Uno de los sectores económicos que más riqueza crea en Salamanca es la hostelería que, por la pandemia, pasa uno de sus peores momentos. Tal es así, que, según los datos ofrecidos por el presidente de la Asociación, Álvaro Juanes, la caída de la facturación en la campaña de Navidad se acerca al 40% con respecto a 2019.

Esta cifra tiene su fundamento en las cancelaciones provocadas por la 6.ª ola de la pandemia de COVID-19, que están por encima del 70%. A ello también se suma el bajo número de turistas que se ha desplazado a la capital salmantina, por el mismo motivo sanitario.

Por ello, explica Juanes, "nos enfrentamos a la peor cuesta de enero conocida por el sector" debido a la sexta ola. Los problemas principales, en este momento, se centran en la gran cantidad de bajas laborales, que han obligado a cerrar muchos negocios de hostelería donde las fechas de Navidad. Alguno de ellos, según han explicado a este diario, tenía concretadas 120 reservas para el día de Reyes, y tuvo que cerrar el local por infección del personal.

Además, no debe olvidarse también el confinamiento de los clientes y, añadido, el aumento generalizado de los costes de los productos con un IPC "por las nubes".

"Esperanza en Semana Santa"

El sector espera que la sexta ola alcanza su pico y comience a descender para poder tener una Semana Santa de "esperanza", asegura Álvaro Juanes. Estas fechas pueden considerarse como de las mejores para la hostelería y el turismo salmantino. Suponen, como antes de la pandemia, un lleno total en hoteles, restaurantes y ocio nocturno.