Imma Merino, autora del nuevo retrato de Letizia: El vestido es creación mía. Los suyos no me encajaban

Imma Merino, autora del nuevo retrato de Letizia: "El vestido es creación mía. Los suyos no me encajaban"

Casas Reales PRIMICIA

Imma Merino, autora del nuevo retrato de Letizia: "El vestido es creación mía. Los suyos no me encajaban"

EL ESPAÑOL ha contactado con la artista para conocer los matices de su nueva obra, que tiene como protagonista a la reina de España. 

21 abril, 2022 01:59

Noticias relacionadas

A lo largo y ancho de nuestras tierras patrias, la reina Letizia (49 años) recibe sendos homenajes de los que a menudo no es consciente. En este caso, más que un tributo estamos ante un regalo. No en sentido literal -todos saben que los Reyes no pueden aceptar presentes-, pero sí que es un bonito detalle, de hecho, un gran halago, que alguien tan sensible como la artista Imma Merino haya decido pintarte óleo sobre lienzo.

"Ya lo doy por terminado", escribía la autora del nuevo retrato de Letizia en sus redes sociales este pasado martes, 19 de abril de 2022. EL ESPAÑOL se ha puesto en contactado con ella para conocer en profundidad los matices de su nueva obra, que tiene como protagonista a la reina de España.  

¿De dónde surge la idea de pintar un retrato de la reina Letizia?

Me lo pidió a mediados de diciembre la señora Mayte Spínola, una gran mecenas. Me lo pidió para el Museo de Arte Contemporáneo que lleva su nombre. El museo está en Marmolejo, en Jaén, y este retrato de la reina Letizia no va a estar en sala, sino que va a presidir la entrada. Es todo un honor.

¿Cuánto tiempo le lleva hacer un retrato de tal envergadura?

Depende. Son muchas horas. Te puedo decir que llevo trabajando en él más o menos un mes y medio. Lo empecé a pintar a principios de febrero y lo he terminado entre el 6 y el 8 de abril. 

¿Qué detalles se tienen en cuenta a la hora de pintar a alguien tan relevante como la reina de España?

Cada persona tiene su personalidad y hay que entender a la persona, captar su forma de ser. Siempre es distinto. Hay que entrar en su alma. Más que en el alma, que el alma no la veo, hay que ver sus rasgos, su personalidad, su carácter, todo aquello que nos hace únicos. Más que el físico puro y duro. También es importante dejar mi sello, poner un poquito de mí misma y, naturalmente, pensar quién es el retratado y dónde va a estar el retrato. No es igual pintar un retrato de la reina Letizia que ella vaya a tener en la intimidad de su casa que uno que va a una institución, como en este caso es el museo. Si me hubiera llamado ella para pedirme uno para su salón, la habría vestido más informal, pero claro, cuando va a un lugar oficial se busca algo que muestre quién es y su trabajo, en este caso, representarnos a todos. 

¿En qué detalles ha tenido que esmerarse más para poder llegar a conseguir una imagen lo más realista posible de la Reina?

En los ojos. La mirada, para mí, es muy importante: la expresión, bueno, ya sabes lo que dicen, que la mirada es el espejo del alma. Que quien mire el cuadro se dé cuenta de que la reina Letizia lo está mirando. Que no es una mirada vacía, que hay alguien detrás de esos ojos y dentro de ella. Eso lo primero. Lo segundo, las manos. Es muy importante porque se ven entera. Y también una vestimenta adecuada para una persona de su nivel. Yo no encontraba un vestido que me encajase y al final terminé creándolo yo.

¿Por qué eligió ese vestido justo con el color rojo, que dicen que es su favorito, y con esa silueta tan del estilo de Letizia?

Es una creación mía. Sé que le gusta el rojo y Mayte Spínola también me sugirió que utilizase el rojo para el vestido, y a mí me parece bien. Miré vestidos suyos, que los tiene preciosos, pero ninguno me encajaba justo para el lugar en el que va a ir. Estuve días y días dándole vueltas, y nada. Al final pensé: "Me lo voy a inventar". Y, mira, si a la reina Letizia le gusta el vestido que le he hecho siguiendo el criterio de la pintura, que me llame (risas).

¿Es la reina Letizia consciente de que existe este retrato o ha intentado ponerse en contacto con ella para informarle de que estaba trabajando en él?

No sé si Mayte Spínola se lo habrá hecho llegar. Ella los conoce, la conoce. Es posible que sí. Hace años le pinté otro y sé que se lo hizo llegar. Hoy ha salido de aquí, de Barcelona, y en los próximos días llegará al museo, que está en Marmolejo, en Jaén. A finales del mes que viene iré a verlo.

¿Le gustaría seguir explorando el universo royal y retratar, por ejemplo, a la princesa Leonor?

¿Por qué no? No sólo de la Casa Real, que también, pero he pintado a otros personajes como don Duarte de Braganza, al archiduque de Austria, también pinté a su hija... He pintado a varias personas de la nobleza y la aristocracia. 

Sobre la artista

Imma Merino nació en Barcelona y desde que era pequeña siempre amó la pintura. En sus ratos de trabajo, para ella su pasión, es donde encuentra la paz. Así lo cuenta en su página web: "Siendo muy niña, desde que tengo recuerdos, me he sentido agredida por el mundo, por la sociedad, una sociedad que me parecía y me sigue pareciendo hostil y cruel. Hostilidad que he encontrado en compañeros, incluso entre amigos y familiares".

Y prosigue: "Mi refugio, mi arte. No recuerdo el día que empecé a dibujar y colorear, sólo recuerdo hacerlo. Mi madre solía decir: 'Sólo hay que darle un lápiz y ya no se la oye'. La recuerdo cosiendo y yo a sus pies, entre hilos y retales, con una hoja de papel y un lápiz, a veces muchos lápices de colores... Lo que sí recuerdo es que cuando dibujaba, cuando pintaba, el mundo se silenciaba". "Sólo éramos mi arte y yo. Cuando pintaba, el mundo callaba", concluye la autora del nuevo retrato de la reina Letizia.

[Más información: El misterio de la tiara que la reina Letizia nunca se pone: la curiosa explicación de los expertos]