Las aplicaciones de mensajería instantánea, tipo Whatsapp, se han convertido en una de nuestras principales formas de comunicación. Textos, fotos, notas de voz, incluso muchas llamadas ya se envían a través de estas aplicaciones. Ahora han puesto los ojos en otro suculento pastel: el envío de dinero.

Podríamos decir sin miedo a equivocarnos demasiado que los bancos no pasan por su mejor momento de popularidad, con una buena parte de la responsabilidad de la crisis económica sobre sus hombros y los desahucios han llevado a mucha gente a perder toda simpatía por estas entidades. En el otro extremo tenemos las aplicaciones de mensajería instantánea, con la lealtad del cliente en el bolsillo.

En estos gráficos, elaborados por Flurry.com, se puede observar que las aplicaciones de mensajería instantánea no sólo logran retener a los usuarios hasta 5,6 veces más otras aplicaciones, además se usan diariamente 4,7 veces más. Con estos números, las aplicaciones de mensajería instantánea ya se pueden declarar la envidia del mundo: tienen la lealtad del cliente.

Ahora imaginad la siguiente situación. Un amigo te dejó ayer 15€ porque te habías dejado la cartera en casa y no podías pagar la cena, y a lo mejor no le vuelves a ver hasta dentro de una o dos semanas. Podrías hacerle una transferencia, pero el proceso por Internet, aunque sencillo, a veces puede ser algo pesado, a parte de las posibles comisiones que te pueda cobrar el banco. ¿Y si pudieras enviar dinero por Whatsapp? Muchas aplicaciones de mensajería ya están trabajando en esa idea.

Facebook Messenger: la plataforma global también es enviar dinero

La compañía de Zuckerberg ya ha anunciado sus planes para hacer de Messenger una plataforma que vaya mucho más allá de la mensajería instantánea y busca integrar cuantas más aplicaciones mejor, y que los comercios puedan contactar a través de ella con sus clientes para ofrecer información sobre sus pedidos. A esto hay que sumarle otro anuncio que hizo el pasado 17 de marzo, y es que en los próximos meses comenzará a desplegar en EEUU la opción de que los usuarios envíen dinero a sus contactos a través de Messenger.

Para ello, tanto el emisor como el receptor deberán tener una tarjeta de débito configurada en Facebook. Un icono con el símbolo del dólar aparecerá junto a los botones para enviar fotos o stickers. Bastará con presionarlo, introducir la cantidad y enviarlo. El dinero se envía de inmediato, pero dependiendo del banco puede tardar de uno a tres días, como cualquier transferencia.

Facebook asegura que las transferencias son completamente seguras gracias a su sistema de encriptado y podrás crear un pin para añadir una nueva capa de seguridad al envío, además también se podrá realizar desde la versión de escritorio. No se sabe cuándo esta opción estará disponible en el resto del mundo, y tampoco si el sistema se integrará también en Whatsapp, propiedad de Facebook.

Gmail: dinero por correo electrónico

Google ya permite desde mayo de 2013 el envío de dinero combinando el poderío de Google Wallet y Gmail, aunque sólo en Estados Unidos, y viendo los movimientos de su competencia directa no sería de extrañar que no tarde en integrar esta opción también en Hangouts.

Su uso es sencillo, basta con tener Google Wallet correctamente configurado y el signo del dólar aparecerá junto a las opciones para adjuntar archivos, introduces la cantidad deseada y la cuenta de quien deba recibir el dinero, y envías el correo de la forma habitual. Si eres tú quien recibe el dinero por Gmail, para hacer efectiva la transacción deberás responder una serie de preguntas para verificar tu identidad, como por ejemplo tu dirección actual.

Si finalmente Google apostará por integrar este sistema en Hangouts es pura especulación pero teniendo en cuenta que ya tiene parte de la infraestructura y que parece que es la tendencia de muchas aplicaciones de mensajería, no sería una sorpresa que lo viéramos en los próximos meses.

Twitter: Si estás en Francia puedes tuitear dinero

El pasado octubre, Twitter llegó a un acuerdo con el BPCE, el segundo banco más importante de Francia, para que sus clientes pudiesen enviar dinero a través de un simple tuit. El servicio por ahora sólo está disponible en el país galo para los clientes del susodicho banco como parte de un servicio llamado S-Money.

Su uso es muy simple, basta con poner el nombre del usuario al que quieres hacer el envío y poner la cantidad junto al hashtag #envoyer, y la transferencia se realizará de forma instantánea. Para evitar el lavado de dinero, se limita el envío a 250€ diarios a otros usuarios, o 500€ a obras de caridad o campañas de crowdfunding. Por otro lado hay que mencionar que estos mensajes tienen que realizarse públicamente por lo que todo el mundo sabrá a quién envías dinero.

Si esto acaba por extenderse, sin duda estaremos ante una gran razón para seguir a Bill Gates, a ver si en una noche de borrachera le da por regalar amor verde entre los tuiteros.

Snapchat: No, el dinero no se autodestruye

Los mensajes autodestruibles de Snapchat no van a ser el límite de la aplicación. El pasado noviembre presentó Snapcash, un servicio que permite enviar dinero a través de su aplicación gracias a un acuerdo con Square, una empresa creada por Jack Dorsey, uno de los creadores de Twitter. Su funcionamiento es sencillo, abres el chat de la persona a la que quieres enviar el dinero y escribes la cantidad después del signo del dólar. El botón de enviar se volverá verde y al presionarlo, se enviará.

De nuevo, este servicio está de momento disponible únicamente en EEUU, requiere que des los datos de tu tarjeta de débito y que seas mayor de 18 años. Aquí tenéis el video con el que presentaron el servicio ¿genialidad o vergüencica ajena? Votad en los comentarios.

Sólo esperemos que el dinero no se autodestruya también.

El dinero no se iba a perder la fiesta del mundo hiperconectado

Los smartphones, las aplicaciones de mensajería instantánea y las redes sociales han dado un vuelco a la forma en la que nos comunicamos, dando lugar a un mundo hiperconectado en la que un señor en las Islas Pago-Pago puede saber lo que hace el gato de un tipo que está en el lago Titikaka, y si hay alguien que a lo largo de la historia de la humanidad no se ha perdido estas fiestas es el poderoso caballero Don Dinero.

Es complicado, por no decir imposible, que las redes sociales o las aplicaciones de mensajería lleguen nunca a sustituir a los bancos -no soy capaz de imaginarme a Disney pagando a George Lucas los más de 3.000 millones que pagó por su empresa a través de Whatsapp-, pero sí que es posible que les roben un jugoso trozo de pastel. Sólo hay que ver las estadísticas indicadas al principio para comprobar el enorme uso que la gente da a estas aplicaciones, y si podemos enviar dinero desde ellas, ni que sea por comodidad, lo haremos antes que abrir la aplicación del banco que nos pide rellenar mil casillas cada vez que queremos hacer algo.