Paula Echevarría (42 años) y Miguel Torres (34) han pasado unos días muy familiares en Candás, Asturias, la tierra natal de la actriz. Si bien a mediados de junio la pareja inauguraba la nueva normalidad saliendo a cenar con un grupo de amigos por la capital madrileña, en esta ocasión, aprovechando que ya se puede viajar entre provincias libremente, Paula ha aprovechado para reencontrarse con su familia.

Lo cierto es que la actriz estaba deseando ver a los suyos -el único deseo que ha expresado abiertamente durante el confinamiento- y por eso no ha dudado en desplazarse hasta el norte junto al exfutbolista y la pequeña Daniella, la hija que tiene en común con David Bustamante (38). Allí, Paula y Miguel han dado un romántico paseo a solas por las calles del pueblo de Candás cogidos de la mano, con sus mascarillas pertinentes y sin perder un ápice de glamour. Por su parte, la intérprete ha optado por un vestido corto negro -que realzaba su bronceado- y una americana en tonos blancos y negros a juego con sus sandalias.

El que fuera futbolista se ha decantado por un toque más informal, un vaquero clásico, una camisa azul cielo remangada, deportivas y un jersey anudado a la cintura. La pareja se ha reencontrado con los padres, el hermano, la cuñada y las sobrinas de Paula. Todos juntos han pasado una agradable jornada en uno de los restaurantes más conocidos de la zona. Las imágenes no solo denotan el feliz y plácido momento que está atravesando la pareja -aún sin planes de boda-, sino también la excelente relación y sintonía que mantiene Miguel Torres con su familia política. 

Tras esta escapada a Candás, la pareja ha regresado a Madrid y han continuado los reencuentros. En esta ocasión, por separado: Paula se ha visto con una buena amiga suya, Alicia Hernández, directora creativa de Dolores Promesas. "¿Ves como todo llega? Le podía tanto el ansia de verme que me ha esperado en la puerta del parking dándome un susto de muerte", posteaba Alicia junto a una foto con Echevarría. "Mi pichona", respondió esta. 

No cabe duda de que Miguel y Paula se han convertido en una de las parejas más sólidas del panorama nacional. No solo eso: se han demostrado a sí mismos que tienen bastantes cosas en común y que la solidez se ha instalado en sus vidas. Ambos se cuidan mucho y han hecho deporte juntos durante el confinamiento. A finales del pasado mes de mayo, Echevarría desvelaba, orgullosa, que ya llevaba 20 meses sin fumar. Desde que rehizo su vida con el que fuera del jugador de Málaga Club de Fútbol, se ha dedicado al deporte y la vida sana. A través de los stories de Instagram, sus 3,2 millones de seguidores han sido testigos de la rutina de ejercicios que durante el confinamiento la pareja ha realizado desde el gimnasio de su casa. En estos casi tres meses de confinamiento debido a la grave crisis sanitaria del coronavirus, Daniella, la hija en común entre Paula Echevarría y David Bustamante se ha ido alternando en las distintas casas de sus padres.

Algunas semanas las ha pasado junto al cantante y otras ha estado conviviendo con su progenitora y la pareja de esta, Miguel Torres. Además, Daniella, que en agosto cumplirá 12 años, ya está hecha toda una influencer, como su madre. En este tiempo de cuarentena, la protagonista de Velvet ha publicado infinidad de vídeos junto a su hija en la red social de moda de los millenials: Tik Tok. Un gesto natural, el de exhibir a su pequeña en las redes sociales, que antes evitaba hacer. 

Precisamente, esta exposición de Daniella en las redes sociales de su madre se destacó en algunos medios de comunicación, ya que hasta la fecha la actriz había preservado muy mucho la intimidad de la menor. No obstante, la intérprete, como madre que es de Daniella, tiene plena potestad para posar o presentarse con la menor en sus redes sociales personales cuando así lo desee. Pero sí ha resultado curioso para muchos esta nueva naturalidad de Paula a la hora de no querer esconder a su pequeña.

Lo cierto es que en el pasado sí ha mostrado el rostro de Daniella pero solo en una puntual ocasión anual, cada 17 de agosto. El cumpleaños de la pequeña era el único 'permiso' que se otorgaba la actriz para presumir de hija y enseñar al mundo la belleza que ha heredado de su madre y de su padre. De hecho, el cantante ha actuado siempre de la misma forma en los días en los que su hija cumplía un año más de vida. Ahora parece que esa premisa del cumpleaños no es necesaria para que Daniella se cuele de forma totalmente visible en las redes sociales de sus padres.

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