Uno de los grandes contras de los móviles (independientemente de su sistema operativo) y más si estos son subvencionados por operadoras es la cantidad de aplicaciones innecesarias que añaden tanto fabricantes como operadoras para promocionar sus servicios o a sus socios. Lo único que consiguen es, además de frustrarnos, ocupar espacio en la memoria interna de nuestro móvil además de consumir RAM en segundo plano ralentizando el correcto funcionamiento de nuestro móvil.

Si bien es cierto que puede que nuestro teléfono de alta gama tenga procesador, espacio y RAM suficiente para que apenas sea inapreciable, si nuestro móvil es de media o baja gama puede resultar realmente perjudicial. Independientemente de la gama de nuestro teléfono, no hay razón para justificar que una o varias aplicaciones, las cuales no usamos ni utilizamos, estén consumiendo recursos de nuestro terminal.

Una de las grandes novedades de Ice Cream Sandwich fue una mejora que a primera vista no se podía apreciar pero era un salto enorme para solucionar y corregir el problema inhabilitando aquellas aplicaciones que no necesitamos.

Deshabilitar aplicaciones

Para ello nos dirigiremos a los Ajustes -> Aplicaciones y seleccionar aquella aplicación que no necesitemos y no utilizamos.

Una vez dentro de la aplicación veremos que entre sus opciones no tendremos la opción de desinstalar, ni desde ahí ni desde Play Store pero si podremos desinstalar las actualizaciones e inhabilitar para impedir que siga corriendo en segundo plano.

Entonces, cuando deshabilitemos la aplicación, su acceso directo desaparecerá de nuestra lista de aplicaciones así como se posicionará en la última posición de la lista de aplicaciones en los ajustes.

Una advertencia sobre deshabilitar aplicaciones es que es preferible en caso de no conocerla o no saber cuál es, no deshabilitarla dado que puede conllevar a un mal funcionamiento de otras aplicaciones que puedan depender de ella, en especial si es referido a una aplicación del sistema. Por ejemplo, si inhabilitáramos alguna aplicación como la galería, la cámara podría dejar de funcionar correctamente (y viceversa).

Cuando deshabilitamos una aplicación, no solo no podemos usarla sino que también se eliminan los datos que puedan haber en ella.

Deshabilitar notificaciones

Hay casos en los que no queremos deshabilitar una aplicación porque nos pueda ser útil, pero al mismo tiempo no queremos que nos notifique constantemente cualquier cambio. En muchas aplicaciones no podemos desactivar estas notificaciones desde los ajustes. A partir de las versiones con Ice Cream Sandwich podemos deshabilitar únicamente las notificaciones a determinadas aplicaciones.

El paso sería prácticamente el mismo que el que hemos seguido para deshabilitar una aplicación. Desde Ajustes -> Aplicaciones y seleccionando la aplicación en cuestión aparecerá una opción que impedirá que ésta pueda volver a aparecer en nuestra barra de notificaciones.

Gestión de RAM o aplicaciones en segundo plano

Como hemos dicho antes, es importante saber qué aplicaciones están haciendo uso de la RAM de nuestro dispositivo dado que quizás nos llevemos una sorpresa al ver que hay alguna que jamás hayamos usado, o su consumo sea tan elevado que nos planteemos si vale la pena seguir usándola. Cabe recordar también que un gran abuso de la RAM es equivalente también a un consumo elevado en la batería del dispositivo acortando su autonomía.

Hay varias formas de revisar la RAM o las aplicaciones que están siendo usadas en segundo plano. La primera y nativa es desde Ajustes -> Aplicaciones y deslizamos el dedo de derecha a izquierda hasta llegar a la pestaña de «En ejecución». Desde ahí veremos las aplicaciones que tenemos en ejecución en segundo plano. En la parte inferior podremos ver el total de nuestra RAM y cuánta está siendo usada.

También existen aplicaciones de terceros para poder gestionar, conocer y consultar aplicaciones en segundo plano como Phone Tester o MemoryInfo & Swapfile Check entre muchas otras.