Mucha gente a la hora de buscar un smartphone se pone un presupuesto de unos 200€, un precio por el que encuentras dispositivos capaces de hacer lo necesario del día a día. Este Mobile World Congress hemos conocido dos rivales para este campo. El Nokia 5 y el Moto G5.

Motorola resurgió en 2013 con el Motorola Moto G, un móvil bueno bonito y barato como pocos han habido. Desde entonces ha intentado continuar esa linea en sus Moto G, pero tras la adquisición por parte de Lenovo parece ser que algunos detalles como el software, el diseño o el soporte empieza a cambiar.

Nokia es la que resurge ahora y se encuentra de frente con Motorola. El Nokia 5 parece casi un copia y pega del Moto G5 en cuanto especificaciones con algunos matices que algunos agradecerán queriendo escoger el Nokia y otros aborrecerán.

El Nokia 5 y el Moto G5 tienen casi las mismas características

En ambos nos encontramos un acabado de metal para la parte trasera y de cristal en la delantera, con los botones en el lateral derecho. El diseño es cuestión de gustos, aunque a esa elección pueden ayudar los colores azul, cobre, negro y plateado en los que está el Nokia 5 frente al plateado y dorado del Moto G5.

Ambos montan en la parte delantera el sensor de huellas dactilares aunque Nokia lo hace acompañándolo con botones capacitativos a su lado y Motorola prefiere incluir estos en la pantalla. En cuanto a tamaño es prácticamente el mismo pero el Nokia 5 es más fino e incluye 0.2″ más de pantalla.

La diferencia más notable de especificaciones, comparando el Nokia 5 con el modelo básico de Moto G5 se encuentra en la pantalla, cámara frontal, batería y software. La pantalla del Nokia 5 es más grande pero solo tiene una resolución HD (720p) mientras la del Moto G5 dispone de FullHD (1080p). La cámara frontal tiene más Mpx en el caso del Nokia 5 y una mayor apertura que hace pensar que podría ser mejor, a falta de ver resultados reales.

Pese a ser más fino, el Nokia 5 incluye una batería de 3000 mAh frente a los 2800 mAh de su competidor, que junto a su Android puro y menor resolución de pantalla promete ofrecer mejor autonomía. El Nokia 5 dispone además de NFC por lo que nos permite con su sensor de huellas realizar pagos con el móvil.

Los rivales del siglo XX contra lo que conocemos

El Nokia 5 se espera con un precio de 180€ sin impuestos, por lo que podría subir hasta los 199€ o más. El Moto G5 básico llegará con un precio de 199€. Al comparar las fichas de ambos (queda por ver su rendimiento real, la ficha no lo es todo) vemos dispositivos muy iguales, donde Motorola ganaría en pantalla y Nokia en batería. Pero, ¿y frente a lo que ya conocemos?

Si nos vamos a lo más cercano, el bq Aquaris U Plus es bastante parecido a los comparados. Con cuerpo metálico, sensor de huellas dactilares, 2 GB de RAM en su opción más barata, cámara de 16 Mpx f/2.0… Con un PVP de 199€ pero puede encontrarse por menos 179€ en Amazon.es.

Al contrario de bq, si nos queremos aventurar con China, tenemos el Xiaomi Redmi Note 4. También metálico y con sensor de huellas pero con una superioridad en potencia con un Snapdragon 625 y 4100 mAh de batería. Su precio ronda los 180-190€ en las páginas de venta chinas.

Otras opciones son el Samsung Galaxy J5 2016, uno de los móviles más vendidos en España en 2016 con pantalla Super AMOLED o el propio Moto G del año pasado, el Moto G4. Ambos sin sensor de huellas dactilares.

Nokia y Motorola, dos ex-gigantes buscando las migas del pastel

Como en el pasado, Nokia y Motorola peleándose por conseguir su trozo del pastel, solo que por el momento Nokia solo opta a las gamas medias-bajas. Ofrecen una buena opción para aquellos que busquen un móvil de cerca de 200€. Nokia dispone del Nokia 3 un paso por debajo de este Nokia 5 y un paso por encima, el Nokia 6. A su vez Motorola dispone de un modelo superior, el Moto G5 Plus un paso por encima del Nokia 6.

Las apuestas de Nokia nos recuerdan mucho a los inicios del resurgir de Motorola de la mano de Google. Ahora nos queda esperar a poder tener en nuestras manos uno de los nuevos dispositivos de la marca finlandesa y de la estadounidense para corroborar si su funcionamiento va acorde a su ficha técnica.