El mercado de los dispositivos ponibles, vestibles o wearables no ha cambiado mucho desde que llegara a su punto álgido hace unos años. Las empresas se han dado cuenta de que, o bien han de irse a productos caros donde es complejo pelearse con Apple, o bien han de optar por opciones muy económicas.

Esto es lo que hace Xiaomi con su Xiaomi Mi Band, posiblemente la pulsera más conocida y con mejor relación calidad precio del mercado.

Este año se espera que la Xiaomi Mi Band 4 traiga algunas novedades como la pantalla a color o el control de reproducción de música desde la muñeca, pero no podemos dejar de pensar que son cambios menores y que se necesita algún revulsivo.

Es difícil innovar, pero hay margen

Como decíamos, si nos ceñimos al precio que los usuarios están dispuestos a pagar, es complicado hacer grandes cambios en el diseño de un producto de este tipo pero es posible.

La clave podría estar en integrar dos productos en uno, algo que he visto en uno de los típicos productos chinos que no sabes muy bien de dónde han salido pero que, en concepto, me ha encantado. Seamos sinceros, la ejecución del mismo no es la mejor y es muy probable que los materiales tampoco sean los más adecuados (no he podido probarla).

Pero reitero que la idea en sí tiene mucho sentido.

Uniendo pulsera y auriculares

La marca LEMFO (y seguro que algunas más) ha lanzado al mercado un producto similar a la Xiaomi Mi Band pero con un cambio notable. Esta pulsera tiene un compartimento en su interior que aloja dos auriculares de pequeño tamaño, sirviendo la pulsera como caja de carga.

Habiendo probado ya varios modelos de auriculares de este tipo, pequeños y con caja de carga, tengo claro que el mayor inconveniente es llevar la caja encima, al tener que guardarla en algún sitio. El poder llevarla en la muñeca es muy adecuado, sobre todo porque además es posible cargar la pulsera y los auriculares a la vez.

Xiaomi tiene varios modelos de auriculares de precio muy contenido. Nosotros probamos los Airdots y encajarían perfectamente en este concepto aunque sería adecuado que redujeran algo su tamaño.

Incluso el sistema de carga, por contacto magnético, parece más conveniente que el actual que usa Xiaomi en sus Mi Band, que obliga a encajar físicamente la pieza central, dándose ocasiones en las que no se carga por no haberla colocado bien.

Habría un precio a pagar

Está claro que un producto de este tipo costaría más que una pulsera normal pero teniendo en cuenta que la MI Band cuesta en España menos de 30 euros y que los auriculares (importándolos) salen por otros 30 más o menos, no sería descabellado ver este producto por unos 70 euros.

Incluso aunque nos vayamos a los 80 euros sería un producto muy interesante para muchos usuarios y Xiaomi es la empresa perfecta para ello porque podría hacerlo con su firma, con la de Amazfit, con Mijia o con la que considerase más oportuna.

Por el momento tendremos que conformarnos con la idea de que un gran fabricante, sea Xiaomi o sea otro, lleve esta ejecución a otro nivel ¿Quizás Samsung?