Los smartphones han evolucionado de forma considerable en los últimos años. A día de hoy podemos obtener una gran experiencia de uso desde las gamas más bajas hasta los dispositivos de mayor categoría.

Muchos pensamos que si invertimos más en adquirir un teléfono de mayor coste obtendremos una experiencia de uso de primer nivel, pero no es algo que siempre se cumpla. Un claro ejemplo es el nuevo Vivo X Play, último terminal de gama alta de la compañía china que lejos de ser perfecto, tiene muchos fallos que podríamos considerar como imperdonables en pleno 2016.

Hoy hablaremos de los fallos de los smartphones que los fabricantes están cometiendo en la actualidad. Un caso concreto es el del nuevo modelo de Vivo, pero son bastantes los fabricantes que siguen presentando estos problemas.

Fallos en móviles: La última versión de Android, por favor

Android es un sistema que recibe actualizaciones con frecuencia, mejorando el rendimiento, la seguridad y en ocasiones ampliando las funcionalidades de nuestro teléfono. En la actualidad, Google realiza una actualización al año, la cual pasa por fase beta desde unos meses antes.

En el caso de Marshmallow, esta versión fue presentada a finales de Mayo y recibió varias betas durante los siguientes meses hasta Octubre, fecha en la que llegó al mundo la versión final. Hace cinco meses que llegó Marshmallow, y aún nos encontramos con teléfonos que llegan con Lollipop como este Vivo según comprobamos en las imágenes de Engadget, e incluso algún fabricante rezagado habrá lanzado algún teléfono con KitKat.

Ya no estamos pidiendo que actualicen con rapidez (que esa es otra, tras cinco meses Marshmallow sigue siendo una promesa para muchos) sino que un teléfono nuevo no llegue ya con un software obsoleto.

Fallos en móviles: Basta de botones capacitivos con botón menú

Los botones capacitivos han formado parte de la vida de los usuarios durante muchos años, pero con los cambios de Android han pasado a un segundo plano. Desde la llegada de Android 4.0, Google comenzó a recomendar a los fabricantes la integración de botones en pantalla en lugar de capacitivos.

El sentido de utilizar los botones en pantalla es que si en futuras actualizaciones Google cambia los botones principales de Android, nuestro teléfono pueda adaptarse a esos cambios con facilidad. El ejemplo perfecto nos lo encontramos en el botón de menú, que hace varios años que desapareció del sistema (aunque en algunas aplicaciones siga siendo funcional). Pues bien, hoy en día no sólo nos encontramos con fabricantes que siguen utilizando los botones capacitivos, sino que además siguen conservando ese botón.

Es verdad que los botones en pantalla nos restan espacio del dispositivo, pero existen implementaciones más aceptables. El ejemplo lo tenemos en dispositivos como los de OnePlus o el reciente bq Aquaris X5, teléfonos con un diseño neutro de botones capacitivos que pueden ser personalizados.

Las capas de personalización que convierten Android en iOS no molan

Hace unos pocos años Android era un sistema operativo que no es que pudiese presumir de buen diseño. Ante este problema, cada fabricante creaba una capa de personalización para hacer que sus teléfonos lucieran un software con mejor estilo.

Con el paso de los años, la estética de Android ha evolucionado para mejor, y las capas de personalización de la mayoría de fabricantes se han adaptado a estos cambios, con ciertas excepciones.

Gran parte de los fabricantes chinos tienen la manía de crear capas de personalización que les diferencien del resto de sistemas, pero al final todos esos fabricantes se acaban pareciendo a una copia barata de iOS. Desde la llegada de Lollipop tenemos en Android un diseño sobresaliente, dejad de intentar copiar a iOS. Las capas de personalización no molan tanto, y retrasan las actualizaciones.

Basta ya de bloatware que no podemos desinstalar

Pero la estética y la ausencia de un software poco actualizado no son los únicos defectos que asolan a los teléfonos modernos. Cuando estrenamos un teléfono es frecuente encontrarnos con aplicaciones basura ; comunmente conocidas como bloatware; que estropean la experiencia de uso.

En ocasiones estas aplicaciones se pueden desinstalar sin problemas, pero en otros tantos estas aplicaciones quedan ancladas al sistema, por lo que aunque las deshabilitemos, siguen ocupando un espacio del dispositivo que hemos pagado y que no podemos utilizar.

Es cierto que las podemos desinstalar si hacemos root en nuestro teléfono, pero es un procedimiento que muy pocos están dispuestos a realizar, y menos con la inminente llegada de Android Pay, sistema de pago que no funciona si somos root.

Estos son para nosotros los cuatro errores imperdonables que muchos fabricantes (especialmente chinos) cometen al lanzar un terminal. Son pocos o ninguno los fabricantes que se salvan de estos errores, y es nuestro deber como usuarios reclamar a los fabricantes que es lo que queremos.