Un año después de la presentación del Google Pixel 2 XL volvemos a hacer una reseña con los pequeños detalles que nos hacen apreciar este móvil. Uno de los pocos terminales que un año después de su presentación sigue siendo una de nuestras recomendaciones a ciegas.

El Google Pixel 2 XL cumple un año y sigue siendo joven

Hoy hace exactamente un año que Google presentó su segunda generación de móviles Pixel. En aquel entonces seguíamos echando de menos a los Google Nexus ya que, aunque el Pixel de primera generación nos gustó, no parecía estar preparado para competir en el listón donde Google pretendía competir. Olvidar la calidad / precio y centrarse en crear el mejor móvil Android.

La evolución de un año para otro fue bestial. Parecía que sería el mejor móvil del año, pero se nota que Google aún necesita un rodaje como fabricante en solitario.

Normalmente un móvil de alta gama suele perder su atractivo con el paso del tiempo. A pocos días de conocer a su sucesor, el Google Pixel 2 XL sigue siendo un móvil muy atractivo. Sigue arrastrando defectos, pero mantiene virtudes que hacen que siga siendo un producto atractivo.

Los puntos débiles innegociables

Ya desde su primer día tenía una serie de puntos negativos que, si te importan, convierten a este móvil en un no, innegociable. Siguen estando ahí, y entendemos que cualquiera pueda descartar este móvil por estos apartados:

  • Una sola tarjeta SIM: si querías que tu móvil personal y de trabajo fuesen el mismo, mira a otro lugar.
  • Nada de ampliar memoria: ¿fan de las tarjetas microSD? Google no.
  • El jack se fue y no volverá. Si te has pasado a auriculares Bluetooth te dará igual, si eres clásico, el dongle es incapaz de conquistar tu amor.

Google Pixel 2 XL: Ficha técnica

  • Pantalla de 6 pulgadas P-OLED con resolución QHD y protección Corning Gorilla Glass 5.
  • Procesador Qualcomm Snapdragon 835.
  • 4GB de memoria RAM.
  • 64 y 128 GB de almacenamiento.
  • Cámara trasera y delantera con tecnología Dual Pixel. Estabilizador mecánico de imagen y chip de Google para el procesamiento de imágenes.
  • Nano SIM.
  • Cámara trasera de 12.2MP y f/1.8.
  • Cámara frontal de 8MP con f/2.4.
  • Doble altavoz frontal y sin jack de auriculares.
  • 3520 mAh de batería.
  • Android 8 Oreo.
  • Bluetooth 5.0
  • Medidas: 157,54 x 76,2 x 7,6mm.
  • 175 gramos de peso.
  • Otros: bordes activos Active Edge, chip de seguridad integrado, protección contra el polvo y agua IP67.

Muy bien en rendimiento y autonomía con Android Pie

Se trata de uno de los primeros móviles en recibir la última versión de Android, junto a los Pixel de primera generación y el Essential Phone. El mismo día que Google anunció la versión final ya la teníamos instalada en el móvil. Es el principal valor de un smartphone de Google.

No solo tiene el sistema más puntual de actualizaciones ya que Google trabaja con mucho cuidado el software de sus móviles: cuando recibes una versión nueva de Android tienes la certeza de que va a ir igual o mejor que antes de actualizar, rompiendo el mito de que las actualizaciones empeoran la experiencia de uso. A veces hay actualizaciones puntuales desafortunadas que rompen algo, pero en la siguiente actualización suele estar solventado.

No es el móvil más rápido del mercado, sí que lo era en el momento de su lanzamiento. Móviles como el OnePlus 6, con un software muy pulido y un procesador de nueva generación, le roban un poco el mérito. No es un problema, la velocidad del sistema y las animaciones de Android Pie están orquestadas para que casi todo se sienta fluido.

Mencionamos casi todo porque la navegación por gestos de Android Pie tiene ahí un trompicón que te hace sentir que no todo el sistema es tan rápido como debería. He intentado querer a los gestos de Android Pie, pero me siguen pareciendo más inmediatos los botones de Android.

La batería de este móvil me encanta. Es el móvil con una versión de Android limpia con mejor batería. Hay móviles chinos cuyas capas de personalización mejoran la autonomía, pero es a costa de limitar procesos. Por lo general tengo entre 6-7 horas de pantalla y una hora extra de escuchar podcast con la pantalla apagada. Realmente contento en términos de rendimiento y autonomía.

El aprecio por los pequeños detalles es lo que hace que ame este móvil

Antes de dar el salto al Google Pixel 2 XL estuve utilizando como móvil principal el OnePlus 5, un móvil con el que estaba muy contento pero que se quedaba a las puertas de la gama alta en varios apartados. Si miras la ficha técnica de uno y otro puedes pensar que no hay grandes diferencias, o incluso pensar que el OnePlus es mejor por tener más memoria RAM.

Nada más lejos de la realidad, el Google Pixel 2 XL tiene pequeños detalles en la experiencia de uso que si te gusta disfrutar del móvil al máximo te encantarán.

  • No tiene el mayor porcentaje de pantalla en el frontal, pero esto no quiere decir que esté mal aprovechada. El doble altavoz frontal es lo mejor de este móvil. Estoy harto de tapar con la mano altavoces que están junto al puerto de carga.
  • La vibración táctil es la mejor que hay en un móvil Android. Escribir en el teclado es una gozada, y el pequeño detalle de darte un feedback táctil al desplegar la cortina de notificaciones es muy agradable. Creo que la vibración del sistema podría integrarse de la misma manera en el resto de componentes de la interfaz Material.
  • Los bordes estrujables son el mejor método para llamar a Google Assistant. Ya cuando los probé en el HTC U11 me encantaron, y aunque los del Pixel 2 XL no se pueden personalizar sin root, acceder tan fácil al asistente es todo lo que necesito.
  • Now Playing es el Shazam automático que no esperaba tener, pero que adoro tener. El Google Pixel 2 XL es muy listo reconociendo canciones, lo puede hacer sin conexión y no tiene impacto en la batería. Si añadimos una aplicación llamada Now Playing History tendremos un registro de todo lo que ha ido reconociendo el móvil a lo largo del día. Si además utilizas un reloj Wear OS, cuando el móvil reconozca una canción podrás ver cuál es en el reloj, sin tener que coger el propio móvil.

¿Qué ocurrió con la pantalla? ¿Es tan mala como para no comprarlo?

Cuando nuestro queridísimo Paolo analizó el Google Pixel 2 XL hizo una doble lectura. Para él, era el móvil Android definitivo siempre que no te importase tener una pantalla terriblemente mala.

Es cierto que la pantalla del Google Pixel 2 XL está lejos de ser la mejor, pero todo el drama que recibió se debe más a un defecto de fabricación en los paneles de las primeras unidades que a un mal generalizado. He podido probar varias unidades, y entre las primeras y últimas remesas hay un cambio radical.

El Pixel 2 XL que tengo yo es de una unidad intermedia. El panel se ve de maravilla de frente, pero en los ángulos de visión sí que se aprecia algo raro. A nivel personal no es un error que me parezca un dramón ya que lo normal al usar un móvil es que lo vea de frente. Me molestaría más que no se viese a la luz del sol.

Desde su lanzamiento ha llegado un nuevo modo de color llamado Saturado, aunque prefiero el modo natural, que ofrece una precisión en los colores que me parece adecuada. Pero oye, nunca está de más tener varios modos y que cada cual elija el que más le gusta.

Es una pantalla lo suficientemente buena para que cualquiera se pueda acostumbrar, incluso si vienes de un móvil con una pantalla top, como los Galaxy Note. Tanto el 8 como el 9 tienen mejor pantalla, pero la diferencia no es tanta como para echarla de menos, especialmente si prefieres las pantallas con colores naturales.

Es una pantalla que se queda a medias de lo que esperamos, pero te puedes acostumbrar a ella.

¿Sigue siendo realmente la mejor cámara en un móvil?

Con el lanzamiento de los iPhone Xs el Google Pixel 2 XL ha vuelto a los titulares demostrando ser una cámara que un año después parece imbatible al ofrecer mejores resultados que el nuevo, y mucho más caro, iPhone.

¿Es esto realmente así? Podríamos decir que sí, y saltar al siguiente apartado, pero creo que hay muchos matices que aclarar:

  • El Huawei P20 Pro ha dejado el listón altísimo con un modo noche y un zoom híbrido que no tienen competencia. El trabajo de Huawei es espectacular y supera a Google en ciertas áreas.
  • El Samsung Galaxy Note 9 en su última actualización ofrece un mejor modo HDR en algunas situaciones y ofrece también mejor fotografía nocturna.
  • La grabación ultra slow motion que tienen Samsung (lo pongo primero porque tienen mejor trabajado el software) Sony y Huawei es adictiva. Es un factor de compra más.
  • Grabación 4K a 60 fps es algo que tienen los móviles de 2018 y el Pixel 2 XL no.

Un ejemplo de HDR donde el Galaxy Note consigue mayor claridad en el rango dinámico (izquierda Note 9, derecha Pixel 2 XL).

Estas son algunas razones que sobre el papel te deberían hacer plantear si realmente sigue siendo la mejor cámara del mercado. Es natural que un producto tecnológico empiece a quedar un poco por detrás respecto a su competencia, pero el mérito de Google por resistir a la competencia es brutal.

Que tengamos que ir a situaciones concretas y buscar tanto al detalle en móviles nuevos es razón más que suficiente para avalar la calidad de este dispositivo. De hecho, es una cámara tan buena que es la que he usado para fotografiar los últimos dispositivos que he analizado.

Sigue siendo una cámara nacida para pulsar el botón y que el software haga todo el trabajo. El modo HDR+ y su modo retrato están vitaminados por un procesador diseñado específicamente para el software. El resultado es único, son fotografías cuya sensación es un «tiene un algo, que no sé explicar, que me gusta».

Qué le pediría al Google Pixel 3 XL

Lo más probable es que el Google Pixel 2 XL vaya a ser mi móvil principal durante mucho tiempo ya que tiene todas las características que podría pedirle a un móvil. O, al menos, las que más valoro.

Es cierto que hay ciertos detalles a mejorar, los cuales te especifico ahora mismo. Tampoco son detalles por los que piense que merezca la pena pagar un extra de dinero.

  • Carga rápida: Diría que es el punto débil de este móvil. Usa el estándar USB Power Delivery, pero este estándar puede admitir velocidades mayores, como las que admite el iPhone X (que utiliza este mismo estándar, carga más rápido aunque el adaptador se venda por separado.
  • Carga inalámbrica: Google fue uno de los primeros fabricantes que adoptó esta carga con el Nexus 4, pero más tarde la abandonó. Es momento de regresar, ahora que es popular.
  • Estabilización en la cámara frontal: Mejores selfies, además de mejor grabación con la cámara frontal. No todo el mundo hace VLOG o videollamadas en la calle, pero siendo un móvil de este calibre, es algo que hay que pedir.
  • Reafirmarse como mejor cámara móvil de nuevo: El Pixel Visual Core de segunda generación es una de las características que esperamos con más interés.
  • Pantalla a la altura de su precio: Creo que es una petición razonable.

El truco de las actualizaciones: Tres años que se convierten en cuatro

Hablar de Google es hablar de actualizaciones de Android, pero siempre nos solemos dejar el verdadero valor de las actualizaciones de Android y cómo Google ha conseguido que, si te importa Android, pueda ofrecer el mejor valor a largo plazo.

El Google Pixel 2 XL es el primer móvil Android con tres años de actualizaciones de Android garantizadas, pero la realidad es que son casi cuatro años teniendo la última versión de Android. Es el primer móvil Android de gama alta en el que realmente puedes aplazar el ciclo de renovación casi a la altura del iPhone (entendiendo que el terminal de Apple sigue siendo rey en este ámbito).

¿Y por qué cuatro años si lo que Google ofrece son tres años? El truco aquí está en que Google coordina el lanzamiento de cada nueva versión de Android con el lanzamiento de un nuevo teléfono.

  1. Octubre de 2017: Sale el Google Pixel 2 XL: Llega con la última versión de Android, Oreo.
  2. Agosto de 2018: Primera gran actualización, Android Pie.
  3. Octubre de 2018: Lanzamiento del Google Pixel 3 XL.
  4. Agosto de 2019 (a partir de aquí, todo es hipotético): Segunda gran actualización, Android Q.
  5. Octubre de 2019: Lanzamiento de la cuarta generación de Google Pixel.
  6. Agosto de 2020: Tercera (y última) gran actualización, Android R.
  7. Octubre de 2020: Lanzamiento de la quinta generación de Google Pixel.
  8. Agosto de 2021: Llega Android S, primera versión no compatible oficialmente con el Pixel 2 XL.
  9. Octubre de 2021: Google Pixel de sexta generación.

Ser quien desarrolla Android da una ventaja competitiva a Google que aprovecha a su favor.

El truco aquí está en que, aunque haya terminado el ciclo de actualizaciones de Android, como la siguiente versión no llegará hasta exactamente un año después es un cuarto año extra que tienes con la última versión de Android. Habrá un pequeño periodo de tiempo entre agosto de 2021 y el momento que tarde en llegar el Pixel de sexta generación. Ese será el momento en el que decidir si comprar un Pixel de quinta generación a precio reducido o saltar del 2 al 6.

Es verdad que no todo el mundo hará este tipo de saltos, pero para el precio que están teniendo los móviles hoy en día, es el que me parece razonable. Y el Google Pixel es el único Android con el que puedes amortizar tantos años un móvil teniendo lo último en software, sin necesidad de pasar por ROMs.

Es el software quien vende el hardware, incluso en Android

Los que somos de un perfil más técnico tenemos un mantra, y es que es el software quien vende el hardware y nunca al revés. Android y sus mil capas de personalización nos han enseñado a lo largo de los años que hay móviles que parecen lo mejor de lo mejor el día de lanzamiento por su ficha técnica y que en el paso de los meses la experiencia termina siendo desastrosa. Eso cuando el propio diseño de la capa no nos hace descartar al dispositivo en el primer momento.

Hace unos años, los Nexus eran definición de un móvil con Android puro, pero ha llovido mucho desde entonces. Tenemos Android One, y fabricantes como OnePlus hacen una excelente aproximación de cómo tener una experiencia de Android potenciada.

Pero Android One y el sistema Android que vemos en los Google Pixel solo son parecidos. Google está añadiendo software exclusivo, acompañado en ocasiones de componentes que solo se encuentran en este móvil y que hacen que no se sienta un móvil con Android Puro más, sino un equipo cuyos pequeños detalles y sistema de actualizaciones hace que brille con luz propia.

Si el Google Pixel 2 XL se mantiene como una alternativa económica al Pixel 3, seguirá mereciendo la pena.

El Pixel 2 XL es un móvil capaz de hacer que te olvides de la ficha técnica, como sucede en el iPhone. Sabes que por su propio software ofrece una experiencia única. No es la mejor para todo el mundo, y por eso el mercado Android es tan variado, pero sí es la mejor para los que nos encanta Android y no queremos la experiencia de Huawei, Samsung o Xiaomi, sino la experiencia directa de quien diseña el sistema operativo.

Todo esto hace que el Google Pixel 2 XL, con un año, siga mereciendo la pena. Eso sí, te recomendamos esperar al 9 de octubre, fecha donde conoceremos al Pixel 3 XL, su sucesor. Ya dependerá de las reducciones de precio el saber si seguirá siendo una compra recomendable o no.