Las aventuras de Tadeo Jones llevan la firma de un nombre propio: Enrique Gato. Es vallisoletano y tras estudiar una carrera de Informática se dio cuenta de que el mundo tecnológico y artístico le gustaba a partes iguales. El director de cine acaba de estrenar la tercera parte llamada 'La tabla esmeralda' donde el personaje principal se adentra en una fascinante aventura con sus colegas arqueólogos. Una huida llena de aventuras será el hilo conductor de esta increíble historia en la que intentará acabar con la maldición de la momia.

Enrique Gato ha hablado con EL ESPAÑOL Noticias de Castilla y León sobre esta saga y sus metas en el mundo de la gran pantalla. Explicando cómo empezó en esta profesión y dando alguna pista sobre el icónico personaje que ha creado y su futuro en el cine. Además, ha revelado que ha sido la película con la que más se ha reído grabando el doblaje. Un trabajo que, gracias a la participación de actores y actrices como Michelle Jenner, José Corbacho, Alexandra Jiménez o Luis Posada, entre otros, le ha resultado "extremadamente fácil". 

Estudió ingeniería informática y se ha acabado dedicando al cine, ¿cómo fue este cambio en su vida?

Precisamente, me he dedicado a este mundo por esa carrera de informática. Siempre me ha gustado lo tecnológico y artístico, son dos partes de mí entre las que no puedo elegir. Mientras estudiaba la carrera, me encontré una asociación que estaba empezando a investigar en el arte por el ordenador, fue como una piedra filosofal. Descubrí algo que juntaba mis dos pasiones: el mundo técnico y artístico. Mediante ellos empecé a investigar y enredar cómo se hacía esto: crear animaciones de objetos, gráficos por ordenador y todo aquello que me apasionaba. La verdad es que, en aquel momento, no había mucho conocimiento sobre el tema, era todo precario y conseguí buscarme la vida para aprender.

La saga continúa y se ha estrenado la tercera película llamada ‘La tabla esmeralda’  ¿qué diferencias hay respecto a las anteriores?

En esta tercera, el público infantil sigue disfrutando de los personajes y el humor, pero los adultos tienen capas extra. Lo van a pasar mucho mejor que en las anteriores. La gente ya nos está dando 'feedback' y nos dicen que agradecen esa complejidad adicional que hace que la película sea más rica, grande y elaborada. Dentro de una comedia está bien cuidar la parte narrativa. Los niños se lo van a pasar como siempre y los adultos como nunca.

Hay personas que consideran que este tipo de largometraje está destinado solo al público infantil, ¿cómo se puede evitar que cataloguen las películas antes de tiempo?

Hace ya muchos años que se demostró que este cine de animación, desde que Pixar entró en juego, no es infantil. Es familiar. Es verdad que sigue habiendo películas más infantiles, pero no todas. Una pauta que llevo a rajatabla es que cada persona que entre en la sala tiene que disfrutar. Es en la película que más se ha empujado en el público adulto para que no tenga la sensación de que solo han ido a acompañar a los pequeños al cine.

Es un largometraje hecho en plena pandemia, ¿qué dificultades se ha encontrado?

El susto inicial fue tremendo. No sabía si podía seguir adelante, toda la gente de producción estaba mirando al techo de la noche a la mañana. Por suerte, nuestro trabajo solo depende de una pantalla de ordenador y una conexión a internet, es todo lo que nos hace falta. Pudimos montarlo todo para deslocalizar el estudio y que todo el mundo siguiese trabajando desde casa. Las dos primeras semanas fueron caóticas, hasta que conseguimos adaptarnos, encima estábamos en casa con los pequeños, ese era el hándicap real. Te diría que, en un mes y medio, dos meses, estaba el estudio trabajando con total normalidad y ya se convirtió en nuestro método de trabajo.

Se suele decir que todos los personajes tienen una parte personal del director, ¿podríamos decir que Tadeo Jones tiene detalles de Enrique Gato?

Muchas cosas. Quizá más que un aspecto personal, al final Tadeo bebe de algo que me ha apasionado siempre, el cómico adicional español y el cine de aventuras de los 80. Eso es lo que intento que se refleje, todo aquello que me hacía volar la cabeza de pequeño. Que termine en la pantalla y que genere la sensación del cine de aventuras que me encantaba, pero en el tono de comedia familiar. En el fondo tienen una base enorme en esos clásicos españoles.

'La tabla esmeralda' se está convirtiendo en el mejor estreno nacional 2022 y solo lleva desde el día 26, ¿qué sensación le deja?

Un gustazo enorme por bastantes motivos, tenemos que alegrarnos mucho por la taquilla. Quiero que la gente tenga una razón para volver a los cines, las salas, que vuelvan a llenarse cada fin de semana y que signifique un empujón importante para devolver las salas a lo que eran antes de la pandemia. Este verano parecía que iba a ser el punto de inflexión, que se iba a recuperar, algunas películas lo han conseguido, pero no tantas como deberían. Hay que seguir remando, intentando que el cine siga siendo una gran alternativa de ocio; como hasta ahora.

Todo el mundo habla de Tadeo Jones, pero ha habido grandes personajes estrella, ¿cuál ha sido su favorito en esta nueva película?

Sin duda, Ramona. Es el gran descubrimiento de esta película, el personaje con el que todos se quedan. Sabíamos que iba a funcionar muy bien, pero ha superado con creces las expectativas. Todo el mundo lo comenta cuando sale de la película.

¿Habrá más aventuras de Tadeo Jones?

Siempre hay muchas ideas. Cuando nos ponemos a desarrollar una película, tenemos muchas, pero el triple se queda en un cajón sin ver la luz. Hay millones de cosas que podemos hacer con esos personajes todavía. Hay más proyectos armándose, poniéndose en marcha, tenemos que ver el siguiente paso. Si conseguimos encontrar una buena historia, un buen camino, para los personajes en una aventura, decidiremos si lo tiramos adelante o no.

Cuenta con numerosas películas de gran éxito, galardonado con siete premios Goya y 'Las Aventuras de Tadeo Jones' ha estado preseleccionada para un Óscar, ¿qué le gustaría conseguir más allá de todo ello?

Para mí, por suerte, el hacer películas en sí no es el reto, sino el mejorar. El objetivo final va más allá, conseguir generar suficientes proyectos, estudios, para que haya una industria lo más estable y sólida en España. La idea es poder hacerlas desde España y generar ese núcleo de industria. Cada vez hay más proyectos, películas. Entra dinero de todo el mundo para producir en nuestro país; es ahí donde tenemos que terminar de apuntalar.

Ha trabajado con actores habituales y con algunos nuevos, ¿cómo ha sido la grabación?

Con los que ya son habituales de la película, extremadamente fácil, conocen los personajes al milímetro. Es de muy lejos la película con la que más me he reído haciendo el doblaje. Hemos ido a jugar y no a ver los tecnicismos. Han sido una fiesta las sesiones de doblaje.

Finalmente, ¿cuál podría decir que son sus inspiraciones en el mundo del cine?

Directores de animación hay dos que son los que más me inspiran cada día, a los que investigo y reviso: Brad Bird, el director de 'Ratatouille' y 'Los Increíbles'. Además de Andrew Stanton, el de 'Buscando a Nemo' o 'WALL·E'.