Después de la celebración de la Semana Santa, la calle Miguel Íscar de Valladolid sufrirá una nueva remodelación y se volverá a los tres carriles con la eliminación del que actualmente permite el paso, solo al autobús urbano hacia la Plaza de España. Un cambio que vuelve al pasado puesto que, así, solo se podrá circular desde esa plaza hacia la de Zorrilla.

Esta medida pretende eliminar los atascos que se producen en esa vía en determinados horarios y que tantas quejas han provocado por parte de los conductores de vehículos privados. Así, el concejal de Movilidad, Luis Vélez, confirmó que “los técnicos están trabajando ya en el proyecto para abordarlo en cuanto acabe la Semana Santa porque hay que tener en cuenta que en ese periodo ya hay muchos desvíos de líneas de autobuses y hemos decidido planificarlo así”.

Para ello se hará una “pequeña obra en el cruce de Miguel Íscar con la Acera de Recoletos y eso permitirá que, cambiada la señalización, se vuelva a contra con los tres carriles en dirección al Paseo de Zorrilla como ya estaba hace bastantes años”. Uno será de uso exclusivo para el transporte público y los otros dos para el paso de vehículos privados”.

Este cambio, además, provocará el cambio en tres líneas de Auvasa, la 7, 18 y 19. Todas ellas llegarán al centro de la ciudad “por el Paseo de Filipinos y calle Gamazo, lo que provocará una ampliación del recorrido” así como más tiempo para el trayecto estimado en “alrededor de un minuto y medio más sobre el actual”.