Este lunes 21 de agosto se conocía la noticia de que Miguel Bosé (67 años) fue asaltado en su casa de México junto a dos de sus hijos, Diego y Tadeo (11), el pasado viernes 18 de agosto. Horas después, el cantante ha lanzado el primer comunicado sobre lo que realmente sucedió aquel trágico día.

"Queridos amigos, el viernes por la noche, un comando de diez sujetos armados irrumpió en mi domicilio. Nos asaltaron. Tuvieron atados a mis hijos, al personal de la casa y a mí durante más de dos horas. Se llevaron todo, el coche incluido. Todo muy estudiado y milimetrado. Para resumirlo, estamos todos bien. Mis hijos se portaron como dos valientes. Admirables. Fue todo muy tenso, delicado y desagradable", comienza Bosé en una publicación a través de las redes sociales.

"Esta es la única versión a la que debéis atender. Se están diciendo cosas que no son ciertas, como habitualmente a algunos les gusta. Gracias a todos por el apoyo y la preocupación constante demostrada, pero quedad tranquilos. A mis vecinos de urbanización, los primeros en llegar, mil gracias de corazón", continúa.

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Finalmente, el artista de Amante bandido emite un mensaje para aquellos que "tanto especulan" sobre lo ocurrido. "No voy a abandonar México, siento mucho decepcionarles. Aquí estoy y aquí me quedaré para hacer frente a lo que sea, en el país más hospitalario del planeta", sentencia.

Varios compañeros y amigos de profesión le han mandado fuerza y ánimo en este duro momento. Boris Izaguirre (57) aseguraba que todos habían sido unos "valientes", que se encuentra "preocupado" por su situación, pero que admira que explique lo ocurrido para "atajar cualquier especulación". Asimismo, Juan Magán (44) se alegraba de que "estéis bien".

Este robo lo confirmaba el presentador mexicano Gustavo Adolfo Infante y lo avanzaba el medio tv notas. Todo surgió así: Bosé se encontraba en su casa con sus dos hijos, cuando de repente escuchó voces en el interior del domicilio, apareció uno de los ladrones y le apuntó en la sien con un arma de fuego. Después, tanto ellos como su equipo de trabajo fueron encerrados en una habitación mientras los 10 atracadores robaron todo lo que estaba a su mano: joyas, dinero en efectivo, el vehículo del hijo de Lucía Bosé... Lo único que no se llevaron de gran valor fueron las obras de arte y los cuadros que poseía el cantante.

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En cuanto terminaron, los asaltantes abandonaron el domicilio en una furgoneta y se llevaron como rehén al chófer de Bosé, quien tiempo después fue encontrado en la alcaldía de Miguel Hidalgo.