obtener la máxima potencia y el segundo en reducir el consumo.

Es importante ver como ARM mejora sus arquitecturas cada cierto tiempo. Muchos pensábamos que mejorar los procesadores ya no tenía sentido, pero si no fijaos en los últimos juegos que están apareciendo de la mano de NVIDIA y como están exprimiendo estos límites. Pensad una cosa, si queremos trasladar la experiencia de Android al escritorio, como mínimo necesitaremos unos SoC tan potentes.