En móviles emblemáticos analizamos con retrospectiva algunos de los móviles Android que marcaron historia en nuestro sistema operativo favorito. Una sección que nos demuestra cuánto hemos cambiado.

Hace escasos momentos hemos recibido la confirmación del nuevo buque insignia de HTC, el HTC U. Sin duda se trata de un smartphone más importante de lo que parece, ya que tras varios años, se trata del primer buque insignia que abandona la ya mítica marca One.

Móviles emblemáticos: HTC One X

Los HTC One son móviles que todos conocemos y recordamos. Un diseño metálico soberbio, especificaciones punteras y un audio de calidad máxima. La firma taiwanesa ha decidido dejar el futuro de la marca One en el aire, dando el salto a los HTC U.

¿Cuánto tiempo lleva HTC lanzando al mercado sus HTC One? Si recordamos el nombre de sus últimos modelos (HTC 10, M9, M8) podríamos pensar que llevan ya una década con la marca, pero nada más lejos de la realidad. Hoy volvemos a los orígenes.

El primer HTC One que vio la luz no es otro que el HTC One X, el cual llegó a comienzos de 2012 junto a un segundo modelo de media gama (HTC One S), hace poco más de cinco años. Se trata del sucesor del HTC Sensation, el cual fue heredero de la familia Desire (la primera marca de gama alta en HTC).

Un repaso a sus especificaciones

El año 2012 ha sido recordado como uno de los años en los que las pantallas crecieron más. Hace escasos meses Samsung presentó su Galaxy Note con una gigantesca pantalla de 5,3 pulgadas, lo que marcó que desde ese momento todos los fabricantes «diesen el estirón».

Y es que la mayoría de fabricantes eligieron las 4,7 pulgadas como tamaño de pantalla más óptimo (el tamaño de pantalla que usan los iPhone hoy en día), y el HTC One X no fue menos. También fue el año de los móviles con cuatro núcleos, y puesto que la solución de Qualcomm (Snapdragon S4 Pro) no llegaría hasta mediados de año, decidieron optar por un procesador de Nvidia, el Tegra 3. Una de las últimas generaciones de procesadores móviles de la marca.

• Pantalla Super LCD2 IPS de 4,7 pulgadas, resolución HD.
• Procesador Nvidia Tegra 3, quad core a 1,5GHz.
• GPU ULP GeForce.
• 1GB de memoria RAM.
• 16/32GB de almacenamiento.
• Cámara de 8MP.
• Batería no extraíble de 1 800 mAh.
• Radio FM, Bluetooth 4.0.
• Medidas: 134.4 x 69.9 x 8.9 mm.
• 130 g de peso.
• Beats Audio.
• Android 4.0 actualizable a 4.1.1 Jelly Bean.

El abandono de los Desire para una nueva imagen de marca

Los HTC Desire habían sido queridos durante años, pero la llegada del Galaxy S II lo cambió todo. La marca taiwanesa fue bastante veloz creando una nueva imagen de marca. Y esa nueva marca se denominó como HTC One X.

¿Por qué ese nombre? Pues venía a significar como The One What you need, que en Español es lo único que necesitas. Y razón no le faltaba a HTC, ya que presentaron un móvil cuya principal virtud era su pantalla Super LCD2 de gran tamaño, ideal para disfrutar de cualquier tipo de contenido.

Otro de los emblemas de la marca nació aquí, y es el mimo por el sonido. En estos momentos aún no tenían su particular sistema de doble altavoz Boomsound, pero si que tenían un nombre importante detrás. Hace escasos meses se habían asociado con Beats Audio lanzando el HTC Sensation XE, y repitieron para el One X, regalando unos auriculares Beats que tan de moda estaba.

Un móvil que lo pasó muy mal ante unos grandes rivales

Sin lugar a dudas, el HTC One fue un paso hacia adelante gracias a su diseño fresco, pero lo cierto es que también simbolizó el principio del fin para el reinado de la marca. Su principal problema fue el elevado consumo energético, unido a una batería que podría haber dado más de si misma, pero eso no fue todo.

Samsung tenía ganas de liderar el mercado, y lo cierto es que con la línea de diseño del Galaxy S3 lo bordó. La separación de Sony con Ericcson y el Xperia S fue otro de los rivales más distinguidos, y a finales de año tuvimos a dos verdaderos pesos pesados, el LG Optimus G (ya que el Optimus 4X no salió muy bien) y el todopoderoso Nexus 4.

Por si fuera poco, este HTC tuvo un soporte que dejó bastante que desear. Nacido con Android 4.0; Ice Cream Sandwich; llegó a recibir Android 4.1.1 Jelly Bean… y aquí acaba su historia. Os recordamos que esta versión de Android llegó a mediados de año, mientras que Android 4.2 fue presentada en Octubre de 2012. Con ROMs personalizadas logró recibir 4.2, pero en pleno 2017 no ha llegado mucho más lejos. Algo imperdonable.

Se suele decir que todos los comienzos son duros, y lo cierto es que para los HTC One realmente lo fue. Afortunadamente, la política de actualizaciones de la marca (en lo que a sus gamas altas respecta) ha mejorado drásticamente, al igual que los puntos clave de los One (pantalla y sonido). Le deseamos lo mejor a HTC en esta nueva aventura donde la U puede ser la clave de su retorno.