El Grupo Cinológico de la Guardia Civil de Castilla y León tiene su centro de operaciones en la provincia de Zamora. Una unidad canina formada por cuatro ejemplares, de los cuales uno está especializado en la búsqueda de personas desaparecidas en grandes áreas, otro se destina también a la detección de drogas en la Comandancia de Zamora, otro a la detección de venenos y cebos en la naturaleza y el cuarto está preparado para la detección de papel moneda (billetes). 

Pero hoy, centramos nuestra atención en Aquiles, Uri y Floki. Tres perros de la unidad que se han convertido en el top de España en la búsqueda de personas desaparecidas. Todo porque la Fundación Caja Rural de Zamora ha donado dos dispositivos GPS para monitorizar a estos animales cuando se encuentran haciendo barridos en búsqueda de un desaparecido. Dipositivos que van colocados en su propio collar y que son a su vez controlados por los agentes de la Guardia Civil que también forman parte del Grupo Cinológico ubicado en Zamora.

La gran ventaja que supone la utilización de estos vanguardistas dispositivos está en poder afinar al máximo las zonas de búsqueda de personas y reducir radicalmente los tiempos que se dedican a cada territorio, donde pueda encontrarse el desaparecido. Según ha detallado el sargento primero Fradejas, responsable del equipo del Grupo Cinológico, estos dispositivos de alta generación permiten que los agentes puedan "perder de vista" a los canes para que ellos puedan continuar la búsqueda libremente, aplicando lo aprendido durante su adiestramiento.

Un mapa dibujado por cuatro patas

Grupo Cinológico de Castilla y León, con sede en Zamora, con los nuevos GPS de búsqueda

Mientras buscan, los animales van mapeando de forma digital grandes unidades de terreno en un tiempo mucho más ajustado, que de la forma manual que hasta ahora se realizaba. Con el GPS colocado en su collar van dibujando una cartografía detallada del espacio por el que han rastreado, de forma que indican "que la persona desaparecida no está por donde ellos han pasado".

Una tarea que antes se hacía "a ojo" y cubriendo mucho menos terreno por hora. Pero este dispositivo tiene una precisión de cinco metros y el animal puede alejarse hasta 14 kilómetros, que hace que se "eviten tener zonas con sombra" y permite que los dispositivos de búsqueda puedan descartar rápidamente una zona y desplazarse a otra. 

La aportación de la Fundación Caja Rural de Zamora es para la Comandancia de la Guardia Civil de Zamora "muy importante". Estos dos dispositivos colocan a este Grupo Cinológico, que se ubica en Zamora, pero que actúa en toda Castilla y León, a la vanguardia de nuestro país. El sargento primero Fradejas indicaba que "existen intentos" en la Unidad Central de El Pardo (Madrid) en implantar este tipo de dispositivos, pero que la rapidez con la que evolucionan y la tardanza en ocasiones de la administración hacen que "se vuelvan obsoletas muy rápido".  

Pero con la colaboración de la Fundación Caja Rural, Zamora se pone a la cabeza en la excelencia y la eficiencia en la búsqueda de personas de toda España. "Probablemente tenemos el mejor material del país", indicaba el responsable de la unidad. 

Zamora y las desapariciones

Y no es casualidad que sea esta provincia la que ha tomado la delantera en la localización de desaparecidos. Zamora sufría el año pasado 30 desapariciones, 20 de ellas involuntarias, lo cual supone que cada tres semanas una persona desaparecía. El teniente coronel de la Comandancia de Zamora, Héctor David Pulido, apuntaba que es una tendencia que, desgraciadamente, ha ido a peor en el último año.

En 2023, desaparece una persona cada dos semanas, según los datos de la Guardia Civil de Zamora. Las últimas desapariciones fueron las de una mujer en Abelón, que fue encontrada a las tres horas; y otra mujer en Vigo de Sanabria, que estuvo desaparecida unas doce horas. 

Por ello, la Comandancia de la Guardia Civil de Zamora organizaba, por segundo año consecutivo, unas jornadas informativas destinadas a arrojar luz sobre esta problemática en aumento en la provincia y que se han consolidado como un referente a nivel de protocolo en toda Castilla y León. Unas charlas a las que no solo invitaron a agentes y miembros de la Benemérita, sino también a las asociaciones que se suman a las búsquedas, Protección Civil, representantes públicos y a la sociedad en general, ya que entendían que es un problema que responde a toda la sociedad.

Héctor David Pulido indicaba que parecía que estas jornadas habían generado conciencia y el ejemplo claro era la donación que ahora hacía la Fundación Caja Rural de Zamora, y agradecía el "beneficio" que esto iba a suponer no solo para Zamora, sino para toda la Comunidad.

Por su parte el secretario de la fundación, Feliciano Ferrero, apuntaba que la entidad estaba "encantada" de poner ayudar, como ya ocurriera el año pasado con su donación de un dron de última generación para el mismo fin. Feliciano Ferrero destacaba, precisamente, que Zamora sufre especialmente estas desapariciones involuntarias a causa del envejecimiento de su población, donde personas de avanzada edad tienen más probabilidades de perderse y desorientarse.