Una tragedia ha azotado al balonmano ruso. Sergey Pogorelov fue uno de los mejores jugadores del país en la década de los noventa, donde destacaba por su gran altura tanto en ataque como en defensa. Como jugador internacional logró los títulos de campeón de Europa, de un Mundial y de los Juegos Olímpicos en el 2000, además del bronce olímpico en 2004, que agrandaba la leyenda de uno de los mejores jugadores que ha visto Rusia en esa disciplina.

Este miércoles la madre de Porgolerov avisó a la policía porque encontró al exinternacional ruso muerto en su casa. El jugador tuvo una carrera llena de éxitos, en la que pasó por tres países distintos. En su época en Alemania pasó por Lemgo y Eisenach, en Francia, donde es muy recordado, defendió la camiseta de Villeurbanne y París. Por último también tuvo un paso prolongado por España en Ciudad Real, Altea y Algeciras. Finalmente acabó su carrera deportiva en Macedonia. 

La causa de su muerte sigue siendo una incógnita, ya que solo es oficial que fue encontrado por la policía. Con casi 200 partidos internacionales, y retirado desde hace más de ocho años, al parecer la policía acudió a su domicilio tras la alerta dada por la madre del jugador, que no había podido ponerse en contacto con él según informa la web Handball Planet. 

[Más información: El balonmano español y la ASOBAL aún lloran la desaparición del Ciudad Real seis años después]

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