Tras algunos intentos absurdos como las pantallas 3D la industria apuesta en 2017 por las pantallas sin bordes, o con bordes muy pequeños, algo que nos parece positivo, aunque con un pero.

La intención de la industria de la telefonía móvil, como cualquier otra, es aumentar ventas e ingresos año a año. Para ello recurre a nuevas tecnologías y diseños con objeto de convencer al consumidor de que es buena idea comprar el nuevo modelo.

Eso, por sí mismo, no es un problema, pero no da resultado cuando para ello usa artificios que en realidad no son especialmente interesantes, como resultó con las pantallas 3D o los smartwatches.

Sin embargo, junto a la inteligencia artificial parece que este 2017 será el año de las pantallas sin bordes, aunque en realidad sí que los tengan. Para no caer en todo momento en esa cuestión lingüística entendamos que a efectos prácticos un ratio de pantalla del 90% o superior es aceptable para lo que debatimos aquí.

Sharp se adelantó a su tiempo

Japón es un mercado muy especial, con su idiosincrasia y sus tendencias. Es por eso que durante muchos años fabricantes extranjeros no han podido captar cuota de mercado allí.

Y dentro del imperio del sol naciente hay empresas que apenas salen fuera. Una de ellas es Sharp, que si bien crea gran parte de las pantallas que usamos en nuestros móviles no es muy conocida por modelos concretos.

Sin embargo el Sharp Aquos Crystal destacó en 2014 cuando se mostró sin prácticamente marcos en tres de los cuatro lados de su pantalla.

Xiaomi abrió la veda a nivel mundial

Se le ha achacado a Xiaomi que en el Mi MIX no innovó tanto como se decía, sobre todo porque la pantalla de la que presumía ya la tenía el Sharp del que hemos hablado.

No obstante fue la empresa china la que lanzó un modelo que sería la inspiración de muchos otros y que habiendo salido en 2016 podríamos decir que es el padre de todos los terminales que venderán, siendo el Crystal quizás su abuelo.

LG y Samsung se suman, a su manera

Tanto las filtraciones del nuevo LG G6 como del Samsung Galaxy S8 nos dejan ver terminales que sí tienen marcos superiores más notables que el Mi MIX pero que de nuevo rondan el 90% de ratio de frontal ocupado por la pantalla.

El LG G6 ha sido de los últimos en mostrar su estética y vemos de nuevo unos marcos muy contenidos y algo que también nos recuerda al Mi MIX, unas esquinas de pantalla redondeadas, un toque exclusivamente de diseño que sin embargo es agradable a la vista.

Del Samsung Galaxy S8 se espera que tenga el sensor de huellas bajo la pantalla y veremos cómo además de tener marcos muy contenidos los laterales casi desaparezcan por la curvatura Edge de sus bordes.

Los móviles chinos no se quedan atrás

Pero si hay algo que los fabricantes chinos saben hacer bien es inspirarse. Inspirarse y copiar.

Está claro que es cuestión de tiempo que empecemos a ver propuestas de fabricantes menores con marcos muy delgados. Uno de ellos es Elephone y es que se supone que la imagen inferior corresponde al Elephone S8, así como el render que veis en la imagen superior.

De no ser por el botón de la zona inferior podríamos decir que es un Xiaomi Mi MIX mini, incluso con el mismo fondo de pantalla, pero aunque no fuera cierto está claro que a lo largo del año veremos propuestas del mismo modo que hemos visto pantallas curvadas en otros modelos.

Usabilidad y conveniencia

Dentro de la parte más subjetiva del uso de estas pantallas destacamos la estética, aunque es raro que a alguien no le atraiga un móvil que sea casi todo pantalla.

Además por fin podremos subir de tamaño de pantalla sin aumentar el peso o el tamaño del dispositivo, lo que hasta ahora iba de la mano.

Pero hay otro elemento a tener en cuenta: la resistencia.

Algunos le han echado en cara a Xiaomi que en las imágenes de prensa el Mi MIX tenga menos marcos que en la realidad, algo que suelen hacer muchos fabricantes chinos.

El posible problema de estas pantallas es su resistencia

El problema no es que tenga unos marcos más grandes de lo que dicen las imágenes, sino que alteren las imágenes. En realidad que haya un mínimo marco es bueno, puesto que absorberá un golpe mejor que si no lo tiene.

Y esta es una de las cuestiones más controvertidas. Habrá que ver si con este tipo de pantallas no vemos más personas con sus móviles hechos trizas por una caída.

Como sucede con todas las tecnologías habrá ventajas e inconvenientes en su uso pero parece claro que las pantallas sin apenas bordes serán el futuno inmediato.