No hay término en Android: o se inspiran en los móviles de Apple o apuestan por una personalidad 100 % propia. Lo queramos o no el iPhone marca tendencia, es mucho más sencillo parecerse a algo conocido que arriesgar con un diseño original para luego no vender lo esperado. Es un hecho: nos esperan muchos más «notches» durante los próximos meses, incluso podría llegar a los propios Pixel de Google.

El diseño casi sin marcos integrando el recorte frontal en forma de ceja es original del iPhone X, hasta aquí no hay discusión posible. Es cierto que este no fue el primer smartphone con notch ya que ahí está el Essential Phone, pero ¿quién ha imitado el recorte de la pantalla que trajo consigo el móvil de Andy Rubin? Wiko y pocos más, el diseño ampliamente imitado es el del iPhone X. Huawei P20, LG G7, Asus Zenfone 5, Xiaomi Mi 8… La lista comienza a ser enorme. Y lo primero que se dice ante un nuevo móvil con ese tipo de notch es el típico: «Mira, otro iPhone X». Pues no.

Es cierto que el aspecto por delante puede parecerse y que hasta hay marcas que fusilan por completo el diseño del iPhone X (Xiaomi, estoy hablando de ti), pero eso no significa que usar un Android con notch sea como manejar un iPhone X, porque lo cierto es que hay un abismo entre uno y otro. Basta tener a ambos en las manos para descubrirlo.

Apagados quizá se parezcan, pero una vez los usas descubres que no se parecen en nada

La originalidad es un valor añadido al propio teléfono, de eso no hay duda. También la capacidad del fabricante por transmitir el deseo de comprar los productos de su marca, que lucirlos sea sinónimo de estatus. Es lo que ocurre con Apple y sus productos y también es la razón que lleva a muchos fabricantes de Android a introducir elementos tan característicos como el notch, contorno del iPhone X e, incluso, su tecnología.

La intención de los fabricantes de Android es conseguir un iPhone X más barato y con mejores prestaciones

Dado que el iPhone X es uno de los móviles más caros que uno puede comprar lo lógico es que los imitadores ofrezcan la idea de tener un producto similar por menos dinero. Ahora bien: ¿qué experiencia positiva arroja tener el notch? Ninguna, esa es la verdad. Tampoco negativa, cuidado: mirar una pantalla con notch es lo mismo que mirar cualquier panel sin recorte. Y esto atañe al iPhone X, LG G7, Xiaomi Mi 8 y cualquier otro fabricante que se haya adentrado en la tendencia de la dichosa ceja.

Existe cierto componente estético que se evapora con el uso. Entonces, ¿qué nos queda? iOS es iOS y Android es Android, la experiencia que arroja cada uno es distinta y esta es completamente subjetiva. Cada cual verá más positivo uno u otro en función de los gustos, pero nunca es lo mismo manejar un iPhone X que un Android con notch. Incluso aunque el fabricante imite los gestos y hasta la interfaz de iOS.

Cada sistema es tan característico que el diseño y componentes del móvil no marcan tanto la experiencia

Ningún Android con notch es un iPhone X por más que se parezca por fuera, lo mismo ocurre al contrario. Eso sí, los fabricantes de Android deberían hacérselo mirar a la hora de seguir toda tendencia que marca un nuevo iPhone. ¿Por qué imitarlo si cada marca tiene un amplísimo margen de innovación?

No hay excusa: Android no debería ser un clon del iPhone X

Más allá de que la experiencia en el uso sea totalmente distinta no hay duda de que una gran mayoría de fabricantes con Android, algunos de los más significativos, ha sacado la máquina de clonar para fusilar el diseño del iPhone X. Esto es algo perjudicial no solo por la pérdida de identidad de todas esas marcas, también por la mala imagen que termina recogiendo el propio sistema. Es cierto que Android no tiene la culpa de cómo diseñen los móviles los fabricantes, pero todo termina redundando en una mala percepción colectiva.

Llevo varios meses con un iPhone X personal, también varios de los Android que han salido con un diseño muy parecido al del móvil de Apple. Puedo constatar que no, no es lo mismo usar uno que otro. También que la sensación cada vez que veo el lanzamiento de un fabricante de Android es la de «otro iPhone X». Sé que no va a ocurrir, pero ojalá existiese más originalidad a la hora de planear los nuevos diseños. Al menos que no se notase tanto que es Apple la que influye en todos los demás ya que Android no necesita parecerse a un iPhone, tiene sus propios atractivos. Bastantes más que iOS, la verdad.