Francisco Guarido y Cayo Lara, en la sede de Izquierda Unida Zamora

Francisco Guarido y Cayo Lara, en la sede de Izquierda Unida Zamora JL. Leal

Zamora

Guarido sobre los pactos de Izquierda Unida con Podemos y Sumar: "Nos han llevado al puñetero desastre"

El alcalde de Zamora no duda en calificar como "fracasos" todos los acuerdos de coalición a los que su formación ha llegado con Unidas Podemos o Sumar

26 diciembre, 2023 07:00

Nunca estuvieron de acuerdo y parece que el tiempo les ha dado la razón. Izquierda Unida Zamora no solo se convirtió en la 'aldea gala' por lograr la única Alcaldía de capital de provincia gobernada por su formación, sino que son una rara avis dentro de su propio partido. Desde 2015 rechazaron de plano cualquier confluencia, pacto o similar con la incipiente Podemos y han defendido durante casi diez años la independencia de las siglas de IU. 

Con apenas un centenar de afiliados, que financiaron de sus bolsillos las campañas electorales, Francisco Guarido consiguió en 2015 arrebatar la hegemonía histórica al Partido Popular en Zamora, en 2019 alcanzó una mayoría absoluta de 14 concejales y se mantuvo con diez gobernando con el PSOE en 2023. Él y su equipo de Gobierno fueron la demostración palpable e inequívoca de que Izquierda Unida tenía peso suficiente para sobrevivir de forma independiente, sin tener que dejarse absorber por la nueva ola de la izquierda, que capitaneó por entonces Pablo Iglesias.

Por eso, a Guarido no le duelen prendas en reprochar a la Ejecutiva Federal de Izquierda Unida que cediera su independencia política a los morados en busca de un mejor resultado electoral al abrigo del 15-M. Para los zamoranos, Alberto Garzón cometió un error imperdonable, que está abocando a la desaparición del histórico partido. El alcalde de Zamora no duda en calificar como "fracasos" todos los acuerdos de coalición a los que su formación ha llegado con Unidas Podemos y sus confluencias. 

Guarido teme que tras "experimentos con la gaseosa" a Izquierda Unida le quede "cada vez menos tiempo y las oportunidades para tener una mayor autonomía electoral para presentarse a las elecciones". Así lo expresaba hace unos días durante una entrevista con EL ESPAÑOL Noticias de Castilla y León, donde señalaba también que la sociedad "cada vez conoce menos nuestras siglas y perdemos presencia". El alcalde de Zamora recuerda que "la memora es frágil y cuando los partidos dejan de presentarse se olvidan".

"Al puñetero desastre"

Aparte de apenado, Guarido está especialmente irritado al conocer las declaraciones de "gente de mi partido que dicen que han logrado salvar Izquierda Unida a partir del año 2014-2015, que han logrado mantenerlo a flote". Él, lógicamente lo ve de forma completamente contraria, y le molesta especialmente "leer declaraciones de Sira Rego o Alberto Garzón, incluso de los dirigentes de Castilla y León, diciendo que han logrado salvar a Izquierda Unida cuando nos han llevado al puñetero desastre". 

El zamorano recuerda esa Izquierda Unida de 2011 con Cayo Lara al frente, que obtenía once diputados en el Congreso. Sería su último mejor resultado, ya que cuatro años más tarde y ya con Alberto Garzón como líder, se quedaba en apenas dos diputados a través de las candidaturas de Unidad Popular, que el exministro calificó como "el único camino" para ganar las elecciones generales de diciembre de 2015. 

Sería en 2019 cuanto Alberto Garzón y Pablo Iglesias cerrarían su primer acuerdo de listas conjuntas, donde Izquierda Unida obtendría 6 diputados dentro de la coalición y Garzón se convertiría en ministro de Consumo. Y este mismo verano de 2023, Izquierda Unida decide dar otro giro de guion y no reeditar la coalición Unidas Podemos, sino optar por ser uno de los miembros fundadores de la coalición electoral Sumar, liderada por Yolanda Díaz. Así obtendría cinco diputados de IU y el Ministerio de Juventud e Infancia, encabezado por Sira Rego.

Pero, tras la reciente ruptura entre Unidas Podemos y Sumar, con una evidente crisis a la izquierda del PSOE, el alcalde de Zamora plantea cómo hubiera sido la presencia y el resultado electoral que podía haber tenido Izquierda Unida en julio de 2023, si se hubiera presentado de forma independiente. "Creo que sería el elemento catalizador de todo lo que hay a la izquierda del PSOE. Pero así nos estamos diluyendo en inventos", apunta.

Guarido defiende de manera férrea que, de haber continuado como partido independiente, Izquierda Unida habría mantenido "el respeto institucional y una militancia que tenía un poder en alza" suficiente para tener peso en el juego político actual.