Carlos Sanz en el Centro del Lobo Ibérico de Castilla y León

Carlos Sanz en el Centro del Lobo Ibérico de Castilla y León

Zamora

Aquí se esconde el único santuario del lobo ibérico en España

Un espacio increíble en el que poder disfrutar de los lobos de cerca y en su hábitat natural

27 abril, 2023 07:00

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El lobo es un animal que emana curiosidad, fascinación y lírica a partes iguales. Protagonista como malo del cuento en la célebre Caperucita Roja, y como descripción negativa de dichos populares, pero también símbolo de fuerza, comunidad y astucia, esta especie no deja indiferente a nadie y todo el mundo desea saber más de él.

España tiene unos 2.500 ejemplares de lobo ibérico viviendo en el territorio. De estos, más de 400 se ubican en la provincia de Zamora, siendo la mayor zona de asentamiento de este animal en nuestro país. Todo un vergel de esta majestuosa especie que genera amor y odio a partes iguales. De un lado quienes creen que se trata de un animal que debe ser protegido y, de la otra, quienes lo sufren en sus ganados y que se sienten indefensos ante la prohibición de su caza en todo el territorio español desde el 21 de septiembre de 2021.

Sea como fuere, el caso es que el lobo es una especie que genera gran interés y que supone un auténtico reclamo turístico para el territorio zamorano. En los 90, el naturalista más famoso de España Félix Rodríguez de la Fuente hizo de él que pasara de ser visto como poco menos que un carroñero a uno de los animales más fascinantes de nuestra naturaleza patria.

Fruto de su concienzudo estudio y del amor que generó por este único animal entre quienes lo acompañaron en vida por la Sierra de la Culebra nació el Centro del Lobo Ibérico de Castilla y León, que lleva su nombre y que está ubicado en la localidad de Robledo de Sanabria. Un lugar que vio la luz en octubre de 2015 y que dirige uno de los amigos y compañeros del afamado divulgador, Carlos Sanz.

Carlos Sanz con los lobeznos en el Centro de Lobo Ibérico

Carlos Sanz con los lobeznos en el Centro de Lobo Ibérico

Todo un santuario al lobo ibérico de 21 hectáreas único en España. La mayor parte de este terreno lo conforma un pinar de repoblación, con algunas pequeñas zonas de roble, abedules y alisos. Pero la parte más importante de este centro son los dos grandes recintos vallados, de unas tres hectáreas cada uno, en los que viven varios ejemplares de lobo ibérico en régimen de semilibertad. Un espacio protegido por el propio centro con vegetación natural, varias zonas de refugio, charcas artificiales y con un sistema de videovigilancia para controlar y monitorizar los comportamientos y las condiciones de vida de los ejemplares.

Una visita apasionante

Otra de las maravillas de este santuario es que es visitable todo el año. El Centro del Lobo Ibérico de Castilla y León ofrece una oportunidad única para conocer de cerca al lobo ibérico en detalle.

Esta comienza en la entrada del centro con una serie de paneles informativos que explican datos sobre la biología, el hábitat y las costumbres de este misterioso animal. Una vez dentro se accede a la edificación de 1.800 metros cuadrados, integrados en el propio entorno, construido de modo ecológico y eficiente, que evoca elementos patrimoniales asociados al lobo y que simulan los conocidos como 'cortello' de lobos.

Una obra maestra obra del arquitecto Leocadio Peláez, que tuvo en cuenta los factores bioclimáticos usando materiales propios de la zona, y cuyo edificio está enterrado para incrementar su aislamiento. También cuenta con una cubierta ajardinada e iluminación natural a través de lucernarios.

Una de las salas expositivas del Centro del Lobo Ibérico de Castilla y León

Una de las salas expositivas del Centro del Lobo Ibérico de Castilla y León

Además, el espacio cuenta con varias salas en las que se exponen desde pieles o cráneos, a varios objetos utilizados en la investigación de la especie, que se pueden ir descubriendo a través de la visita guiada con el equipo que cuida personalmente de los lobos del Centro: Tomás, Silvia, y Esther, liderados por Carlos Sanz.

Todo un viaje a través del descubrimiento de la especie por el territorio donde habitan, que, además es interactiva, ya que se utilizan materiales locales, manipulables, y accesibles para los visitantes durante la visita. El equipo del centro intenta dar una visión polifacética del lobo y su relación con los humanos en la Sierra de la Culebra, incluida su polémica sobre el control poblacional, incluyendo partes de la propia biología del animal, arqueología, folclore, historia, ecología y conservación natural.

Pero la aventura lobuna no acaba aquí. Y es que este refugio da la oportunidad no solo de aprender más sobre esta especie, sino de verlos en vivo y en directo, en su propio hábitat y muy cerca de ellos. El centro cuenta con unas pasarelas peatonales de madera, adaptadas para el tránsito de personas con discapacidad, que van conduciendo hasta los tres observatorios elevados, que permiten la vista de los animales sin alterar sus pautas de comportamiento natural.

Uno de los momentos más emocionantes de la visita es cuando el propio equipo del centro atrae a estos ejemplares hacia el público con pedazos de carne, para que los visitantes puedan verlos más de cerca y comprobar cómo interactúan entre ellos, dentro de su cadena social. Es muy impresionante ver, por ejemplo, al gran experto Carlos Sanz interactuar con los animales mientras explica la historia de los lobos que habitan este santuario.

Carlos Sanz con los lobos del Centro del Lobo Ibérico.

Carlos Sanz con los lobos del Centro del Lobo Ibérico. Juanjo González

Uno de los observatorios del Centro del Lobo Ibérico de Castilla y León

Uno de los observatorios del Centro del Lobo Ibérico de Castilla y León

Unos lobos con sus propias historias

Como todo en este centro, hasta sus habitantes son singulares. Catorce lobos habitan este refugio zamorano y los miembros más veteranos tienen historias de lo más variopintas, aunque sin duda, la más peculiar es la de la loba Jara

Este ejemplar cumplirá diez años este 2023, y llegó a las instalaciones del Centro del Lobo Ibérico tras pasar casi tres meses en una vivienda particular. Resulta que una familia se la encontró en el campo siendo un cachorro de apenas unos días y la recogió pensando que era un perro. Pero a los tres meses esta familia se percató de que no se trataba de un animal de compañía, sino de un lobo ibérico, y la depositó de forma anónima en un cajón del Centro de Recepción de Animales Salvajes de Villaralbo (Zamora)

Tras este viaje por la provincia, Jara terminó en el Centro donde el pasado 15 mayo de 2020 daba a luz a tres cachorros (Niebla, Félix y Luna), tras quedar preñada del alfa de la manada: Sauron, un impresionante ejemplar de doce años que también llegó de fuera de la Sierra de la Culebra. En este caso, Sauron nació en el Parque de la Naturaleza de 'Sendaviva' en Arguedas (Navarra), y más tarde fue trasladado a Robledo.

Se trata del tercer parto en cuatro años, que se sumaron así a la manada que también conforman la hembra Oscura y el macho Atila, quienes fueron padres de otros cuatro cachorros en mayo de 2019: Llagu, Mancha, Sanabria y Tera.

Aunque el primer nacimiento fue el del lobo Robledo, bautizado como la localidad donde se ubica el centro, y que nació el 3 de junio del 2016 de la loba Dakota. Se trata del primer ejemplar nacido en este espacio de semilibertad que está a punto de cumplir ya los siete años

En el centro se explica que ninguno de los animales podría sobrevivir ahora en libertad, tras tantos años viviendo bajo el cuidado no invasivo del centro porque no estarían preparados para hacer frente las condiciones puramente externas. Su esperanza de vida en estado salvaje es de siete años, pero en el centro algunos de ellos ya superan la década, gracias al programa sanitario diseñado para ellos que merma la mortalidad natural y que tiene como objetivo que alcancen los 14-15 años.

Cabe recordar que todas las visitas guiadas a este centro tienen que reservarse con antelación en la web oficial y en los horarios que también pueden consultarse online. Las visitas tienen un coste de 8 euros, con descuentos especiales para jubilados, mayores de 65 años, personas con discapacidad, familias numerosas, grupos de más de 15 personas, colegios y los niños menores de siete años entran gratis.