Repite conmigo: «I have a pen, I have an apple… ¡Ha! Apple pen…». Letra absurda, melodía idiota y una escenografía que haría llorar hasta a un unicornio, ingredientes capaces de catapultar a un vídeo hasta la viralidad. Dicho y hecho: PPAP se ha convertido en un rotundo éxito. He buscado el vídeo para el artículo y ya lo he reproducido diez veces.

A raíz del vídeo ya tenemos juego. A imagen y semejanza de la propuesta musical y con una simpleza que raya en la mínima expresión. Pero, como suele ocurrir en estos casos, engancha tanto como el plástico de burbujas. «¡Pineapple pen!». Vaya, a ver cómo me saco la canción de la cabeza…

Acierta con el boli en las piñas y manzanas

El juego no tiene más: como en un Fruit Ninja básico, tendrás que ensartar las frutas con un bolígrafo. Concatena aciertos y consigue bonus batiendo los récords. A ritmo de PPAP, con dificultad creciente y sin que puedas echar sólo una partida. Mira, aprovecho para poner el vídeo.

«¡Pen-Pineapple-Apple-Pen!». Yo no me saco la canción de la cabeza hasta mañana. Y tampoco el juego, que se encuentra actualmente en el top 10 de la Google Play Store (8 en el momento de escribir este post). Está distribuido por Ketchapp y sirve para matar el rato durante unos cuantos minutos. No muchos más, tanta piña y manzana empalaga hasta a Ana Botella.

Conseguir la máxima puntuación, obtener monedas para desbloquear otras armas aparte del bolígrafo, también hay disponibles temas con los que cambiar el aspecto del juego… Y retos a desbloquear según se vayan completando los anteriores.

Un juego chorra en toda regla

No esperes mucho más de Pineapple Pen, ni tampoco menos: es un juego curioso para unos minutos. Eso sí, seguro que terminas picándote por ver hasta dónde llegas y qué puntuación consigues. No es nada fácil, ya te lo avanzo.

Pineapple Pen es de descarga gratuita, tiene anuncios y una compra in app para quitar la publi de 1,99 euros.