Un vecino de la provincia de Soria fue detenido por la Guardia Civil y está siendo investigado por conducir de forma temeraria y sin puntos en el carnet. Se le imputan un delito de atentado y desobediencia grave a agentes de la autoridad en el ejercicio de sus funciones y dos delitos contra la seguridad vial, por conducir un vehículo a motor con temeridad, y por hacerlo sin puntos en el carnet.

Según detalla la Guardia Civil en un comunicado remitido a Ical, los hechos se iniciaron cuando el conductor del vehículo hizo caso omiso a las señales y órdenes de parada en un control preventivo de alcohol y drogas establecido en las carreteras N-111 y N-234. Esto obligó a los agentes a realizar maniobras evasivas para evitar ser atropellados. 

Iniciado el seguimiento, los agentes de la Benemérita comprobaron que el vehículo circulaba a gran velocidad, tanto en las vías interurbanas como por las travesías de dos localidades, realizando varios adelantamientos antirreglamentarios y poniendo en riesgo la integridad del resto de usuarios de la vía. Posteriormente, y gracias a la colaboración ciudadana de los vecinos de la localidad de Derroñadas, pudieron detener al conductor. Se instruyeron las correspondientes diligencias que fueron remitidas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Soria.

Según informan, esta conducta al volante podría conllevar administrativamente hasta 500 euros de sanción, retirada de seis puntos del permiso de conducción y penalmente podría ser castigada con las penas de prisión de seis meses a dos años y privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta seis años, ya que la conducción temeraria “es el exponente de la conducción más inapropiada y crea un concreto peligro para la vida propia y del resto de los usuarios de la vía, aumentando exponencialmente la posibilidad de sufrir un siniestro vial”.