Viajan a Roma para celebrar y acaban despidiendo al Papa: la "inolvidable" aventura de unos peregrinos de Valladolid

Miles de personas de todos los rincones del mundo han tenido el gran honor de acudir a la capilla ardiente del Papa Francisco, fallecido el pasado 21 de abril a los 88 años de edad. 

Y es que, curiosamente, algunas de ellas proceden de Valladolid. El pasado Lunes de Pascua, el mismo día en el que el pontífice perdió la vida, un grupo de 63 peregrinos, procedentes del municipio de Laguna de Duero y con su párroco, Jesús García Gañán a la cabeza, puso rumbo a Roma con la pretensión de iniciar su peregrinación jubilar con motivo del Año Santo ‘Peregrinos de Esperanza’. 

Sin embargo, nada más pisar suelo italiano se vieron sorprendidos por la muerte del Santo Padre. Nunca podrían haber llegado a imaginar que en su viaje acabarían despidiéndose en primera persona del Papa Francisco. Pero así ha sido. 

Castilla y León llora la muerte del Papa Francisco: "Su legado de humildad perdurará"

El pasado viernes, los peregrinos tenían previsto celebrar una misa en una iglesia junto al Vaticano, pero, tal y como aseguran desde la Archidiócesis de Valladolid, "los planes de Dios son inescrutables". 

Tal y como ha explicado García Gañán a IEV, después de levantarse a las 05:30 para acudir a la misa prevista a las 08:00 y trasladarse a la iglesia en cuestión, una vez en la puerta "nos dicen que nos la han cancelado", dándose la circunstancia de que en ese mismo templo había un segundo grupo con una misa programada a la misma hora. 

Entonces, estos acordaron hacer cola para acceder a la capilla ardiente del Papa por la tarde, después de ver los Museos Vaticanos. 

Sin embargo, finalmente cambiaron nuevamente la programación de su peregrinación y le pidieron a su guía turístico que los llevara inmediatamente al Vaticano para intentar dar su último adiós al Santo Padre. 

A las 08:15 ya estaban “en el control”, prosigue el sacerdote de la Archidiócesis de Valladolid. Y en torno a las 09:00, atravesando la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro. Increíble, pero cierto. 

El Papa que nunca viajó a Castilla y León pero recibió una capa alistana, vino de Valladolid y una camiseta

“Parece que Dios lo ha hecho”, repite García Gañán aún sorprendido. "No esperábamos vivir este momento histórico. Dios nos lo ha regalado en este penúltimo día de la peregrinación”, ha expresado con la voz entrecortada por la emoción.

Una vez dentro de la Basílica y ante el cuerpo sin vida del Papa Francisco, este grupo de fieles rezó "por toda nuestra Diócesis de Valladolid y por las intenciones que cada uno de nosotros llevamos en nuestro corazón". Un momento que, según el párroco, "no se puede describir con palabras". 

El grupo de peregrinos de Laguna de Duero en Roma Archidiócesis de Valladolid

Han sido apenas “unos segundos” ante el Santo Padre porque la cola de personas, aunque “fluida”, puntualiza, fue “larga” desde que el pasado miércoles abriera la capilla ardiente en el Vaticano.

Pero también unos instantes muy emotivos en los que, tras despedirse del Papa, los fieles se abrazaron y rompieron a llorar. Se sintieron "acogidos como una gran familia" en torno al 266º sucesor de San Pedro.

La divertida broma que se hizo viral del Papa Francisco a un seminarista de Valladolid: "¿Qué culpa tengo yo?”

Ya fuera de la Basílica, los feligreses de la Parroquia Asunción de Nuestra Señora de Laguna de Duero quisieron compartir sus sentimientos con toda la Archidiócesis de Valladolid en un vídeo que hicieron llegar desde la misma Plaza de San Pedro.

"Una sensación única”, afirmaba una mujer de mediana edad mientras otra más joven tan solo acertaba a definir lo vivido con una única palabra: “Abrumación”.

Entre lágrimas y dirigiendo un beso al cielo, otra mujer dio las “gracias a Dios” por haber podido vivir un momento “inolvidable, súper emocionante”.