Cuando compramos un smartphone queremos cuidarlo, que nos hemos dejado un buen dinero en él y no es cuestión de que se nos rompa al primer despiste. Una funda es una de las protecciones más habituales que solemos poner a nuestros teléfonos. Y hay algunas que parece que quieren proteger a nuestro Android a costa de los ojos ajenos.

Hace unos días descubríamos una de las más horripendas creaciones de la humanidad en materia de protección telefónica, una funda para iPhone que básicamente era una oreja prostética. Quizá no era fea -todos tenemos orejas- pero si que era inquietante y muy creepy.

Las fundas de smartphone más horribles

Estas son algunas de las fundas que puede protejan a tu smartphone de una infortunada caída, pero que por el camino te arrancarán los ojos llevándose todas tus dioptrías por el camino.

Una funda para M.A. Barracus

No son pocos los teléfonos y carcasas que con colores dorados atraen a aquellos que quieren parecer glamurosos pero todo lo que consiguen es tener aspecto de primer expulsado de reality show de poca audiencia. Esta funda para el Samsung Galaxy S4 es un enorme ejemplo. Mucha imitación de oro, pero vale sólo 4,97 dólares.

Paga una pasta, te dejamos en ridículo

Por alguna extraña razón, muchas marcas de lujo se emperran en dejar a sus clientes en ridículo a pesar de la pasta que se van a dejar en sus productos. Si valen tanto es normal que tengan que llamar la atención, pero no sabemos si esta es la mejor manera. Louis Vuitton nos da una master class.

¿Será la hamburguesa como la de la foto?

Todo un clásico de las hamburgueserías es que ese plato que tan jugoso y bonito aparece en la foto sea en realidad un amalgama de carne esmirriada, media hoja de lechuga y un tranchete seco. Yo al dueño de este Samsung Galaxy Core le preguntaría si en el Burguer King en el que se lo regalaron eran igual que en las fotos. Por 6,94 dólares es difícil encontrar una funda más fea.

Una funda prehistórica

Los isopodas fueron en su momento uno de los habitantes más comunes de nuestro planeta, pero tampoco serían el tipo de animal que el cuerpo te pide hacer caricias. Tampoco parece la funda más cómoda para llevar en el bolsillo.

La piña, arma de destrucción masiva

La piña es el único elemento del universo conocido capaz de estropear una pizza. Por favor, no déjéis que se una se acerque a vuestros smartphones. Alejaos de ellas como si fueran zombies.

Estampado de felino

Desde una abuela que toma el sol en la piscina municipal a la cajera del supermercado a los videntes más televisivos de los años 90. El estampado de leopardo es una de las horripilidades más transversales de la humanidad. Esta funda para la Moko Lenovo Tab la pone a tu disposición.

¿Seguro que quieres proteger tu smartphone?

Sin ánimo alguno de discutir con quien lleve uno de estos, la idea de una funda es proteger el smartphone. No estamos seguros de que la idea detrás de esta funda transmita el mismo concepto.

Una mano para mantener el contacto humano

Dicen que los smartphones están haciendo la comunicación entre humanos más fría. Si alguien necesita tener la sensación de que está cogiendo la mano del interlocutor, este puede ser su funda ideal. También para fans de Cosa de la Familia Adams.

Se armó el pollo

Realmente, es difícil hacer un chiste acerca de esto. Nosotros nos rendimos, pero si queréis poner el vuestro en los comentarios, ya sabéis, esta es vuestra casa.

Nos encanta el bacon

Por si no lo habéis notado por nuestras hercúleas cinturas, nos encanta el bacon. Pero no sé si tanto como para llevar nuestro smartphone metido en una funda que lo emula. Eso sí, te puedes pegar unas cuantas de estas al cuerpo y disfrazarte de Lady Gaga.

La bañera

Dejando de lado el más que cuestionable buen gusto de esta funda, tampoco parece la más cómoda del mercado, con esa señorita emergiendo del agua como una sirena. Con todo, nos podemos imaginar a Tony Montana con ella.

La funda de hierro

Los personajes de Juego de Tronos de lían a mamporrazos por una silla hecha con espadas. Si el Trono de Hierro se sopone que tenía que ser incómodo, su funda también. Esas púas tienen que sentarle muy mal al bolsillo, y sobre todo intenta no estornudar mientras hablas a menos que quieras acabar como algún personaje de la historia.

Agárrame esa funda

Hablábamos de fundas que tienen que ser incómodas, pues esta es incómoda e inquietante y parece salida de Agárrame esos fantasmas. No se vosotros, pero yo no sacaría mi teléfono de un pentagrama invertido hecho con sal.

Amalgama de diamantes

Los diamantes son para la eternidad, y esperemos que esta funda no lo sea. Dejando de lado que ocupa más espacio que una furgoneta, parece diseñada por alguien que era muy muy malo jugando al Colums y que ha tenido un auténtico trauma con el juego.

Fundas para gente a dieta

Si tienes un amigo a dieta, no le regales una de estas fundas. Nos encanta la comida, como a todo el mundo, pero no vemos la necesidad de salivar como los perros de Pavlov cada vez que cojamos nuestro smartphone. Aunque algunos ya lo hacemos.