Menudo lío armó ayer WhatsApp con la actualización de sus términos de uso y servicio. No creo que seas ajeno a esa noticia, pero es justo resumirla: la app de mensajería anunció una relación aún más estrecha con Facebook; confesando que compartirá datos tan sensibles como tu número de teléfono.

Entiendo el escándalo lógico ante este movimiento, sobre todo teniendo en cuenta la preocupación creciente con la privacidad. Muchos se escudarán en que «resulta lógico que Facebook quiera rentabilizar la compra de WhatsApp», pero, teniendo en cuenta los antecedentes de ambas empresas, no deja de ser preocupante. Aunque, consciente de las malas críticas, WhatsApp decidió dejar en manos del usuario su deseo a «compartir la información de la cuenta de WhatsApp con Facebook».

Un aviso que sólo sirve para tranquilizar al usuario

Podríamos echarnos las manos a la cabeza al descubrir ahora que ambas empresas, una dueña de la otra, comparten información ventajosa para la contraria, pero no es algo nuevo: Facebook ya obtenía información relevante de WhatsApp. ¿Te has encontrado en la siguiente situación?

• Añadiste un contacto a la agenda del teléfono sólo con la intención de comunicarte por WhatsApp. Sin conocerlo previamente (puede ser de un nuevo trabajo, una tienda…), y después de haber hablado sólo por WhatsApp, de repente Facebook te lo sugiere como amigo. Qué curioso, ¿no?

Dejemos algo en claro: WhatsApp compartía información de tu uso con la aplicación de mensajería, lo comparte ahora y lo compartirá más adelante. Esto es independiente de que aceptes o no el aviso de compartir información: sólo con usar la aplicación de mensajería aceptas sus condiciones.

Aceptas las condiciones con sólo mantener la cuenta. Entre ellas está la comunicación de tus datos

No existe diferenciación en los términos legales para aquellos que acepten o no el famoso aviso; por lo que cualquiera que utilice WhatsApp asume las obligaciones reflejadas. En este extracto queda bien claro:

Todos nuestros derechos y obligaciones en nuestros Términos se asignan libremente a cualquiera de nuestras afiliadas […] y podemos transferir tu información a cualquiera de nuestras afiliadas, entidades sucesoras o propietarios nuevos.

Como suele ocurrir en los textos legales, la empresa juega con el lenguaje para esconder las verdaderas intenciones. Por ejemplo, a la hora de aceptar o no compartir los datos, aparece un «Tus chats y tu número telefónico no serán compartidos en Facebook» en lugar de «con» Facebook; o esto que aparece en las condiciones generales: «Facebook no usará tus mensajes de WhatsApp para ningún otro propósito distinto del de ayudarnos a operar y proveer nuestros Servicios«. Bajo esta premisa entra un sinfín de posibilidades.

Decide si deseas compartir «ciertos» datos con Facebook

WhatsApp y Facebook han ideado una estrategia comercial que se basa en ofrecerte servicios y opciones que pueden serte de utilidad en base a cómo usas la aplicación de mensajería. Si contactas con una empresa a través de WhatsApp quizá te interese seguir sus servicios en Facebook. De hecho, los perfiles profesionales serán una de las novedades del servicio de mensajería.

También se abre la puerta a los anunciantes dentro de WhatsApp. En los términos de servicio ya se aclara que la aplicación jamás mostrará banners publicitarios, pero sí pueden «proporcionarte mercadotecnia para nuestros servicios y los de la familia de empresas de Facebook, de la cual ahora formamos parte«. Lo cual implica casi cualquier forma de publicidad.

Con el aviso aceptas o no «mejorar la publicidad en Facebook». Para el resto de fines no tienes elección

Puedes negarte a este acuerdo implícito de publicidad, para eso está el aviso que aparece desde ahora hasta el 25 de septiembre. Pero esto sólo atañe a esta «nueva» relación comercial: WhatsApp seguirá guardando tu información en sus servidores y comunicándose con Facebook para mantener sus servicios. De hecho, la comunicación entre «la familia de empresas de Facebook» se realiza sólo con utilizar cualquiera de ellas. Instagram y Oculus incluidas.

Según los términos generales de WhatsApp que todos aceptamos por usarla:

Como parte de la familia de empresas de Facebook, WhatsApp recibe información de esta familia de empresas y comparte información con ellas. Podemos usar la información que recibimos de ellas, y ellas pueden usar la información que compartimos con ellas, para ayudar a operar, proveer, mejorar, entender, personalizar y comercializar nuestros Servicios y sus ofertas, así como ofrecer servicios de ayuda para nuestros Servicios.

Resumiendo. Con la «excusa» de mantener todas las opciones del servicio, existe una comunicación interna mediante la cual todas las empresas de Facebook comparten información de los usuarios. ¿Recuerdas que antes comentaba la anécdota de la sugerencia de amigos por sorpresa en Facebook? Esta asociación no es con fines comerciales; y no te piden permiso para ello: lo aceptas de manera implícita al abrir una cuenta y mantenerla. Seguirá siendo así.

No existe forma de usar WhatsApp sin que se conecte con Facebook

Entonces, ¿existe alguna forma completamente segura de que WhatsApp no comparta ninguno de tus datos con la empresa madre, que es Facebook? Supongo que ya habrás adivinado la solución: elimina tu número de WhatsApp junto con tu cuenta y desinstala la aplicación.

¿Es tan problemático que dos servicios compartan entre sí información de sus usuarios? Depende de qué datos sean, por supuesto. WhatsApp y Facebook aseguran que entre la información compartida nunca estarán ni mensajes, ni perfiles, estados, fotografías ni otro contenido enviado. Además, los mensajes están cifrados de extremo a extremo, lo que garantiza su seguridad y privacidad.

Un último detalle que quiero destacar es el aviso de que la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) «está estudiando los cambios introducidos por la compañía de mensajería en sus términos de uso y política de privacidad«. A lo que hay que sumar otro dato: la Unión Europea está analizando con lupa los servicios de mensajería instantánea.