Ya hemos dejado atrás buena parte de la primera mitad del año 2016, y los fabricantes ya están calentando motores para presentar los que se convertirán en sus buques insignia para la segunda mitad del año. Existen por lo menos seis móviles que esperamos ver todavía este año, pero en esta ocasión hemos decidido hacer algo diferente… nos hemos aventurado a recopilar los que creemos que son los cinco móviles más infravalorados del pasado año 2015.

Para realizar esta recopilación nos hemos basado en móviles que, por uno u otro motivo, creemos que no tuvieron la repercusión que se hubieran merecido. Se trata, por supuesto, de una opinión personal, de manera que os invitamos a que nos deis vuestra opinión no solamente acerca de los terminales que aquí aparecen, sino también sobre aquellos que creáis merecedores de haber aparecido en este listado.

Comencemos, por lo tanto, con nuestra recopilación de 5 móviles que no han sido lo suficientemente valorados en 2015.

1. LG G Flex 2

Es, sin lugar a dudas, el patito feo de la clase. Fue presentado durante el mes de febrero del 2015, y todavía a día de hoy sigue siendo un buque insignia que podría poner en serios apuros a móviles que han sido presentados hace escasos meses. Hablamos del LG G Flex 2, un móvil cuyo principal error fue el de atreverse a incorporar una tecnología para la que, aparentemente, el mercado todavía no estaba listo. ¿Pasará lo mismo con el LG G5?

El G Flex 2 presentaba la peculiaridad de que tenía un diseño curvo, y no en el sentido de que la pantalla estuviera curvada a los lados, sino que todo el teléfono tenía un diseño curvado que añadía una forma ovalada tanto a la carcasa como a la pantalla.

El atrevimiento que LG tuvo al lanzar este terminal fue probablemente uno de los motivos por los que las 5,5 pulgadas de pantalla con resolución Full HD, el procesador Snapdragon 810 o los 3 GB de RAM no resultaron suficientes para convencer a los usuarios de que dieran una oportunidad a este terminal. Es por ello también por lo que, a día de hoy, este terminal se puede comprar por un precio que ronda los 300 euros.

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2. OnePlus X

Tras meses suplicando a OnePlus que se decida a lanzar un móvil de un tamaño de pantalla inferior a las 5,5 pulgadas del OnePlus 2, va la compañía asiática y presenta el OnePlus X, el que -en principio- cumplía con las demandas de sus exigentes usuarios. ¿Y qué ha terminado ocurriendo? Que, incluso a falta de conocer datos oficiales de venta, no parece que el OnePlus X haya tenido la más mínima repercusión en el mercado.

¿Qué es lo que hizo tan mal OnePlus como para decepcionar de esta manera a los usuarios? Quizás simplemente es que llegó en el peor momento de la gama media en el mercado de la telefonía móvil, y su pantalla de cinco pulgadas con resolución Full HD, su procesador Snapdragon 801, sus 3 GB de RAM o sus 2.525 mAh de batería nacieron condenados al fracaso.

Quizás, también, el OnePlus X no fuera precisamente todo lo que los usuarios estaban demandando. El pesado e inaguantable sistema de invitaciones, la ausencia del NFC o el decepcionante precio (al menos respecto a lo que nos tenía malacostumbrados OnePlus) fueron, probablemente, detalles que terminaron de enterrar la idea de OnePlus.

A día de hoy, el OnePlus X se puede comprar directamente desde España -sin esperas de por medio- por un precio que ronda los 270 euros.

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3. Honor 7

Puede que sea un modelo bastante conocido en la red, pero más allá de eso el Honor 7 es un terminal completamente ajeno a un usuario que se acerca a una tienda en busca de un móvil nuevo. Y es una verdadera pena, porque estamos hablando de un terminal que, por los 300 euros que cuesta, ofrece una carcasa completamente metálica, un lector de huellas, un procesador Kirin 935, 3 GB de RAM… difícil encontrar una alternativa semejante en el mercado europeo.

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4. Sony Xperia M4 Aqua

El Sony Xperia M4 Aqua desperdició su oportunidad de oro cometiendo dos errores imperdonables: venir con tan solamente 8 GB de memoria (que, en realidad, se traducían en menos de 4 GB de espacio real disponible), y salir al mercado con un precio que se acercaba peligrosamente a los 300 euros. Una mayor capacidad de memoria interna y un precio algo más razonable para la situación que se estaba comenzando a vivir en la gama media hubieran sido las claves del éxito de este terminal.

¿Y por qué lo decimos? Primero, porque podía presumir de una característica muy poco habitual en la gama media de por aquel entonces: el certificado IP68 de resistencia al agua y al polvo. Segundo, porque tenía un diseño que no se alejaba tanto del Sony Xperia Z3, el buque insignia de Sony en esos tiempos. Y tercero, porque un procesador Snapdragon 615 con 2 GB de RAM eran buenos compañeros de baile para un usuario medio.

Hoy en día, el precio de este móvil sigue estando por encima de los 200 euros.

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5. Microsoft Lumia 640

Sí, somos conscientes de la situación que atraviesa la división móvil de Microsoft, y también estamos al corriente de los quebraderos de cabeza que genera Windows Phone a día de hoy. Pero, incluso teniendo eso en cuenta, el Microsoft Lumia 640 fue durante la primera recta del 2015 una de las mejores alternativas dentro de su rango de precio: por 169 euros, ¿por qué no iba a ser una opción a tener en cuenta para los usuarios que estuvieran en la búsqueda de un terminal sencillo?

A día de hoy, su precio ronda los 118 euros.

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