Menuda mañana la de ayer para Jesús Mª Fernández, portavoz de Sanidad del PSOE. Primero le tocó reunirse a las 10:00 con la Asociación Para Proteger al Enfermo de Terapias Pseudocientíficas (APETP) y, un poco después, a las 12:00, con la Asociación Española de Médicos Naturistas, dos grupos cuyos intereses son antagónicos.

Todo esto no es casual, sino la señal de que una batalla se está empezando a librar en los pasillos del Congreso.

La semana pasada, Ciudadanos presentó una proposición no de Ley relativa a "la mejora de la protección de los pacientes afectados por la pseudociencia". En este texto, el partido naranja propone, básicamente, que los médicos estén obligados a denunciar a la fiscalía o al juzgado de guardia a otros profesionales, titulados o no, que ofrezcan a sus pacientes este tipo de terapias, "alejadas de la evidencia científica y que pudieran causar un perjuicio real en la salud".

La APETP, impulsora de este texto, ya se reunió con Ciudadanos hace unas semanas y ayer fue el turno del PSOE. "El portavoz socialista está recibiendo a distintas asociaciones a petición de las mismas", explica a EL ESPAÑOL desde el Grupo Socialista en el Congreso, "que tiene que ver tanto con personas afectadas por terapias pseudocientíficas o por intrusismo profesional, como asociaciones de médicos naturistas, para escuchar sus reivindicaciones, sus necesidades o sus propuestas y conocer la situación respecto a las terapias no convencionales".

Desde la asociación, su vicepresidente Emilio Molina explica que, hasta el momento, se han reunido "con varias fuerzas políticas: Ciudadanos, Compromís, PP o PSOE, tenemos pendiente hablar con Podemos pero esperamos hacerlo pronto".

¿A qué llamamos pseudociencia?

¿Y tú me lo preguntas? Son aquellas prácticas que, por lo general, no han seguido el método científico para ser validadas o reproducidas. Por tanto, sus efectos beneficiosos tienen que ser puestos en cuarentena porque no existe forma de explicar cómo logran curar o mejorar el pronóstico de una enfermedad.

La APETP enumera en su página 75 terapias pseudocientíficas, aunque ya indica que no todas están al mismo nivel. Por ejemplo, la acupuntura ha sido puesta a prueba en numerosos estudios científicos.

En 2012, Edzard Ernst de la Universidad de Exeter evaluó todos los estudios que habían aparecido al respecto. Su conclusión es que, de 32 trabajos que evaluaban la eficacia de la acupuntura para diferentes enfermedades o lesiones, 25 de ellos no demostraban nada positivo. En cambio, las agujas sí parecían resultar útiles para reducir un puñado de afecciones muy concretas, como las náuseas y vómitos provocados por la quimioterapia o el dolor de cabeza idiopático.

Y pese a las limitaciones, esta es de las terapias que cuentan con mayor respaldo. En el extremo contrario están la aromaterapia, la cirugía psíquica, las flores de Bach, la orinoterapia, el péndulo hebreo, la psicomagia, el Shiatsu o el suero de anguila. 

¿Por qué están los partidos debatiendo este asunto?

En sus reuniones de hoy, desde el PSOE apuntan que no tienen en mente ninguna modificación legislativa a este respecto. "Se trata de un intercambio de información, de momento no hay ninguna iniciativa al respecto", explican estas fuentes.

Paradójicamente, tanto los anti-pseudociencia como los médicos naturistas quieren lo mismo: más regulación. Aunque claro, en sentidos totalmente dispares.

Rafael Torres, presidente de la Asociación Española de Médicos Naturistas, fue uno de los encargados de reunirse con el portavoz del PSOE en el Congreso. "Queremos una formación reglada, tanto en la universidad como en formación continua, que en estos

momentos está en una situación inestable". Este médico de atención primaria y experto en terapias no convencionales cita países como Alemania o Estados Unidos, donde los centros educativos ofrecen incluso doctorados en homeopatía.

Los críticos de estas terapias creen que este movimiento puede ser peligroso, ya que legitimaría de alguna forma la práctica de formas de medicina complementaria. En el otro extremo está la propuesta de la APETP, que consiste en delimitar lo que puede y no puede ofrecerse a un paciente, y el único baremo estaría en su validación científica.

"Nuestras peticiones a los políticos son muy simples, queremos concienciarles de las situación actual que hay con las pseudociencias", explica Molina a EL ESPAÑOL. "Tenemos informes de gente afectada, no ya por los típicos charlatanes que se aprovechan, sino también de médicos, enfermeros o fisioterapeutas que están prescribiendo tratamientos sin ningún tipo de rigor, saltándose la deontología propia de su profesión y ofreciendo a sus pacientes terapias sin validez e incluso contraproducentes para su salud".

¿Hay que denunciar a un médico por homeópata?

La esencia de la proposición presentada por Ciudadanos está, precisamente, en esa labor de denuncia entre compañeros de profesión.

Para Molina, la proposición "se queda bastante corta, de hecho nos hemos reunido con más partidos para que incluyan más cosas, el texto aún tiene muchísimo margen de mejora".

¿Y qué les parece a los médicos naturistas que otros compañeros puedan demandarles? "Vamos a ver en qué términos quieren implementarlo, les hemos pedido que nos lo manden porque sólo he podido verlo por la prensa", dice Torres. "El médico tiene muchas funciones y tiene que tener una visión amplia, no reduccionista, para incorporar todo lo que venga del campo científico, también hemos de exigir a las facultades que apliquen el Plan Bolonia y ofrezcan una educación en medicina complementaria, algo que no están haciendo".

En breve, esta asociación buscará reunirse con Ciudadanos, el primer partido en proponer que los doctores partidarios de estas terapias sean denunciados. La reunión se prevé tensa, será un buen momento para poner a prueba el poder ansiolítico del extracto de Pasiflora.

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