Aeropuerto de El Prat, en Barcelona.

Aeropuerto de El Prat, en Barcelona. EFE

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Las cuatro huelgas que amenazan la salida de vacaciones de miles de españoles

  • Los tripulantes de Ryanair y el personal de tierra de todos los aeropuertos harán huelga la próxima semana.
  • Los trabajadores de tierra de Iberia en El Prat han convocado paros para los días 27 y 28 de julio y el 3 y 4 de agosto.
18 julio, 2018 02:23

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Verano agitado para el transporte en España. A una semana de la huelga coordinada de Ryanair en cuatro países y los paros convocados por los trabajadores de tierra de los aeropuertos de todo el país, no hay visos de un acuerdo que evite el previsible caos que afectará a miles de viajeros en los últimos días de julio.

Se estima que la Operación Salida de este año movilizará a unos 960.000 pasajeros diarios en julio y agosto, un 7,6% más que el año pasado, según un informe elaborado por Foro Regulación Inteligente. El 65% del movimiento se concentrará en cinco aeropuertos: Madrid-Barajas, Barcelona-El Prat, Palma de Mallorca, Málaga-Costa del Sol y Alicante-Elche, apunta el think tank.

La primera huelga que irrumpirá en la ya de por sí agitada dinámica de los aeropuertos españoles será la de los tripulantes de Ryanair. Los paros tendrán lugar los días 25 y 26 de julio y, con intención de evitar que la aerolínea reviente la huelga como ya pasó en abril, se realizará de forma coordinada en cuatro países: España, Portugal, Italia y Bélgica.

A este paro coordinado están llamados alrededor de 4.000 trabajadores, 1.800 de ellos en España. Con trece bases españolas, fuente sindicales estiman que la huelga afectará a unos 600 vuelos con origen o destino en España por día y a unos 300.000 pasajeros.

Después de que fracasara el acto de conciliación ante el Servicio Interconfederalde Mediación y Arbitraje (SIMA), los sindicatos Unión Sindical Obrera (USO) y Sitcpla registraron la huelga y trataron de acordar los servicios mínimos con la compañía irlandesa, algo en lo que tampoco ha habido éxito.

Los representantes sindicales están citados este miércoles en la Dirección General de Trabajo con la previsible intención de aclarar la situación legal en la que se encuentran los trabajadores de la low cost ante esta situación. Fomento puede fijar los servicios mínimos de los trabajadores que tienen contrato en España, pero cerca del 80% del personal español y que trabaja en base nacional de la aerolínea está sujeto a un contrato irlandés. “No sabemos muy bien cómo hará Fomento para fijar los servicios mínimos, porque el hecho de tener el contrato en Irlanda no puede menoscabar el derecho de huelga de un trabajador español”, apuntan fuentes sindicales a este periódico.

Previsiblemente, agregan, Fomento citará a los sindicatos para marcar los servicios mínimos de los días de huelga una vez celebrada la reunión con Trabajo.

Golpe a El Prat

En el caso de los trabajadores de tierra de Iberia en El Prat, los paros están previstos para los días 27 y 28 de julio y el 3 y 4 de agosto. Según UGT, el sindicato mayoritario, estos paros se deben a “la falta de diálogo” de la compañía ante la sobrecarga de trabajo, la falta de personal y los incumplimientos “sistemáticos” de los acuerdos.

Este miércoles se celebra el acto de mediación entre sindicatos y la aerolínea en la Consejería de Trabajo de Barcelona para ver si acercan posiciones y se desconvoca la huelga. “El comité de Iberia Barcelona desea una buena mediación. Queremos que la empresa entienda la necesidad de fomentar el empleo para sacar adelante el exceso de carga de trabajo. La falta de personal, como se ha visto esta semana, provoca retrasos”, comenta el portavoz de UGT Iberia Barcelona, Omar Minguillón, a este periódico.

Los trabajadores de la Ciudad Condal “siguen esperando” un plan industrial para el aeropuerto catalán que incluya la ampliación de la plantilla -actualmente formada por 2.000 trabajadores-, para solventar la sobrecarga de trabajo. La situación se agrava, apuntan desde el sindicato, durante el verano, debido al crecimiento de la operación de Vueling, otra de las aerolíneas del grupo IAG del que forma parte Iberia.

Además, ven necesario apostar por la creación de empleo estable y equilibrar el eventual, así como reformar el calendario de turnos para evitar que los trabajadores tengan que hacer nueve jornadas de trabajo seguidas.

Desde el Foro Regulación Inteligente advierten de que la conflictividad laboral en El Prat, derivada tanto de los problemas con controladores en Marsella o los pilotos de diversas aerolíneas, tendrá un coste directo de 12 millones de euros y empobrecería al sector turístico en 33 millones. Pero el coste, que no incluye el impacto de esta huelga, podría ascender a 91 millones (20 millones para la industria y 71 millones para el sector turístico) si el panorama empeora y los paros tienen mayor impacto.

Sin servicios de tierra a nivel nacional

La primera piedra la tiraron los trabajadores de Iberia en El Prat, pero les han seguido el resto de los trabajadores del sector del handling en España.

Este miércoles tiene lugar también el acto de conciliación en el SIMA entre los sindicatos convocantes (CCOO, UGT y USO) y la patronal de las empresas del sector, la Asociación de Empresas de Servicios de Asistencia en Tierra en Aeropuertos (Aseata), que agrupa a compañías como Acciona, Aviapartner, Clever Handling Services, Iberia Airport Services, Groundforce, easyJet y Ryanair.

Si falla la conciliación y la huelga sigue adelante, el primer día de paro al que están llamados los 60.000 trabajadores de las empresas que forman Aseata será el próximo 29 de julio, confirman a este periódico fuentes sindicales, y afectará a todos los aeropuertos de la red de Aena. Los sindicatos denuncian que tras más de dos años de negociación sin acuerdos con Aseata, la patronal sólo ha “precarizado el sector”.

Los servicios de handling abarcan desde la asistencia a personas de movilidad reducida en para el embarque y desembarque a la gestión de mercancía, correo o servicio de colocación y retirada de pasarelas que conectan el avión con el aeropuerto.

Los sindicatos piden una revisión salarial así como de las condiciones y garantías económicas del personal subrogado, definir una nueva jornada anual y un nuevo plan de previsión social, entre otros temas.

Desde Fomento, el secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, Pedro Saura, ha indicado este martes que la prioridad será garantizar la movilidad de los pasajeros de avión durante las vacaciones de verano. Aena ha descartado hacer declaraciones sobre este conflicto, entre la patronal y los sindicatos, hasta que no se vislumbre el rumbo de las negociaciones.

Paros en Renfe y Adif

Pero la pelea de los trabajadores del sector aéreo no es el único evento que agitará el transporte de los españoles este mes. La Confederación General del Trabajo (CGT) ha convocado para el próximo día 27 de julio la primera de una serie de movilizaciones en Adif y Renfe con la que pretenden “rescatar derechos perdidos”.

Desde CGT aseguran a este periódico que están “abiertos a la negociación” para evitar la confrontación que supone convocar paros parciales y totales, pero exigen una “negociación ágil con resultados tangibles”. Según el sindicato, los acuerdos alcanzados en octubre cuando se programó otra huelga no se han cumplido. “Hay buenas palabras, pero no se cumplen y los problemas se agravan”, sostienen, al tiempo que denuncian la precarización de los trabajadores de Renfe y Adif.

A las movilizaciones del día 27, que afectarán a los trenes programados entre las 00 y las 2 horas, de 7 a 9 horas y de 16 a 18 horas, se pueden sumar otras jornadas con paros parciales o totales en los próximos meses, advierten desde el sindicato. “Falta concretar las fechas, pero ya tenemos acordados los paros para septiembre, octubre, noviembre y diciembre”, indican fuentes de CGT. “Aunque con las huelgas buscamos tener un impacto, no queremos fundir a la gente que va y vuelve de vacaciones”, agregan.

Desde el sindicato acusan la falta de diálogo con el Gobierno anterior y miran hacia delante con desesperanza. “Históricamente, no es que el PSOE haya hecho gran cosa por el sector ferroviario”, explican las mismas fuentes. “Además, los cambios efectivos de este año serán mínimos porque han empezado a gobernar con un presupuesto diseñado por el PP”, lamentan.