El automovilismo y el deporte en general está de enhorabuena. La piloto alemana Sophia Floersch ha vuelto a subirse a un monoplaza y a dar vueltas a un circuito en un ambiente profesional. Después de su tremendo accidente en el circuito urbano de Macao, ha tardado más de cien días en recuperarse, pero finalmente su equipo le ha dado la oportunidad de rodarse en Monza.

"Te das cuenta de lo mucho que amas y necesitas algo cuando estás cerca de perderlo. Los dos últimos días han sido los mejores hasta ahora de 2019. Esta ha sido la primera vez que he vuelto a montarme en un monoplaza, aquí en Monza", afirmó la joven deportista. Incluso su equipo, el Van Amersfoort Racing, le envió un cariñoso mensaje en las redes sociales.

Cuando estaba corriendo una carrera de la Formula 3 en el circuito asiático tuvo una colisión a alta velocidad. La mala suerte quiso que su coche se elevara a 275 kilómetros por hora y se acabó estampando contra una valla.

Los médicos, avisados por la habitual peligrosidad del espectacular circuito, la atendieron al instante y la trasladaron al hospital de urgencia. Cuando abandonó el centro médico la teutona reconoció que 'había vuelto a nacer': "El 18 de noviembre de 2018 celebré mi segundo cumpleaños en Macao. Ahora empieza un nuevo capítulo y no puedo esperar".

Una vez se bajó del coche en Italia describió sus emociones: "En mi primera sesión se me puso la piel de gallina y una sonrisa enorme en mi cara. No estaba tan feliz en mucho tiempo. Ahora sé para qué he estado entrenando tan duro las últimas semanas. Las sensaciones que tengo al conducir no las supera nada. Es mi vida y tengo la suerte de poder seguir persiguiendo mi sueño". 

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