¿Qué está pasando en el armario de nuestro pequeño del alma querido? ¿Por qué Kiko Rivera Pantoja (32 años) solo es elegante cuando hay una exclusiva de por medio? Con lo guapo que aparecía en la portada de la revista ¡Hola! con motivo de su boda con Irene Rosales (24).

Nosotros que pensábamos que convertirse en un hombre casado lo llenaría de glamour y elegancia. ¡Error! Su primera aparición pública como flamante esposo la realizó con sudadera blanca (bien), pantalones vaqueros rotos tobilleros (no tan bien) y una zapatilla roja y otra blanca (fatal de la muerte).

Que yo me pregunto, ¿a ver si el muchacho va a ser daltónico y nadie se lo ha dicho hasta ahora? Vamos, que le he consultado hasta a mi madre si ella veía lo mismo que yo. Efectivamente, no hay ninguna duda. Las deportivas son de diferente color. Puestos a investigar, me dije a mí misma, "oye, que a lo mejor las venden así". Ni corta ni perezosa, busco en mi adorado Google para dar con la respuesta. Ni hablar del peluquín. Las deportivas que Kiko luce son unas Nike Air Max 90 que cuestan entre 60 y 120 euros, dependiendo de la página web. Y si lleva diferentes colores es porque tiene dos modelos. Es decir, que se ha gastado un pastizal en lucir pisadas bicolores.

Pero espérate que ahí no acaba la cosa. No solo posee el modelo Nike Air Max 90 en blanco y rojo, sino también en negro. Atentos a la prueba del delito.

Esta imagen no deja lugar a dudas. Kiko Rivera Pantoja, alias mi pequeño del alma, tiene tres zapatillas del mismo modelo en diferentes colores. Muy fuerte.

Que la suerte lo acompañe (porque la moda no lo hace)

Aunque ya que nos metemos en faena, lo cierto es que su calzado no es lo único que falla en sus looks. Pantalones estampados, gorras, minicarteras de Louis Vuitton, camisetas talla XXL que le llegan casi a la rodilla… Vamos, un cuadro en toda regla.

Su estilo podría definirse como un cruce entre Gandía Shore, Mujeres y Hombres y Viceversa, Justin Bieber y Kanye West (39). Un cóctel más explosivo que los que se inventa tu tío en la cena de Navidad. En resumen, lo que en mi pueblo se denomina un hortera de bolera.

Pero la verdadera pregunta es, ¿por qué Kiko Rivera se empeña en cometer estas catástrofes estilísticas? Ya que si no la contesto no vais a poder dormir, he aquí mis teorías:

1 Es todo una gran apuesta

Hace un tiempo leí que Helena Bonham Carter (50) era tan excéntrica vistiendo porque su exmarido, Tim Burton (58), la retaba a ponerse conjuntos imposibles. ¿La recompensa si lo hacía? Dinero, obviamente. Quizás, es la manera que tienen Kiko e Irene de divertirse.

2 Es daltónico

Repito, podría ser. Confunde colores, estampados… Bueno, igual es un poco exagerado que no se haya dado cuenta hasta ahora, pero démosle un voto de confianza.

3 Quiere pasar desapercibido (pero consigue lo contrario)

Hay famosos que se disfrazan para que los periodistas no los reconozcan. Si es ese el motivo por el que Kiko viste como un rapero neoyorquino, desde aquí le decimos que ya no cuela. Te hemos pillado. Puedes devolver toda esa ropa ya. Gracias.

4 Es su ropa de ir al curro

No hay que olvidar que Kiko Rivera es DJ profesional. Y cierto es que en ese mundo se viste de manera un poco 'malota'. A lo mejor es que siempre lo pillamos de camino al trabajo. (Risas maléficas, que son peor que malvadas).

5 Le gusta vestir así

La más real y probable de toda las opciones. Está claro, amigos. Kiko Rivera nunca será imagen de Emidio Tucci ni de Dolce & Gabanna. Aunque lo mismo un día lo vemos lanzando su propia línea de ropa. Tiempo al tiempo.