Emprender es una de esas profesiones que no se pueden estudiar en la universidad. La creatividad, la ambición y las ideas necesarias para ser emprendedor no se 'enseñan', aunque la formación específica en emprendimiento puede servir de impulso a aquellas personas que desean conseguir unas aptitudes especiales para llevar a cabo su proyecto.

Curiosamente, los emprendedores con formación específica para crear empresas son los que menor tasa de abandono de proyectos presentan, según el informe nacional del observatorio de emprendimiento Global Entrepreneurship Monitor (GEM). Desde luego que la formación no es garantía de éxito, pero se pueden adquirir ciertos conocimientos y habilidades muy útiles para conseguirlo.

Por ello, casi la mitad de los emprendedores españoles (49,2%) cuenta ya con formación específica para crear empresas, una cifra que aumenta en las de reciente creación. En las denominadas 'empresas nacientes' (proyectos con menos de 3 años de antigüedad), más de la mitad de los emprendedores tiene formación específica. Este colectivo es el más propenso a emprender, según el GEM, que advierte además un incremento sustancial de la 'tasa de actividad emprendedora' en la población con un nivel de educación superior (del 6,5% en 2016 al 14% en 2017).

Junto al número de emprendedores formados, se multiplican en España la cantidad de másteres y cursos enfocados al emprendimiento, donde universidades y escuelas de negocios ofrecen todo tipo de títulos, algunos incluso avalados internacionalmente. Dependiendo del tipo de formación, la duración y el plan de estudios existen varios ciclos formativos:

• Cursos intensivos: Son ciclos de corta duración, como el programa para emprendedores Babson Startup Jumpstart, un curso inmersivo de dos semanas en Boston para el que Banco Santander ofrece 20 becas. En el desarrollo de este programa, los estudiantes pondrán a prueba sus conocimientos a través de simuladores de negocios y prácticas empresariales reales, preparándose para adquirir las habilidades necesarias en la creación de un proyecto.

• Programas de aceleración: Este tipo de planes tienen una propuesta similar a los cursos intensivos, pero su duración suele ser de varios meses. Se proporcionan las herramientas necesarias para poner en marcha los proyectos a través del diagnóstico de las oportunidades, fortalezas y debilidades de cada uno, para que los emprendedores puedan determinar la estrategia de su negocio.

• Máster: Los títulos de posgrado, a diferencia de los anteriores, proporcionan un certificado académico, con el consiguiente esfuerzo económico y de tiempo. Sus programas de estudios se especializan en áreas concretas de la empresa y suelen durar entre uno y dos años. La alternativa más flexible son los másteres online, en los que el alumno decide cuándo y dónde recibir los contenidos, siendo posible compaginar estos estudios con el horario laboral. Entre las ventajas de esta modalidad está el precio, generalmente más económico que en los másteres presenciales. Aunque algunos son exclusivamente online, otras entidades ofrecen el mismo título en ambas modalidades.

En la categoría de máster, podemos destacar el modelo MBA (Máster en Administración de Empresas). Son programas de posgrado dirigidos a profesionales, ya con cierta experiencia, que desean conocer mejor el funcionamiento del ámbito empresarial. Estos títulos gozan de mucho prestigio internacional y se necesitan al menos dos años para completarlos. Las diferencias con un máster normal es que el MBA se enfoca a un conocimiento más general de los proyectos empresariales y se sondean todas las áreas: economía, marketing, contabilidad, finanzas, recursos humanos, logística… En España, hay dos posgrados que se encuentran en el ranking del Financial Times sobre mejores MBA para emprendedores, los de las escuelas de negocios IESE y ESADE.

Además de todas estas titulaciones, también hay cursos gratuitos que pueden aportar competencias mucho más específicas, como desarrollo de e-commerce o de apps móviles. Suelen tener una duración de varias horas y son exclusivamente online.

Ventajas de la formación específica

Desde los cursos gratuitos a los másteres y programas de aceleración, la oferta para aquellos emprendedores que deseen formarse es inmensa. Considerando que prácticamente la mitad de los emprendedores tienen formación específica para crear empresas y que esta cifra aumenta cuanto más nuevas son las iniciativas, es acertado pensar que los nuevos emprendedores se preocupan más por adquirir unas habilidades específicas y lo hacen a través de este tipo de formación.

Entre los principales factores que han favorecido la actividad emprendedora se encuentran, por ejemplo, los programas de apoyo implementados por el Gobierno, y la formación de los emprendedores. Gracias este aprendizaje, los nuevos proyectos son más competentes y aumentan las probabilidades de ser exitosos.

La formación específica en emprendimiento puede ser una acertada elección para aquellos emprendedores que tengan una buena idea y no sepan cómo darle vida. No sólo obtendrán un mayor conocimiento del mundo empresarial y ampliarán su red de contactos, también saldrán más motivados y con nuevas ideas que poner en marcha.