Bueno, bueno, bueno. ¿Pero qué demonios está ocurriendo aquí? No hay quien se aclare. Vayamos por partes, como diría Jack ‘El Destripador’: ‘Cuéntame’, después de amontonar más problemas que una antología de sudokus, se traspasa al extrarradio antenatresero. Mercedes Milá, por su parte, se coge un berrinche fundado y endiña la nueva edición de ‘GH’ a un ‘Juasjuasjuás’ Vázquez que redefine, con su sonriente actitud, el término esquirol. Los de ‘Tú sí que vales’ se mudan, por lo bajinis, a La Sexta. Y Cárdenas, el bueno de Cárdenas, descubridor de varias generaciones completas de friquis telecinqueros, instala nuevo chiringuito en TVE.

¿Alguien lo entiende? ¿Qué está pasando dentro de nuestros televisores? ¿Era esto el apocalipsis trompetero? Otro mes de junio como este y acabamos todos resintonizando canales en un apagón digital no previsto. ¡Por favor, Sumo Hacedor del Zapeo Televisual, deje usted de joder con el mando a distancia, porque nos está volviendo rematadamente locos!

Para más inri, Mariló Montero, nuestra María Dolores Leonor Montero Abárzuza, la presentadora y directora de ‘La mañana’ de la 1’, en TVE, dice ahora que se las pira, en riguroso directo y por sorpresa, porque necesita cazar sueños que aún tiene por ahí.

¡Otra que amenaza con convertirse en la gran amenaza blanca de los plantígrados borrachuzos, como el pobre Mitrofán! Aunque le deseamos lo mejor, desde luego, a lo largo y ancho de esta nueva etapa de cazasueños sin canana que comienza para nuestra queridísima Mariló. La vamos a echar mucho de menos, sin ninguna duda.

Aunque me temo que pronto, muchísimo antes de lo que algunos piensan, volveremos a verla, y a padecerla, en una cadena rival. El dinero. Es lo que tiene. Se trata de un sueño de lo más cinegético que está siempre por abatir. Como algunos elefantes de Botsuana.

Se las pira Mariló, casi a la francesa, y deja ‘Las mañanas de la 1’ casi a oscuras. En plena noche de recorte laboral indefinida. Con dos demandas conjuntas de trabajadores que reclaman sus pertinentes contratos ante un juez. Bajo el tenue reguero de bilis que ha quedado en el plató tras las sonadas broncas entre ‘Marierror’ y su nueva jefa desde hace meses. Eso sí, le ha dado tiempo a la presentadora navarra, en su fulminante ‘bye-bye’, a lanzar un último dardito a los responsables del ente público: “Me siento muy orgullosa de estos siete años, que podrían haberse alargado por deseo de TVE, que siempre me ha apoyado”. Tanto te quiero, sí, que a la primera de cambio hago las maletas y desaparezco. Y no es una cuestión de pasta, no. Es algo que va un poco más allá. Cuestión de sueños incumplidos.

De esta genial Mariló Montero tengo ya dicho que parece un ‘trending topic’ andante. Encantada de conocerse como la más rarita y polémica de su promoción. La parte sobrante del dúo que conforman el personaje y la profesional. El verso suelto de una misma ‘montería’ que se ha empeñado ahora en arponear ballenas en forma de sueño. La misma Mariló a quien la dirección de TVE, después de abroncarla, considera una excelente profesional, por mucho que ella se empeñe en soltar en el espacio ‘Saber vivir’ (que se incluye en su programa) perlas del tipo: “el aroma de limón puede prevenir el cáncer”. ¡Cómo está el patio catódico! Necesitan todos estos unas largas vacaciones.