Este miércoles, 10 de abril, se celebra la segunda sesión del juicio contra Daniel Sancho (29 años), en la que se toma declaración a cuatro testigos más de la Fiscalía. Hasta el tribunal provincial de Samui, al sur de Tailandia, han acudido los padres del acusado. A Rodolfo Sancho (49) ya se le vio este pasado martes, día 9. Silvia Bronchalo (49), en cambio, no pudo asistir por hallarse indispuesta.

Las primeras imágenes de la analista inmobiliaria y madre del acusado han trascendido este martes. Con el rostro serio, ataviada con un discreto estilismo en blanco y negro y ocultándose tras unas gafas de sol, Silvia Bronchalo ha llegado al tribunal. Se ha mantenido discreta y en un primer momento ha evitado hacer declaraciones, a diferencia de Rodolfo Sancho. 

"Yo os trato con educación y respeto y espero lo mismo de vosotros, así que, por favor, no me cerréis el paso, dejadme pasar, no me empujéis, no me pongáis zancadillas...", ha implorado el actor a los medios de comunicación que, como este pasado martes, aguardan a las puertas del tribunal provincial de Samui. El intérprete ha reiterado que no quiere que le persigan por la isla y ha advertido: "En este país está prohibido grabar a la gente en público y hacerle fotografías. No tengamos un problema".

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Silvia Bronchalo, a su llegada al tribunal. Gtres

Silvia, sin embargo, sí se ha pronunciado en el receso de la sesión, manteniéndose en una línea similar a la de Rodolfo. "Aquí nadie ha ganado, todos hemos perdido", ha sentenciado. La analista inmobiliaria, además, ha pedido respeto. 

La expareja ha llegado al tribunal por separado, pues bien se conoce que su relación es fría y distante. Cabe recordar que hace unos meses, en pleno drama por el caso de su hijo, tuvieron un cruce de acusaciones. Silvia culpó a Rodolfo por "insultos y vejaciones", argumentando que el intérprete se refería a ella con calificativos como "pirada", "incapaz" o "bipolar". El intérprete lo desmintió y a su vez acusó a su exmujer de amenazarlo a él, a su actual esposa, Xenia Tostado (42), y a su hija menor.

El juicio contra Daniel Sancho se celebra a puerta cerrada. El juez encargado, cuya identidad es confidencial, ha prohibido a todos los asistentes que informen de lo que ocurre dentro de la sala. El magistrado ha subrayado que en caso de que haya sospechas de que se ha difundido información se perseguirá y conllevaría penas de cárcel.

Antes de que comenzara la segunda sesión del juicio, el abogado de la familia de Edwin Arrieta, Juan Gonzalo Ospina, ha comentado ante los medios que intuía que esta segunda jornada también sería "larga" y "complicada" como el día anterior. La de este pasado martes se prolongó desde aproximadamente las 9:30 hasta las 18:30, dos horas más de lo previsto y con un receso.

Rodolfo Sancho el segundo día del juicio contra su hijo, Daniel. Gtres

En línea con el primer día, los testigos de este miércoles son personas que tuvieron contacto con Daniel Sancho en Phangan, isla vecina a Samui donde supuestamente tuvo lugar el crimen el pasado 2 de agosto. Entre ellas, quien le vendió el kayak desde el que se habría deshecho de las partes del cuerpo del cirujano colombiano.

También está previsto que declaren las dependientas del supermercado y la ferretería en las que el cocinero compró cuchillos, productos de limpieza y una sierra el día antes del supuesto asesinato. De esta manera, la Fiscalía probaría que se trató de un crimen premeditado.

"La declaración de la vendedora es determinante", ha considerado Ospina a las puertas del tribunal. El letrado, además, piensa que "quizás la lista de testigos termine reduciéndose" al considerar la situación "bastante clara".

Por su parte, el abogado defensor de Daniel Sancho, Aprichat Srinuel, ha dicho antes de entrar en la sala que los testigos de este miércoles "siguen siendo circunstanciales". El letrado ha asegurado estar "preparado" en un caso que contiene "muchos testigos y pruebas forenses". Además, ha asegurado no estar preocupado "porque quiero que se revele la verdad". "Por la parte del acusado, también va a pelear el caso a fondo", ha sentenciado.

La Fiscalía acusa a Daniel Sancho del asesinato premeditado de Edwin Arrieta y otros dos delitos: el de ocultación del cadáver y destrucción de documentación ajena, por el pasaporte del colombiano. El español se enfrenta a una condena máxima de pena de muerte.