El pasado viernes 22 de octubre, una fatídica noticia dejaba conmocionado al mundo entero. El actor Alec Baldwin (63 años) mató accidentalmente a la directora de fotografía de la película que se encontraba rodando, Rust, y el director del filme quedaba herido de gravedad -ahora ya se encuentra en casa y recuperándose-.

Con la investigación aún abierta, todo apunta a que sucedió al disparar Baldwin una pistola de atrezzo que, supuestamente, era de fogueo y que el actor desconocía que estaba cargada.

El trágico suceso llega en un momento en el que el intérprete había serenado su siempre agitada vida, y es que, durante años fue protagonista de grandes polémicas y de jugosos titulares de los medios de comunicación a lo largo y nacho del planeta Tierra.

Tras un escueto mensaje en el que el protagonista de Beetlejuice (1988) manifestaba su dolor por la muerte de Halyna Hutchis y su infinito apoyo a su viudo y su hijo, ahora huérfano de madre, Alec Baldwin ha optado por retirarse de la interpretación y refugiarse en su hogar de Los Hamptons: la zona de playa y costa más cercana, pero a la vez también la más exclusiva, para los neoyorquinos.

Sólo las grandes fortunas de dentro y fuera de América tienen casa en Los Hamptons y, como no podía ser de otra manera, Alec y su mujer, Hilaria Baldwin (37), gozan de una impresionante mansión en propiedad. Algunos de los rincones de este caserón suelen ser exhibidos en las redes sociales de la poderosa pareja, que vive junto a sus seis hijos pequeños.

Se trata de una antigua granja del siglo XVIII reformada y que el actor compró hace 26 años, en 1995. Fue en 2011, en el momento en que Hilaria empezó a salir con Alec, cuando se instalaron allí definitivamente.

La mansión data de 1753, está reformada por completo y goza de inmensos jardines y grandes espacios también interiores que el matrimonio dejó al descubierto durante el confinamiento por la pandemia de coronavirus. Ahí pudimos ver a sus niños jugando y a Hilaria impartiendo clases de yoga y pilates. 

En una entrevista para la versión de decoración de la revista Elle, en el año 2016, la instructora de yoga afirmó lo siguiente: "Antes de renovar la casa, había un montón de pequeñas habitaciones, no había mucha fluidez en ella" para configurar el "espacio realmente abierto que definitivamente quería".

Para poner a punto su espectacular mansión de Los Hamptons, el matrimonio contrató al arquitecto Fred Throo y al interiorista Daniel Romanoff. "Queremos que todos nuestros hijos sientan que son iguales, así que vamos a hacer que su habitación tenga exactamente los mismos metros cuadrados que la de ellos, para que no pueda decir 'soy el tercero, soy el último, no os importa", expresaba Hilaria. 

La casa de los Baldwin es un verdadero sueño inmobiliario. Un enorme jardín con césped natural precede la entrada de la finca, de estilo victoriano. La decoración interior está pensada al detalle, pero no menos que la zona de fuera, donde hay un gran porche con varias mesas para celebrar almuerzos o cenas en familia y con amigos.

Recientemente, además, hicieron una obra en la piscina, con una pequeña ampliación, una casa de invitados y lo mejor de todo: acceso privado desde su hogar hasta la playa. 

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