El campo de la fotografía y vídeo digitales avanza tan rápido que hasta a los propios dispositivos les cuesta adaptarse. ¿Alguien recuerda los vídeos en 3D? Algunos móviles salieron con la opción de grabarlos, y triunfaron casi tanto como un tractor de competición. ¿Y la realidad virtual? Parece prometedora, todas las marcas andas detrás de sus pasos y ya es posible registrar contenido disponible desde los propios móviles. La pregunta es: ¿la veremos como algo cotidiano?

El anterior MWC 2016 de Barcelona fue casi un monográfico de VR: las demostraciones de esta tecnología coparon stands creando colas kilométricas alrededor de los mismos (vale, quizá exagere un poco). LG no podía permitirse quedar fuera, por lo que sus novedades se centralizaron en la realidad virtual y contenido en 360°. Lo probé en su momento, pero ahora puedo hacer una review en condiciones.

Características y especificaciones técnicas

Podría resumir este dispositivo diciendo que es un doble sensor capaz de capturar imagen, sonido y movimiento en formato esférico, pero eso sería reducir al mínimo las características de la LG 360 Cam. Éstas son bastante más completas:

• Dimensiones: 40x97x25 milímetros.
• Peso: 76,7 gramos.
• Cámara: doble de 13 MP.
• Conectividad: Wi-Fi y Bluetooth.
• Batería: 1,200 mAh.
• Micrófonos: 3.
• Sensores de 9 ejes.
• Máxima resolución de vídeo: 2560×1280 píxeles a 30 fps.
• Máxima resolución de foto: 5660×2830 píxeles (16 megapíxeles).
• No puede funcionar sin una tarjeta SD (viene con una de 16 GB).

LG 360 Cam, una cámara compacta y tan sencilla como cómoda de transportar

Para que los vídeos en 360° triunfen, la manera de grabarlos ha de ser popular. Aún no es posible integrar el sistema de captura pertinente en un smartphone (todo se andará), por lo que todo pasa por crear un accesorio compatible capaz de capturar fotografías y vídeo.

La cámara en 360º de LG consta de dos sensores independientes con una lente por cada cara capaz de capturar una amplitud de 180 grados con una resolución máxima de 13 megapíxeles por sensor. La 360 Cam realiza un doble disparo simultáneo que junta mediante su propio software hasta crear una imagen en forma de esfera (el proceso para el vídeo es parecido). O lo que es igual: el resultado copa el ángulo visual al completo permitiendo movernos por cualquier parte igual que haríamos en Google Street View. De hecho, el efecto esférico es exactamente el mismo.

El cuerpo de la LG 360 Cam está fabricado en plástico; las dos lentes sobresalen en la parte superior creando una especie de bola de cristal hecha con una pareja de lentes de fotografía; dispone de un botón en el costado para encenderla, otro en el frontal para fotografiar con una pulsación, una trampilla inferior para insertar la SD Card y un conector USB Tipo C para cargar la cámara. Como añadido, posee una funda de protección que también puede usarse como un pequeño monopie sobre el que apoyar la Cam (no es demasiado estable, ojo).

El efecto que consigue la cámara es el mismo que navegar por Google Street View

El control de este módulo de cámara se realiza desde el smartphone, aunque resulta posible hacer fotos con el botón físico de disparo. La LG 360 CAM es compatible con el LG G5 y también con cualquier móvil Android y iOS que esté actualizado a la última versión del sistema. Para iniciar la Cam basta con arrancar la app en el móvil: ella se encargará de emparejarse por wifi para la gestión de la cámara y contenido guardado.

Muy sencilla de usar, pero algo limitada

Para hacer fotos basta con retirar la funda, encender la cámara (si la LG 360 Cam no se activó al desprender la carcasa) y pulsar en el botón de disparo. Si queremos grabar vídeo en 360° lo mejor es depositar la cámara sobre una superficie firme (lo más alta posible, os lo recomiendo), emparejarla con el móvil (a veces tarda) y pulsar sobre el botón de grabar.

Grabar vídeos en 360º con la Cam de LG es tan simple como divertido

Se puede elegir la opción de registrar contenido en 180° o en 360° (haciendo uso de una lente o de ambas a la vez). Mientras usemos el móvil como monitor veremos la preview en directo y a distancia sabiendo en todo momento qué estamos registrando. Como veis, ningún problema hasta aquí.

¿Qué ocurre cuando uno desea compartir los resultados? Las fotos pueden compartirse con Google Fotos (lo más universal que se me ocurre): esta aplicación posee un visor en 360º también accesible desde el navegador. Para lo demás…

Suele ocurrir con las nuevas tecnologías: tardan en hacerse lo suficientemente extendidas como para ser compatibles en casi todas partes. Hay reproductores en 360° (para las Cardboard o Galaxy VR, por ejemplo), Facebook y Google Fotos admiten las fotografías esféricas y, en cuestión de vídeos, podréis compartirlos por Facebook y YouTube si lo hacéis desde el propio smartphone. La resolución no es la mejor, eso sí.

Un aspecto prima sobre todos los demás: sorprende

Este tipo de fotografía y de vídeo es accesorio ya que no es algo que vayamos a utilizar continuamente, pero nadie puede discutir su curiosidad: cada vez que enseño los resultados, la principal reacción es de sorpresa. Los videos en 360° no son algo común, motivo suficiente para decirle a alguien «Mira lo que grabo con mi cámara». Nada que reprochar hasta aquí.

Los vídeos en 360º molan, sobre todo por la libertad de moverse por toda la escena

Más allá de la peculiaridad de este tipo de contenido, tampoco aporta una mayor expresividad o posibilidades de transmitir emoción. Grabar el entorno asegura que todo queda registrado, pero con un inconveniente: no veremos nunca el 100 % de la escena. Además, los archivos son bastante grandes, sobre todo en vídeo (razón por la que Facebook restringe la calidad, por ejemplo).

El precio para la cámara en sí tampoco resulta exagerado (entre 250-300 euros), pero deberéis valorar si os compensa su coste teniendo en cuenta que las fotos y los vídeos en 360 no son tan universales como el contenido plano. Aun así, considero que proporciona una experiencia muy positiva en líneas generales.

Vídeos de muestra en 360º

Aquí tenéis un vídeo de muestra grabado con la LG 360 Cam. Es de una zona muy popular de Barcelona: podéis arrastrar la imagen en movimiento para contemplar justo lo que os apetezca. Os recomiendo que los veáis en el móvil: reacciona al movimiento del smartphone (también es buena idea usar unas Cardboard o gafas VR).

Conclusiones y valoración personal

Es un accesorio que me resultó curioso y llamativo. No creo haberle sacado todo el jugo, pero sí que me parece un buen avance dentro del terreno de la realidad virtual. Los resultados son impactantes y consiguen unos recuerdos más inmersivos. Aunque eso sí: la dificultad de compartirlos a la misma calidad que se ven en el móvil lastra un poco la experiencia.

Si ardéis en deseos de probar la captura de vídeo y fotografía en formato esférico, la LG 360 Cam es un muy buen primer paso. No os decepcionará si sabéis lo que estáis buscando.