De izquierda a derecha: Sofía Molaguero, Roberto Sanz y Chavi Martín en el nuevo restaurante Lógico

De izquierda a derecha: Sofía Molaguero, Roberto Sanz y Chavi Martín en el nuevo restaurante Lógico

Valladolid

Llega al centro de Valladolid el nuevo restaurante de Chavi, Sofi y Rober: "Donde más cómodos nos sentimos es en los guisos"

Artífices de dos establecimientos de éxito en el barrio de Parquesol, desembarcan en el corazón de la ciudad del Pisuerga con una apuesta por la cocina de mercado, las carnes, el marisco y el pescado del día.

Más noticiasEl joven empresario hostelero que llegó "por amor al vino" y ahora es un caso de éxito en este barrio de Valladolid

Publicada
Actualizada

Cocina de mercado basada en la tradición, con los guisos como punto fuerte, en la parte "lógica" del restaurante. Mariscos y pescados del día, además de diferentes cortes de carnes. Una carta renovada a diario. Innovación y propuestas más atrevidas en su zona "ilógica", en un ambiente más desenfadado e informal.

Chavi Martín (5-7-1993), Sofía Molaguero (6-6-1994) y Roberto Sanz (8-12-2001) desembarcan en pleno centro de Valladolid con el Restaurante Lógico, un nuevo proyecto que dará valor añadido al centro neurálgico de la hostelería de la ciudad del Pisuerga y que ya tiene fecha de apertura.

Será la semana del 16 al 22 de junio cuando Lógico abra sus puertas por primera vez. Situados entre las calles Caridad y Pasión, a pocos metros de la Plaza Mayor y del pleno centro de actividad hostelera y de ocio en la Plaza Martí y Monsó.

Chavi y Sofi, como la conocen (casi) todos, son pareja, y Rober, para los amigos, lleva acompañándoles en esta aventura hostelera desde hace más de dos años y medio en otros dos modelos de éxito que los jóvenes vallisoletanos tienen en Parquesol - La Habana Bar y el Gastrobar DO -. Ahora, se convierten en socios.

Aunque la idea de abrir algo en el centro sobrevolaba sus cabezas, lo cierto es que no era en estos momentos. Sin embargo, surgió el local que hoy se ha convertido en el Restaurante Lógico y decidieron lanzarse a la aventura. "Sí que es algo que teníamos en mente, pero que no queríamos igual hacerlo tan pronto", resalta Chavi.

La pieza que faltaba

Fue precisamente Rober la pieza que necesitaban en su puzzle, según explican. "Tiene la valentía, el coraje y la constancia que hace falta", asegura Sofía. Incluso el propio joven les llega a calificar de "familia", quien desprende de esta combinación un fruto que le "viene muy bien para madurar".

Lógico nace de una palabra que "los tres decimos mucho". El restaurante está planteado de tal manera que combina dos ambientes. Una superior, a pie de calle, en la que encontrar un lugar más desenfadado, comida más atrevida como sus mollejas "ilógicas" que, en vez de hacerse con ajo y jamón, ellos las preparan con crema de boletus, una de huevos y foie. También copas y cócteles.

La segunda parte, subterránea, está orientada al restaurante, con esa gastronomía tradicional, guisos, mariscos, pescados y carnes. Un espacio donde también degustar los vinos de la tierra, aunque también de otros lugares. "Queremos jugar con esos dos ambientes", apunta Chavi Martín.

Sofía Moleguero, Roberto Sanz y Chavi Martín en la sala del nuevo Restaurante Lógico en Valladolid

Sofía Moleguero, Roberto Sanz y Chavi Martín en la sala del nuevo Restaurante Lógico en Valladolid

Una apuesta por lo tradicional que también les genera "respeto" porque con este modelo "te sales un poco de los estándares que se están llevando ahora", más orientados a las franquicias y cocinas más industriales.

Pero sin embargo, una apuesta con la que están convencidos. "No es ni mejor ni peor, pero es lo que nos gusta comer", aclara Chavi. Rober añade que su identidad estará marcada por las "muchas ganas de hacer cosas". Sofía garantiza "las ganas, la ilusión y mantener siempre la humildad y los pies en la tierra". "Sabemos que es algo muy complicado", añade.

Chavi se muestra ilusionado por este proyecto, ya que "es una oportunidad muy buena", pero mantiene esa humildad a la que hacía referencia Sofía, ya que "no somos mejor que nadie, venimos aquí a aprender".

"Cocina humilde"

"Va a ser una cocina humilde, con muy buen producto y la mejor atención posible. Queremos hacer las cosas bien porque queremos estar muchos años", afirma con rotundidad Chavi Martín.

Estos tres jóvenes vallisoletanos tendrán sus propias labores encomendadas. Sofía será el "cerebro" del negocio, la que "hace el trabajo invisible, de gestión" y la que les pone a Rober y Chavi "los pies en el suelo".

Roberto será el "pulmón" de Lógico, quien atienda en sala por su "juventud y más ganas de comerse el mundo". Chavi, por su parte, será el "corazón" del restaurante, quien hace todo "un poco más romántico" desde la cocina. "Entre los tres conseguimos que salgan cosas bonitas", garantiza Sofía.

En esta aventura estarán acompañados por una plantilla fija de otras cinco o seis personas, que en sus momentos de máxima actividad, especialmente los fines de semana, podrán alcanzar hasta los 14 trabajadores.

Para Chavi, el germen de hostelero de esta historia que comenzó con el DO, el proyecto de Lógico es el que "más ilusión" le hace y "más está disfrutando". "Has estado aprendiendo todos estos años y aquí es donde puedes dar un salto más", añade Sofía.

En Lógico han encontrado la oportunidad para "poder hacer lo que nos apasiona, la comida de mercado, con producto y guisos tradicionales que en Parquesol es verdad que no hay tanto público para podernos atrever". "Aquí estamos labrando y dando forma a un sueño que teníamos y que se está haciendo realidad", asegura el "cerebro" de Lógico.

"Probar todo"

Una de las principales bazas del restaurante será la variedad de su carta y las oportunidades para probar sus distintos platos. "Queremos por ejemplo que haya una mesa de cuatro y no tengan que comerse todos una fabada. Vamos a hacer cazuelitas pequeñas para que si ese día hay tres o cuatro guisos puedan probarlos todos", avanza Chavi.

Restaurante Lógico llega de esta forma al pleno corazón hostelero de Valladolid con "humildad, ganas, ilusión y la incertidumbre y el miedo de empezarnos a mover en un nuevo sitio". De Parquesol al centro con el objetivo de mantener "los pies en la tierra y trabajarlo mucho".

"Queremos hacernos hueco con humildad, con la inquietud y la ambición de la gente joven que somos y el respeto y la admiración que tenemos a todos los de alrededor. Venimos de nuestro barrio, pero llegamos aquí con ganas, con ilusión y con los pies de plomo, sabemos que nos enfrentamos a un público exigente", sentencia Sofía.