“Es cierto. Lo hice. Es parte de mi trabajo. Sé que Stephen falló los tiros libres por mi influencia”, asegura recordando que “soy parte de este equipo. Doy a los Nets una media de 6 o 7 puntos extra por partido. Lo hago porque amo este equipo, mi ciudad, los partidos el baloncesto y ayudo a esta franquicia a ser grande. Simplemente hago mi trabajo”.

Conocedores de sus poderes, algunos jugadores de equipos rivales han pedido ayuda a la seguridad del pabellón para desactivar a Mr. Whammy. Al menos él lo ve así: “En 2012 tuve un incidente con LeBron James. Ellos perdieron y se quejó a la seguridad para que me sacaran de mi sitio. Pero la seguridad de los Nets es magnífica. Unas personas increíbles. No he tenido casi problemas y llevo 20 años haciendo este trabajo”. King James ni entró a valorar el incidente en su momento, pero el encargado de seguridad de los Nets hace un guiño de complicidad al recordar el suceso.

LA DOBLE VIDA DE MR. WHAMMY

Licenciado en Derecho por la NYU, a sus 80 años Bruce S. Reznick parece salido de una película de Woddy Allen. Los Brooklyn Nets no podían haber buscado mejor embajador. Es su mentalista particular. “Es una persona adorable. Siempre viene a los partidos y arma un revuelo considerable cuando los rivales van a la línea de tiros libres. Es ya un icono de los Nets”, comenta Ally Love, la animadora y speaker del Barclays Center de Brooklyn. Y es que la entrada de Mr. Whammy en la cancha de los Nets es más propia de una estrella de cine que de un aficionado.

Fotos, autógrafos y algún saludo sin responder (“porque está totalmente sordo, igual que yo” confiesa su encantadora esposa Judith). Mr Whammy porta orgulloso una de sus pancartas, donde escribe poemas para motivar a los fans de los Nets. Algo que repite “con cariño. No deseo mal a nadie, no deseo lesiones, sólo que fallen los tiros libres y el equipo tenga un extra de puntos gracias a mí. Hago el Whammy y funciona, pero no puedo revelar cuál es su secreto”.

LA EXCEPCIÓN QUE CONFIRMA LA REGLA

Ante la solicitud de que haga una excepción con los jugadores españoles que visitan Brooklyn, se muestra taxativo: “Lo siento, no haré distinciones con los jugadores españoles, aunque usted me cae bien. Ellos fallarán igual que los franceses, los croatas o los americanos. Yo ayudo sin condiciones a mi equipo. Sólo hice una excepción, con Jason Kidd. Embrujarle me parecía una traición, aunque se fuera a los Knicks”, sentencia.

El jefe de operaciones de márketing de los Nets, Eric Cauthen, es consciente de que “le gusta a los fans, le quieren, se ha convertido en parte del espectáculo. Vienen a fotografiarse con él y para nosotros es una persona entrañable”.

LA BROMA MAS DIVERTIDAD ES DECIR LA VERDAD

El Whammy ha podido con el abogado y Reznick confiesa que “no tengo sueldo, ni me pagan los tickets. Sigo fiel a mi cita con los Nets y me siento útil al equipo. Lo hice en New Jersey y sigo con la tradición en Brooklyn. Mira los porcentajes de tiros libres de los rivales cuando nos visitan si no me crees”, afirma mientras que su esposa susurra “menos mal que le dejan moverse con libertad y situarse junto a la canasta en los tiros libres. Incluso los árbitros a veces nos hacen un guiño de complicidad. Creo que si no le dejaran hacerlo, no volveríamos al baloncesto”.

Woody Allen, asiduo seguidor de la NBA, mantienes que su “forma de bromear es decir la verdad. Es la broma más divertida”. En el caso de Mr. Whammy el genio de Brooklyn encontró una nueva prueba para corroborar sus teorías. ¿Los veremos pronto juntos en una de sus películas?

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