La inflación anual estimada del Índice de Precios al Consumo (IPC) subió en abril hasta el 1% en la provincia de Salamanca, de acuerdo con el indicador elaborado por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Es una décima menos que la media nacional y dos más que el mes anterior.

Los grupos con mayor influencia positiva en el aumento de la tasa anual son, en primer lugar, el transporte, con una variación anual del 2,5%, debido a que los precios de los carburantes y lubricantes suben más este mes que en abril del pasado año. También suben alimentos y bebidas no alcohólicas, cuya tasa se incrementa dos décimas y se sitúa en el 2,2%. Destaca en esta evolución el aumento de los precios del pescado y marisco, mayor que el de abril del año anterior. E influyen al alza las comunicaciones, que presenta una variación anual del 2,6%, debido en su mayoría a la subida de los precios de los servicios de telefonía y fax, superior este año a la reflejada en 2017.

La inflación no subió más gracias al efecto a la baja de los primeros compases de la temporada turística. Así, el grupo de ocio y cultura bajó hasta –0,6%. Este comportamiento es consecuencia, en su mayor parte, de la bajada de los precios de los paquetes turísticos, frente a la subida registrada en 2017. En hoteles, cafés y restaurantes bajó al 0,1%, debido en su mayoría a que los precios de los servicios de alojamiento suben menos en abril de este año que el mismo mes del año anterior.

Además, influyó a la baja la vivienda, hasta el 0,7%, a causa del descenso de los precios del gas, que aumentaron el año pasado. Cabe reseñar también, aunque en sentido contrario, el incremento de los precios del gasóleo para calefacción, frente a la disminución de 2017, y la subida de los precios de la electricidad, que se mantuvieron estables el año anterior.