Raquel Morillas en una imagen reciente.

Raquel Morillas en una imagen reciente.

Famosos SE REINVENTA

Raquel Morillas encuentra trabajo como vendedora de cupones de la ONCE

La que fuera concursante de 'GH 3' ha anunciado a través de su cuenta de YouTube la ilusión y responsabilidad que siente ante esta nueva oportunidad laboral. 

30 septiembre, 2019 13:44

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Raquel Morillas (43 años) ha comenzado el curso con un nuevo e ilusionante proyecto: aspirar a trabajar en la ONCE. Así lo ha anunciando la propia concursante de Gran Hermano 3 en su cuenta de YouTube. Llevaba tiempo barruntando la idea de atreverse a formar parte de esta asociación y, por fin, se ha animado a intentarlo. "Si Dios quiere, comienzo a trabajar en la ONCE. Sobre todo, si soy capaz de pasar los cuatro días de formación y el examen", aseguraba Morillas, ilusionada, antes de comenzar. 

Este es un proyecto que llega a su vida en el mejor momento después de que el pasado mes de julio firmara el divorcio con su anterior pareja e iniciara una bonita historia de amor con Noah, la mujer que en la actualidad la hace feliz. Raquel, a la que le apasionan los retos, se ha enrolado en esta aventura, e incluso se muestra esperanzada a la hora de volver a estudiar y superarse: "Muy interesante a mi edad volver a estudiar. Tuve un accidente con unas secuelas que son de por vida y eso me hace tener una discapacidad y, gracias a Dios, puedo beneficiarme de ello".

Eso sí, como una más, asume que conseguirá su objetivo si se emplea duro: "Aguantaré si lo hago bien, si no me voy a la calle como todo el mundo". A lo largo del vídeo que ha colgado en su cuenta, Morillas relata cómo han sido las clases de formación: "Estoy deseando ponerme en la calle, a currar, pasar la formación ya. Estaba deseando que llegara este momento". Aspirar a ser trabajadora de la ONCE le ha enseñado muchas cosas y ella las cuenta orgullosa ante la cámara: "No sabía que si eras ciego la ONCE está obligada a darte trabajo y a cuidarte. No sabéis el dinero que se gasta para que puedan estar perros con la gente que no ve". 

Con los apuntes en la mano, en casa, Raquel explica lo fácil que le está resultando estudiar los diferentes juegos que oferta la asociación, quitándole hierro e imprimiéndole humor a su confesa ludopatía: "Estoy estudiando todos los cupones, me los estoy intentando aprender de memoria. Menos mal que como soy un poco adicta al juego, ya sé cómo funcionan. Estoy deseando que me veáis con el chaleco fluorescente. Me voy a poner unas gafas negras y espero que me quiten los cupones de las manos". Ni siquiera un inesperado catarro le ha impedido a Raquel acudir a las clases, como ha hecho ver ella en el vídeo. 

Superando reto tras reto, Raquel relata a sus seguidores lo contenta que está tras haber aprobado los exámenes y el horizonte que le espera a partir de ahora. La prueba está superada: "He aprobado y ahora tengo que esperar para poder ir a hacer la formación con gente ya veterana y solo son dos días esa formación. Por lo que enseguida me veréis con el chaleco de la ONCE y a repartir ilusión. Ojalá que dé muchos premios. Estoy muy feliz". 

Su delicada situación económica

Raquel Morillas en el plató de 'Sálvame'.

Raquel Morillas en el plató de 'Sálvame'. Mediaset

La situación económica de Raquel sigue siendo más que delicada a la espera de esta nueva oportunidad laboral. Hace cinco meses, mientras su pareja estaba ingresada en el Hospital Universitario San Juan de Alicante, la despidieron de su trabajo de manera fulminante. Desde entonces, y hasta que le confirmen su trabajo para la ONCE, ha colaborado puntualmente con los programas Sálvame y Sábado Deluxe, aunque no ha lograso verlo como una fuente fiable de ingresos. "A Deluxe fui solo las dos primeras semanas para los debates de Supervivientes, pero no me han vuelto a llamar. No les debo de gustar, y eso que Chelo me pidió que la defendiese yo", asegura a JALEOS hace unos meses. 

La tertuliana se siente especialmente orgullosa de su casa de Castelldefels, un espectacular chalé en la playa que adquirió tras su paso por Gran Hermano pero que en los últimos meses le ha dado más de un dolor de cabeza. Su último inquilino, siempre según Morillas, le dejó a deber más de 11.000 euros

"Yo pago 1.400 euros al mes entre hipoteca y comunidad. El inquilino, que no me paga desde agosto, me tiene que dar 1.900. Tú me dirás cómo salgo yo de esto. Con todo lo del tema del juego, pues yo vivo un poco al día. Tengo una vida normal, pero claro, si tú tienes de gastos 2.500 euros y cobras 1.200, pues tenemos un problema... Este hombre me debe 11.000 euros, por supuesto ya hay denuncia y todo", comentó a este diario hace unos meses. Ahora, con este trabajo a la vuelta de la esquina, parece que los problemas económicos, por fin, se están solucionando para Raquel Morillas. 

[Más información: Raquel Morillas: "He llegado a gastar 1.000 euros en una mañana en la ruleta. Ya estoy recuperada"]