La Guardia Civil ha destruido dos granadas de mano en un almacén de patatas ubicado en la localidad vallisoletana de Íscar. Fueron localizadas entre dichas patatas en un contenedor que procedía de Francia.

El Equipo de Desactivación de Explosivos (EDEX) de la Comandancia de Valladolid se trasladó hasta el lugar ante la incidencia. Todo para verificar que los objetos hallados se correspondían con dos granadas de mano. Eran de fragmentación modelo Mills y fabricación inglesa. Estaban en un muy mal estado de conservación, oxidadas, posiblemente eran de la I Guerra Mundial. El equipo destruyó dicho material.

Los agentes han alertado de la peligrosidad de estos artefactos. Si no se les somete a ninguna acción permanecen en estado “latente” pero en caso de cualquier manipulación pueden explotar.

Existe, en ocasiones, riesgo de confianza debido a que el objeto se encuentra deteriorado pero su carga explosiva es muy peligrosa.

La Benemérita pide no tocar ni mover o alterar dichos objetos y dar aviso a la Guardia Civil, a través del número 062.