Seguramente muchos usuarios ya sepan que son los repositorios de aplicaciones, bien por Android o de antes, no es ninguna novedad, pero en el Androide Libre queríamos no sólo explicaros de que se trata a los que no sabéis que es, si no expresar nuestra opinión al respecto, ya que son muchas veces las que nos han pedido que hablemos de ello, pero nunca nos habíamos pronunciado.

Un repositorio de Aplicaciones no es otra cosa, que un grupo o conjunto de aplicaciones alojadas en un servidor o varios y que a través de un programa, que en el caso de Android, podremos instalar a través de una aplicación llamada Aptoide o Apktor.

Los usuarios suben sus aplicaciones a dichos servidores y las comparten con todos los que tengan la dirección de ese repositorio u otros. Sin duda la idea es genial y brillante, pero el problema viene cuando se utiliza como un nido de piratería. En muchas ocasiones me he encontrado con que los administradores de esos repositorios, pedían que sólo se subieran apps de pago, obviamente las gratuitas no tenía sentido porque se podían encontrar en el Android Market y esto, es claramente un mal uso de la idea de repositorio, es un delito, no ya penal (que desconozco sus implicaciones legales) sino moral por el trabajo de la gente que hace las aplicaciones. El repositorio debería estar concebido como un sitio donde se alojasen aplicaciones que por ejemplo no están disponibles en España y son gratuitas, o que por alguna razón no aparecen en determinados dispositivos y no encontramos en el market y sólo se pueden conseguir instalándolas directamente en el teléfono. Un grato ejemplo lo encontré cuando descubrí la aplicación Tuentify, la aplicación no oficial de Tuenti, que amistosamente animaron a su desarrollador a que retirase del market, cuando ya mucha gente había pagado por su excelente servicio. O ya ni eso, si no por encontrar sustitución a la oficial, que muchos califican de «penosa» o al menos, escueta en características.

Aquí no vamos a daros las direcciones de los repositorios ni de las aplicaciones, al menos no hasta que algún día, se aprendan a usar como yo, personalmente (aquí nadie hace dogma de nada) creo que se usa con responsabilidad para con todos. Yo personalmente no soy desarrollador, de hecho no se nada de Java, que para mi es una isla del Índico junto a Sumatra, a si que no pierdo nada, es cuestión de civismo. En un artículo que publiqué aquí mismo y hablando de la piratería, un usuario comentó lo siguiente: «Yo no me voy a oponer a que suban mi aplicación a un repositorio, de hecho seré yo mismo el que la suba, pero eso si, lo mismo el día 28 de Diciembre o el April Fools’ Day se encuentran que se ha borrado todo lo de su tarjeta SD» Bueno, a pesar de la dureza de las palabras, con las que no estoy del todo de acuerdo, creo que refleja muy bien lo que ocurre. Hay debate.

Sois libres y esta es mi opinión. Ya sabéis el nombre de las aplicaciones y usando google un poco, encontraréis los repositorios, queda en vuestra mano usarlo como os plazca. Por nuestra parte, intentaremos hacer nuestro propio repositorio de aplicaciones junto a otra gente con la que hemos hablado de esta idea, donde se alojarían aplicaciones gratuitas y con el consentimiento del desarrollador de estar ahí y las que nosotros recomendemos y sea difícil encontrar. Porque las herramientas por definición no son (hay excepciones) malas, sólo el uso que se las da, las define.

¿Vosotros que opináis? ¿Estoy totalmente confundido y sólo hablo de boquilla pero luego en secreto me pirateo todo lo que puedo?

P.D: Casi siempre hay alternativas gratuitas en el market a las aplicaciones, hay más de 80.000. Nosotros siempre contestamos en el twitter si tenéis dudas o no encontráis alguna app, a si que si el problema es el dinero, ya lo sabéis.