Gwyneth Paltrow (47 años) está en el punto de mira de las autoridades sanitarias por el contenido de su nueva serie en Netflix, The Goop Lab. La actriz ha dado el salto a la plataforma mundial de vídeo bajo demanda para dar consejos sobre belleza, salud y estilo de vida, como ya viene haciendo desde 2008 a través de su polémica marca, Goop, creada como un blog de noticias y reconvertida en un auténtico imperio que el New York Times valora en 250 millones de dólares.

Recientemente, el director del servicio nacional de salud británico, Simon Stevens, ha criticado "los dudosos productos de bienestar y los raros procedimientos" que publicita la superestrella. Stevens, que ha censurado a los "charlatanes" que se hacen eco de productos "dudosos", ha sido especialmente duro con la serie protagonizada por la actriz, que comienza cada uno de sus episodios con la advertencia de que "está diseñada para entretener e informar, no ofrecer consejo médico".

Uno de los productos de la singular tienda que ha suscitado comentarios en los últimos días ha sido la vela con olor a la vagina de la propia actriz, un artículo que Paltrow ha reconocido que ideó estando drogada y que ha arrasado en ventas pese a tener un precio de 75 dólares.

Las velas con olor a la vagina de Wyneth Paltrow han arrasado en ventas.

La zona íntima femenina es un asunto recurrente en los consejos de la nueva gurú del lifestyle. De hecho, otra de las polémicas recientes de la protagonista de Shakespeare in love se produjo por un artículo en su web en el que recomendaba a las mujeres lavar sus partes con una combinación de vapor de artemisa y luz infrarroja para proteger el útero y regula la menstruación, una técnica de dudosa efectividad que, además, podría ser perjudicial.

La obsesión de Gwyneth con la salud vaginal le costó otro disgusto en 2018, cuando su empresa fue condenada a pagar 125.000 euros de multa por publicidad engañosa en la venta de huevos de jade y cuarzo rosa que, según prometían en la web, regulan la menstruación y equilibran las hormonas.

Otro producto de Goop que ha generado controversia es el Implant O-Rama, un irrigador de colon que cuesta 135 dólares (unos 111 euros), cuya descripción afirma que es un aparato destinado a la aplicación de enemas de café para aliviar "la depresión, el dolor severo, la tensión nerviosa, la confusión y los síntomas de la alergia", pese a que las autoridades sanitarias advierten de que no se conoce ningún beneficio para la salud asociado a la irrigación de colon.

Irrigador de colon vendido en la web de Goop.

Entre las terapias que Gwyneth Paltrow prueba en los seis episodios The Goop Lab, se encuentran métodos tan extravagantes como un tratamiento facial con sangre o una "curación energética" cercana a la experiencia de un exorcismo.

En el caso de "Vampiro", el extraño tratamiento facial, se extrae sangre del paciente para centrifugarla, separando el plasma que luego se inyectará de nuevo en el rostro para rejuvenecer la piel. Una propiedad que no ha sido demostrada ni tiene base científica.

La curación basada en campos de energía, mostrada en el cuatro capítulo de la serie, es realizada por un coach que afirma que, tumbadas en el suelo y levantando las manos un metro, las personas son capaces de interactuar con su energía corporal para alterarla y 'curar' su cuerpo y su mente. En la escena, una de las pacientes grita "¡He tenido un exorcismo!" mientras se revuelve en el suelo.

Gwyneth prueba en la serie el tratamiento facial "Vampiro". Netflix

En definitiva, las excentricidades protagonizadas por Gwyneth Paltrow son innumerables y, casi siempre, son respondidas por decenas de profesionales que cuestionan su efectividad y la acusan de hacerse eco de terapias alternativas sin base científica, a la vez que cuestiona los métodos tradicionales cuya efectividad está sustentada y probada.

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