La guerra contra el tan querido jack de 3.5mm lleva con nosotros un tiempo. Poco a poco asistimos a su desaparición; dando paso a una solución para aquellos nostálgicos en forma: el dongle o adaptador.

Recientemente hemos visto cómo Google renovaba su dongle para poder usar unos auriculares tradicionales en los Pixel. ¿Una renovación? Si, has leído bien: en esta nueva versión del adaptador prometen hasta un 50% menos de latencia y un 38% más de batería. ¿Cómo es posible? Te lo explicamos.

Así escuchábamos música en nuestro smartphone, hasta ahora

Hasta ahora, si queríamos escuchar música o disfrutar de cualquier contenido multimedia usando nuestros auriculares, solo debíamos enchufarlos a nuestro dispositivo usando el puerto jack de 3.5 mm. Un proceso sencillo y transparente para el usuario.

El encargado de que el proceso sea transparente es el DAC o Digital Analog Converter, que pasa nuestra música en formato digital (unos y ceros) a formato analógico (ondas de sonido) que será reproducida por nuestros auriculares.

¿Cómo escuchamos música en la era post-jack de auriculares?

La eliminación del jack de auriculares no ha sido un capricho de la industria. Bueno un poco sí: una de las razones principales es la llegada del conector USB C. Lo que de primeras puede resultar una versión más del popular conector esconde unas cuantas sorpresas.

Junto a la posibilidad de poder conectarse de cualquier manera y de ser usado para transmitir datos o cargar nuestro dispositivo, este nuevo conector también permite la transmisión de audio y vídeo; convirtiéndose en el sustituto ideal de nuestro tan querido jack de auriculares.

A pesar de este cambio de conector, el DAC sigue siendo necesario para poder escuchar nuestra música o contenido multimedia. Sin embargo, nos encontramos con novedades al respecto y una de las razones de entorpecen la estandarización del USB C como conector de audio.

La ubicación del DAC, un problema que necesita solución

Todos aquellos dispositivos que prescinden del jack de audio suelen venir acompañados de un dongle o adaptador; lo que permite a los usuarios seguir disfrutando de sus tradicionales auriculares ya que dicho adaptador permite hacer uso del conector de jack 3.5 mm en un conector USB C.

Y es en dicho adaptador es donde encontramos el principal problema ya que existen dos tipos, uno más compatible que otro. Suponiendo un quebradero de cabeza para más de un usuario y para la industria en general.

Adaptador USB C a jack de audio, pasivo

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Este tipo es lo más parecido a cualquier otro adaptador que hayamos usado alguna vez, un cable que adapta de un conector a otro, simple y sencillo. Lo encontraremos en dispositivos que siguen teniendo el DAC dentro del smartphone, por ejemplo en un Moto Z2 Force o un Xperia XZ2.

Adaptador USB C a Jack de audio, activo

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Otros fabricantes han decidido eliminar el DAC del interior del smartphone y trasladarlo al adaptador; dando lugar a los dongles activos, los cuales encontraremos en dispositivos como los Google Pixel 2 XL o los Samsung Galaxy S8.

Al encontrarse el DAC dentro del propio adaptador esto posibilita que existan revisiones mejoradas de dicho adaptador; obteniendo menor latencia, más autonomía (algún día quizá hasta mejor sonido) sin tener que cambiar de dispositivo.

Los adaptadores activos, al incorporar DAC, podemos usarlos en cualquier dispositivo que haga uso del conector USB C. Mientras que un adaptador pasivo solo funcionará en aquellos dispositivos que tengan DAC en su interior.

El dongle del Xperia XZ2 no hace nada si lo conectamos a un Google Pixel 2 XL

Necesitamos una estandarización si queremos dejar atrás el jack de audio

Hasta ahora daba igual qué auriculares usábamos, solo teníamos que conectarlos a nuestro dispositivo y disfrutar. Sin embargo, como hemos podido leer anteriormente, ahora nos encontramos en una situación donde la compatibilidad brilla por su ausencia.

Sin un estándar los fabricantes no se lanzarán a dejar de lado el jack de audio para hacer uso del nuevo USB C. Y ya que en cada nuevo dispositivo está empeñados en dar el salto al USB C, qué menos que se pongan de acuerdo.

Así el usuario podrá usar cualquier adaptador en cualquier dispositivo; y quizá viésemos auriculares que hacen uso del conector USB C en lugar del tradicional jack de audio. Hasta entonces, larga vida al jack de audio y su excelente rendimiento de siempre.