JJ Vaquero y Goyo Jiménez en 'El Hormiguero'

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Valladolid

JJ Vaquero recuerda las grandes anécdotas vividas en su bar de Valladolid: "Pasaron cosas muy locas"

El humorista se ha sincerado en 'El Hormiguero', donde ha acudido con motivo del inminente estreno de su película 'Sujétame el cubata' y dispuesto a compartir muchos detalles de su vida más personal.

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JJ Vaquero cuenta los días para ver hecho realidad su proyecto más especial y autobiográfico: la película Sujétame el cubata.

Una producción cinematográfica que le ha llevado hasta El Hormiguero, programa que visitó en la noche de este lunes y al que acudió junto a su compañero y amigo, Goyo Jiménez, como uno de los actores del filme.

Allí, más allá de desvelar algunos de los detalles de la película que promete hacer de llorar de la risa a todos y cada uno de los espectadores que se animen a verla, Vaquero también habló sin tapujos sobre algunas cuestiones que, de una manera u otra, han marcado su vida.

Y es que, teniendo en cuenta que Sujétame el cubata está inspirada en El Rincón del Erizo, el bar que el cómico regentó durante 16 años en el barrio vallisoletano de Parquesol, este fue uno de los grandes protagonistas de su entrevista.

Hace unos meses, Vaquero ya se sinceró sobre el establecimiento en el podcast Konverxo, donde se abrió en canal sobre el cierre de este negocio.

Entonces, más allá de confesar que la película está "rebasada en la historia real" de su bar, Vaquero también reveló que antes de bajar la persiana de forma definitiva, se vio obligado a recurrir a sus amigos humoristas, de los cuales muchos de ellos ya habían actuado en múltiples ocasiones en el establecimiento, para intentar salvarlo.

"Pedía a las grandes estrellas, a las que ni siquiera podíamos pagar, que actuaran gratis para poder salvar el bar", explicó el humorista.

A lo que añadió: "Hay una frase en la película que me encanta de Luis Piedrahita que dice: 'Vaquero nos ha pedido a los amigos que vengamos a actuar gratis a su bar para con el dinero de las entradas poder salvar el bar y seguir perdiendo dinero'. Y es la realidad de lo que pasaba en El Rincón del Erizo".

Si bien, esto no sirvió de mucho, puesto que, aunque fueron muchos los rostros conocidos que trataron de ayudar al vallisoletano, finalmente, Vaquero terminó cerrando el negocio, sin ni siquiera llegar a traspasarlo y, al parecer, para siempre.

Ayer, durante su visita a El Hormiguero, Vaquero siguió compartiendo detalles de este negocio que tanto marcó su vida. Si bien, en esta ocasión, el humorista optó por recordar algunas de las grandes anécdotas vividas en él: "Pasaron cosas muy locas", empezó diciendo.

Así, se refirió a las fiestas en las que, según confesó, "se juntaban los celebrities más fiesteros de la tele con los más fiesteros de mi barrio", estando las risas y la diversión totalmente garantizadas, y también a uno de los momentos más insólitos de la historia de El Rincón del Erizo.

"He llegado a ver a un tío sangrando por la boca. Yo le pregunté qué qué le pasaba y él me dijo: 'me he comido una bombilla'. Claro, yo ya le avisé de que no se podían comer bombillas en mi bar", reveló entre risas. Y como este, otros tantos momentos anecdóticos grabados para el recuerdo.

Preguntado por la película, Vaquero también compartió algunos de los detalles más desconocidos de la misma. Así tras anunciar que en ella salen "prácticamente todos los cómicos de España", el humorista aclaró si les había pagado por el trabajo realizado.

"A los cómicos de carretera, que tienen un caché más bajo, se les ha pagado, pero a las grandes estrellas ni se lo hemos ofrecido, para pagarles tendría que pasear a los perros de todo Madrid durante tres meses", bromeó.

Acto seguido el vallisoletano recordó uno de los momentos más graciosos vividos durante el rodaje y que alertó a la Guardia Civil: "Un lugareño llamó a la Guardia Civil para decir que había visto a JJ Vaquero en una tumba y que pensaba que era un ajuste de cuentas, entonces los agentes se presentaron y ya vieron que estábamos rodando la película. Fue bastante gracioso", expresó.

Durante su entrevista con Pablo Motos, Vaquero también confesó que tuvo que elegir entre una de sus hijas para el elenco, porque, aunque su intención era que actuasen las dos, el director le dijo que lo "más sencillo" era que únicamente participase una.

"Me dijo que llevase a la que más me odia, así que un día al volver a casa después de varios días de actuaciones, en vez de abrir con la llave, decidí llamar al timbre para comprobar cuál de las dos me había echado más de menos. Me abrió Luna y al verme dijo: 'jo, no es el pedido del Shein', así que me quedé con ella", explicó entre risas.

Entonces, Vaquero también se atrevió a revelar un momento muy gracioso de su vida en el que tuvo que decir 'sujétame el cubata'.

Fue en Las Águedas de 1998, el vallisoletano se encontraba tomando una copa con un amigo en un salón de celebraciones a las afueras de su barrio y de pronto el dueño se acercó a ellos para contarles que tenía a unas señoras cenando en otro salón que habían contratado un striptease, pero que el boy no se había presentado.

"Nos dijo que si lo hacíamos nosotros nos daba 10.000 pesetas, así que mi amigo dijo 'sujétame el cubata' y yo 'sujétame la ropa', era mucho dinero", afirmó.

Pero la cosa no quedó ahí. Ambos empezaron a desnudarse y cuando a Vaquero únicamente le quedaba el calzoncillo por quitarse de pronto escuchó 'José Juan'. "Miré y estaban mi madre y mi tía", aclaró, provocando las carcajadas entre todos los presentes.

"El alcohol es peligroso"

Vaquero protagonizó así una noche llena de humor y mucha diversión en la que ha sido su casa durante 13 años. Pero no todo fueron risas.

En un momento dado, el humorista también se sinceró sobre sus problemas con el alcohol e incluso aprovechó la ocasión para dar un consejo a "la gente que, como yo, no sabe parar".

En este sentido, el cómico confesó cuándo decidió poner remedio a su problema: "Me vi borracho en el entierro de mi suegra y un día también me pillé mintiéndome a mí mismo, así que dije: 'esto no puede ser', busqué ayuda profesional para dejar todo lo que me sobraba y me refugié en el deporte, que para mí siempre ha sido una ayuda increíble", expresó.

Tras ello, se dirigió a los espectadores, para, ahora ya sí, darles su mejor consejo: "A la gente que tiende a ser adicta a algo, que huya del alcohol, que es muy peligroso, y cuando alguien piense que él solo no lo puede frenar, que lo diga en alto. A partir de ahí, todo es más fácil", advirtió.

A lo que añadió: "Yo tampoco tenía fuerza de voluntad, pero solo se lo dije una vez a mi mujer y funcionó", concluyó.

Sin duda, una visita muy especial en la que el conocido humorista vallisoletano dejó grandes momentazos.