Una de las apuestas importantes dentro de la programación navideña del Ayuntamiento de Valladolid ha sido la de instalar un ambicioso mercado navideño en la Plaza Mayor. Con 58 casetas ha hecho que su nivel esté “sin pecar de exceso de arrogancia, por encima de los mercados navideños de centro Europa”. Al menos así lo ha subrayado el presidente de la Federación de Organizaciones Artesanas de Castilla y León (Foacal), Félix Sanz.

Es más, ha destacado que “los productos son de proximidad, con poco impacto en la huella de carbono y realmente nos diferencia del resto de mercados de Europa”. Incluso ha detallado que “muchas veces esos mercados están sobrevalorados porque muchos de los productos que venden les llegan de Asia siendo muy difícil encontrar productos artesanales del entorno”.

“Nuestros puestos son de mucha calidad con la principal diferencia de que todos los productos que se presentan están realizados por los propios artesanos”, ha indicado. Además, para Sanz es muy importante que “no hay producto de reventa ni de importación”.

Son puestos, la mayoría, del entorno de Castilla y León y del resto de España con lo cual “también garantizamos el mantenimiento de tejidos económicos sobre todo en el medio rural que es donde están la mayoría de las industrias artesanas”. De hecho, el extenso catálogo de creaciones ajenas a la producción industrial se nutre mayoritariamente de talleres de Castilla y León: 44 de las 58 firmas artesanas corresponden a profesionales de la Comunidad.

36 de ellos ejercen distintos oficios artísticos y artesanales y ocho trabajan en el sector de la alimentación. Entre representantes de todas las provincias castellanas y leonesas, destaca la presencia local con 24 vallisoletanos, 14 de ellos radicados en la capital y el resto en Ciguñuela, Simancas, Medina del Campo, Zaratán, Fuensaldaña, Arroyo de la Encomienda, Cabezón de Pisuerga, Aldeamayor de San Martín, Arrabal de Portillo y Villanubla.

Además, hay seis expositores de fuera que han llegado desde Andalucía, dos de Cataluña, dos de la Comunidad Valenciana, uno de Galicia, otro de Cantabria, uno de Extremadura y uno más de Portugal.

Cambio de lugar para concentrarse en la Plaza Mayor

Respecto al cambio de ubicación de una de las zonas del mercado para concentrarlo todo en el Plaza Mayor, Sanz ha explicado que “estamos muy satisfechos con el arranque, aunque es verdad que, en esta primera semana previa al puente de la Constitución es poco fiable, pero de momento está yendo muy bien”.

Pero, aun así, ha reconocido que “al principio, como todos los cambios, provocó algunos roces y reticencias por la incertidumbre que provoca proponer otros espacios”. Una circunstancia que “a la semana de empezar ya ha desaparecido porque todo el mundo está ahora mismo contento”.

Mercado navideño

“La respuesta del público, tanto de los vallisoletanos como de la gente que se acerca a la ciudad, es muy positiva porque se está vendiendo y los comerciantes están contentos”, ha señalado.

Una referencia en la Comunidad

Para Sanz, este mercado de Valladolid “es referente en Castilla y León por la calidad de lo que se vende, por la diversidad o la ubicación”. Eso sí, matizó que “no quiero que se entienda como minusvalorar otros mercados que se están haciendo con mucho esfuerzo y buen resultado en el resto de la Comunidad Autónoma, pero es verdad que el de Valladolid está marcando el camino de por donde van a ir este tipo de mercados”.

Por último, quiso reiterar la importancia “de la actividad artesanal en nuestra Comunidad Autónoma, como generador de empleo para muchas personas que están ligadas a ella, sobro todo en el mundo rural. Detrás de cada objeto hay una persona con mucho talento que ha trabajado para que ese producto acompañe a quien lo compra durante mucho tiempo”.

“No es solo comprar regalos, sino mantener toda la estructura económica que se mueve alrededor”, ha concluido.

Primer lustro de existencia

Este año, el quinto consecutivo en el que se celebra el mercado, se ha producido una ampliación en cuanto a su duración, al ir desde el pasado 25 de noviembre, tres días antes que en la pasada edición, para mantener la apertura hasta el mismo día de Reyes. De este modo, el centro de la celebración y el ambiente navideños contará a lo largo de 43 jornadas con la amplia oferta que aportan.

Además de productos típicos de estas fechas, como belenes, juguetes y marionetas, garrapiñadas, frutos secos, conservas o repostería, los asistentes encontrarán un variado repertorio de artículos de joyería, cuero, estampación, textil, encuadernación, cosmética, cerería, vidrio o alfarería; muestra todo ello del patrimonio vivo que representan la artesanía y los oficios tradicionales.

Tras la jornada inaugural, en que los puestos del mercado abrieron de 17:30 a 21:00 horas, el horario de apertura será desde las 12:00 a las 14:00 horas, y desde las 17:30 a las 21:00, entre el 26 de noviembre y el 2 de diciembre y del 9 al 16 de diciembre; y se ampliará entre el 3 y el 8 de diciembre y del 17 de diciembre al 6 de enero, periodos en los que se mantendrá la actividad desde las 11:00 a las 14:30 horas y desde las 17:30 hasta las 22:00 horas.