Una de las carreras más absurdas del mundo de la telefonía móvil es la de las pantallas. En menos de una década hemos pasado de pequeñas pantallas con una diagonal de 3 pulgadas a tener casi tabletas en formato de bolsillo. No solo en tamaño, sino en color, brillo, contraste, resolución, tasa de refresco.

La tecnología de moda en las pantallas está en las tecnologías OLED y AMOLED, y aunque el futuro está destinado al MicroLED, existen otras tecnologías que merecen la pena nuestra atención. Como la tinta electrónica. Y es que lejos de morir, esta tecnología parece estar más viva que nunca.

La tinta electrónica a color cada vez más cerca: nuevos modelos y un móvil para este año

A pesar de ser un entusiasta de pantallas con la calidad del Galaxy Note 10+ o la fluidez del Asus ROG Phone 2, no puedo evitar tener cierto cariño hacia la tinta electrónica. Esta tecnología suele estar implantada en los lectores de libros electrónicos, y aunque en ciertos aspectos no está al nivel, si que tiene otras ventajas.

Las pantallas de tinta electrónica son de carácter reflectivo. Esto significa que no necesitan de retroiluminación, sino que dependen de la luz ambiental, por lo que las podemos leer directamente a la luz del sol. La ausencia de retroiluminación hace que el consumo de estos paneles sea reducido, y que además no nos canse la vista, razón por la que su caso de uso más práctico sea la lectura.

Esta tecnología ya ha sido utilizada también en móviles, siendo utilizada como pantalla secundaria. Marcas como Yotaphone fueron pioneras en ello, y Hisense ha decidido continuar su legado. Lejos de haber lanzado únicamente un móvil con esta tecnología, el fabricante chino va a apostar más fuerte.

Las pantallas de tinta electrónica a color llevan años entre nosotros como prototipos, pero ya están comenzando a desplegarse al fin. Además de esas grandes pantallas, parece que también las veremos en algún móvil.

Hisense ha desarrollado en colaboración con E-Ink el primer smartphone con pantalla de tinta electrónica a color, en un móvil que se pondrá a la venta a mediados de año.

A pesar de ser un móvil que sobre el papel parece estar más limitado (al final, la limitación de esta tecnología hace menos disfrutable jugar o ver vídeos en el móvil), parece una solución excepcional para aquellos que usen el móvil para navegar, leer y comunicarse, con pantallas que tienen una visibilidad excelente a la luz del sol y con un consumo drásticamente reducido que podría alargar la batería varios días.